Daniela Maturana, responsable de Gerencia Social de Comfama, compartió en el Foro Mujeres Poderosas 2025 su visión sobre liderazgo con propósito, capitalismo consciente y diversidad como motor de innovación en las organizaciones. Una conversación inspiradora que llama a la acción.

En el marco del Foro Mujeres Poderosas 2025, organizado por Forbes Colombia, se llevó a cabo un panel esencial para entender el papel transformador del liderazgo femenino: “El rol de las mujeres líderes en el propósito, la innovación y el triple impacto”. Una de las voces clave encuentro fue la de Daniela Maturana, Responsable de Gerencia Social en Comfama, quien ha liderado desde lo público y lo privado con una profunda convicción de impacto social.

“Liderar es guiar hacia un resultado, pero sobre todo es liderar con propósito. Siempre nos estamos preguntando el para qué y el porqué de nuestras acciones”, expresó Maturana al iniciar su intervención. Con un estilo de liderazgo centrado en la empatía, la escucha activa y la regeneración colectiva, explicó cómo su propósito de vida ha sido “tejer humanidad”, construyendo puentes entre personas, empresas y diversidades.

Desde su rol en Comfama, una de las principales cajas de compensación de Colombia, Daniela impulsa una visión de capitalismo consciente basado en los pilares de propósito superior, liderazgo consciente, orientación hacia los stakeholders y una cultura organizacional sólida. “El capitalismo no es malo en sí mismo. Ha generado riqueza, pero también desigualdad. Lo que necesitamos son empresas que entiendan su rol social y humano en el desarrollo del país”, señaló.

Inspirada por teorías como la de Raj Sisodia y John Mackey, la gerencia social de Comfama actúa bajo un marco que promueve un equilibrio entre productividad, rentabilidad y bienestar colectivo. “Las empresas deben preguntarse cuál es el impacto que quieren dejar en las personas, el medio ambiente y sus comunidades”, añadió.

Uno de los pilares de su gestión es la diversidad, equidad e inclusión (DEI), un enfoque que, según Maturana, debe ir más allá de un área de responsabilidad social o una moda pasajera. “Abrazar la diversidad es un deber ético. No basta con decir que el 70% de mi fuerza laboral son mujeres si no se garantizan políticas de equidad salarial, conciliación laboral o participación real en cargos de liderazgo”, afirmó.

Desde Comfama, han creado programas que acompañan a empresas en el diseño de estrategias de DEI, desde la cultura organizacional hasta la cadena de abastecimiento. “¿Qué tal si le compro a mujeres rurales o cabeza de hogar? ¿Qué tal si diseño productos desde una lente inclusiva?”, plantea Maturana como preguntas clave para transformar las organizaciones.

Uno de los ejemplos más potentes de su gestión es el programa Mujeres Líderes, una iniciativa que ya ha impactado a cerca de 700 mujeres en Antioquia. Diseñado para cerrar brechas de género en el mundo corporativo, el programa identifica mujeres con potencial de liderazgo dentro de las empresas, les brinda formación, mentoría y una hoja de ruta para su desarrollo profesional. Los resultados son contundentes, 41 % han sido promovidas y muchas han logrado elevar su visibilidad dentro de sus organizaciones.

“Una mujer me dijo que, por primera vez, fue invitada a una reunión directiva y su voz fue tenida en cuenta. Eso también es un cambio poderoso”, relató Daniela. Estos pequeños avances —aparentemente sutiles— son los que abren caminos duraderos.

Para quienes quieren comenzar a liderar con impacto, Maturana sugiere empezar con una radiografía interna, ¿cómo estoy hoy? ¿Cuántas mujeres hay en mi organización? ¿Qué condiciones tienen? “No basta con medir, hay que mirar la profundidad. ¿Hay permisos para maternidad y paternidad? ¿Equidad salarial real? ¿Sesgos en las convocatorias? Hasta el lenguaje y las imágenes importan”, puntualizó.

Además, destacó que empresas con políticas sólidas de inclusión son hasta un 36% más rentables, según estudios de Boston Consulting Group y McKinsey. “Tres de cada cuatro empleados prefieren trabajar en organizaciones que abrazan la diversidad”, dijo.

En sus palabras finales, Daniela hizo un llamado a las nuevas generaciones de mujeres líderes. “Busquen ese propósito que las mueve. Apóyense unas a otras. Una sola puede ir rápido, pero juntas llegamos más lejos”.