La empresa dice que con este proceso busca proteger y preservar las operaciones de la compañía.

Avianca Holdings, así como algunas de sus subsidiarias y afiliadas, solicitaron este domingo acogerse voluntariamente al Capítulo 11 del Código de Bancarrota de los Estados Unidos en el Tribunal de Bancarrota del Distrito Sur de Nueva York, “con el fin de preservar y reorganizar los negocios” del grupo empresarial.

Se conoció que LifeMiles, la empresa de base tecnológica que administra el programa de lealtad no forma parte de la solicitud del Capítulo 11.

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“Los efectos de la pandemia Covid-19 nos han llevado a enfrentar la crisis más desafiante de nuestros 100 años de historia como compañía”, explicó el CEO de Avianca Holdings, Anko van der Werff, CEO, quien a su vez expresó que a pesar de los resultados del plan ‘Avianca2021’, creen que “ante la suspensión total” la operación de pasajeros y una recuperación que será gradual, entrar en este proceso “es un paso necesario para hacer frente a nuestros retos financieros”.

Esta situación es similar a la que tuvo que enfrentar la aerolínea en 2004 cuando fue adquirida por Germán Efromovich.

Según informó la compañía, acogerse a este proceso fue necesario debido al impacto imprevisible de la pandemia Covid-19, que ha provocado una disminución del 90% del tráfico mundial de pasajeros y se espera que reduzca los ingresos de la industria en todo el mundo en US$314.000 millones de dólares, según la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA).

Las operaciones regulares de pasajeros de Avianca han estado en tierra desde mediados de marzo, lo que ha reducido sus ingresos consolidados en más de un 80% y ha ejercido una presión significativa sobre su liquidez.

De esta manera, la mayor empresa aérea de Colombia busca proteger y preservar las operaciones para “continuar sirviendo a los clientes con viajes aéreos seguros y confiables, bajo los más estrictos protocolos de bioseguridad, a medida que se levantan gradualmente las restricciones de viaje generadas por el Covid-19”.

Con esta movida, Avianca también quiere “asegurar la conectividad e impulsar la inversión y el turismo al continuar como la principal aerolínea de Colombia”, prestando servicios a más del 50% del mercado interno en el país y un servicio sin escalas a través de América del Sur, América del Norte y los mercados europeos.

La empresa aspira a continuar con las operaciones de carga, “desempeñando un papel clave en la recuperación económica de Colombia y los demás mercados principales de la compañía después de la pandemia del Covid-19”.

Avianca dijo que pretende preservar los puestos de trabajo en Colombia y otros mercados en los que opera la compañía, siendo directamente responsable de más de 21.000 empleos directos e indirectos en toda América Latina, incluyendo más de 14.000 en Colombia, y trabajando con más de 3.000
proveedores.

Así mismo, espera reestructurar el balance y las obligaciones de la empresa para hacer frente a los efectos de la pandemia del Covid-19, así como gestionar sus responsabilidades, arrendamientos, pedidos de aeronaves y otros compromisos.

Van der Werff manifestó que cuando se levanten las restricciones impuestas por los gobiernos para los viajes aéreos y puedan reanudar gradualmente sus vuelos de pasajeros, esperan contribuir a la reactivación de la economía en Colombia y en otros mercados clave, reincorporando a sus empleados.

“Apreciamos enormemente el compromiso de nuestros colaboradores que han estado al servicio de los más de 30 millones de pasajeros que vuelan con nosotros cada año. Nuestro propósito sigue siendo conectar a las personas, familias y empresas”, añadió.

En medio de esta crisis, Avianca dejó parqueados la mayoría de sus aviones de pasajeros y ofreció licencias no remuneradas, a las que se acogieron más de 17.000 empleados.