La calidad de la educación de los estudiantes y la economía de las familias están en juego. Esto es lo que necesitan las instituciones para reactivarse.

Después de aplanar la curva de contagio, los países tienen que comenzar a trabajar en prevenir los nuevos casos y prevenir el contagio masivo mientras trabajan en formulas para recuperar la economía. La gran pregunta es cómo se priorizan cuales industrias deben reabrir primero para que la economía y su sociedad se recupere de manera rápida y sostenible.

Una metodología establecida por Tomas Pueyo es observar que tan importante es el negocio para la comunidad y que tan probable es que ese tipo negocio esparza el virus. En ese análisis Tomas Pueyo y su equipo declaran que hay industrias en el cuadrante superior derecho de la gráfica adjunta, como los supermercados, que tienen alta probabilidad de propagar el contagio, pero son muy importantes para la comunidad.

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Hay otras industrias en el cuadrante inferior izquierdo de la gráfica adjunta, como los casinos, que tienen baja probabilidad de propagar el contagio, pero no son tan importantes para la comunidad.  

En esta gráfica los colegios e instituciones educativas están en la categoría de altamente relevantes para la comunidad con una probabilidad baja de propagar el contagio. Este análisis asume que las instituciones educativas siguen unas medidas preventivas y protocolos estrictos para evitar la propagación del virus de manera masiva.

Las instituciones educativas se tienen que preparar para poder cumplir con una lista de prioridades dependiendo de la etapa en la que se encuentra su comunidad con respecto a los casos de Covid-19 y su tasa de contagio.

El reporte de McKinsey & Company “Coronavirus COVID-19 Perspectives for education systems” declara unas prioridades para el sector educativo que se enmarcan en las necesidades de: (i) la sociedad, (ii) del estudiante y los padres, (iii) del profesor y (iv) de la institución educativa. Las acciones que se deben ejecutar para cada una de estas prioridades dependen del horizonte de tiempo.

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Existen dos razones por las cuales los gobiernos están priorizando abrir los colegios al mismo tiempo que con industrias de alta necesidad y relevancia: (1) el impacto académico y el (2) impacto económico. Estas dos razones tendrán que ser analizadas frente a los retos que tendrán los colegios al abrir de nuevo que son: (3) Garantizar la continuidad educativa sin importar el escenario que se vuelva realidad y (4) Garantizar que los colegios no se vuelvan focos de contagios masivos.

1. El impacto académico en los estudiantes

Aunque los estudiantes están recibiendo una educación a distancia, la realidad es que muy pocos colegios, profesores, estudiantes y padres de familia estaban preparados para mantener el mismo nivel de rigurosidad y calidad que se reflejaba en la educación presencial. La realidad actual de la educación a distancia tiene un impacto académico desfavorable en los estudiantes que se puede estimar observando el impacto de las vacaciones escolares en la retención del conocimiento del año escolar inmediatamente anterior.

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Un estudio de NWEA estima que en 5 meses de cuarentena los estudiantes podrían regresar a la educación presencial con solo el 50 % de los aprendizajes-objetivo para el año escolar en curso. Las proyecciones varían por materia y por grado, siendo materias como matemáticas y grados inferiores los mas afectados.

El impacto en los rendimientos académicos de los estudiantes en un ambiente sin la preparación adecuada para proveer una educación a distancia de calidad puede ser preocupante. Muchas instituciones educativas están tratando de replicar su modelo presencial en la virtualidad sin aprovechar las ventajas de una educación a distancia para ciertos tipos de aprendizaje.

Para aquellos colegios que tienen un calendario escolar que termina en junio de cada año, la prioridad será continuar dando soporte académico a sus estudiantes y familias en las vacaciones escolares de este año; así los estudiantes no se atrasarían tanto por la educación a distancia, perdiendo parte del conocimiento que se desarrollo en el año escolar 2019-2020.

Algunas instituciones educativas en Latinoamérica están explorando la posibilidad de extender su educación virtual para que coincida con el comienzo de su siguiente año escolar, usualmente en agosto o septiembre. Esto implicaría unos acuerdos importantes de las diferentes partes interesadas, pero podría minimizar el impacto académico negativo en los estudiantes. En Estados Unidos, varios distritos escolares están explorando este tipo de alternativas.

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Para aquellos colegios que tienen un calendario escolar que comienza usualmente en abril de cada año, la prioridad será extender el año escolar 2020-2021 para recuperar esos meses perdidos al principio de la pandemia. La tecnología será la herramienta más clara que tendrán todos los colegios para poder hacer un seguimiento mas personalizado de los avances académicos de cada estudiante.

Esto sería casi imposible lograrlo en el aula de clase normal donde en los mejores casos cada profesor tiene 20 estudiantes. Muchos colegios en Latinoamérica están entendiendo que puede utilizar esta situación coyuntural a su favor y personalizar la enseñanza con programas asincrónicos de alta calidad que le den al profesor la posibilidad de tener mayor control y datos del rendimiento académico por estudiante.

2. Impacto económico en las familias

El impacto económico negativo en los estudiantes y sus familias, por no dar prioridad a la apertura de colegios, puede ser a corto y a largo plazo.

A corto plazo las familias no pueden trabajar a máxima productividad porque los padres tienen que servir de profesores. Esto ocasiona que muchos padres que son empleados pierdan sus trabajos por falta de rendimiento, especialmente si son trabajos que dependen de productividades. En el caso de padres que son independientes el impacto de la falta de productividad se ve reflejada en los rendimientos económicos de sus negocios.

“Trabajar desde casa con sus hijos es un desastre de productividad. Mi hijo de 4 años irrumpe regularmente en la habitación con la esperanza de encontrarme jugando en medio de las videollamadas”.

Nicolás bloom, economista ampliamente conocido por su investigación sobre los beneficios de trabajar desde casa.

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A largo plazo los estudiantes tendrán un impacto en sus ganancias anuales. Según el estudio de Andrea Ichino y Rudolf Winter-Ebmer, los estudiantes que interrumpieron sus estudios en los países que participaron en la segunda guerra mundial recibieron menos ingresos en el futuro que los estudiantes que no interrumpieron sus estudios en los países que no participaron en la segunda guerra mundial.

Cuando los gobiernos permitan abrir los colegios, estas instituciones van a tener que estar preparadas para resolver los problemas y retos mas apremiantes. Por un lado, proveer una educación híbrida y virtual de calidad al mismo tiempo que entrega una nueva educación presencial. Esto garantizará la continuidad a todos sus estudiantes sin importar que escenario se vuelva realidad.

Por otro lado, garantizarle a su comunidad que no se vuelvan centros de contagio masivos a través del cumplimiento de unos protocolos de sanidad estructurados que involucren todo el proceso educativo y operativo (desde el transporte hasta los eventos escolares).

“El grupo considerable de niños estadounidenses cuya pérdida de aprendizaje comenzó cuando cerraron las escuelas podría haber perdido tanto como el aprendizaje de un año”.

Matthias Doepke of Northwestern University

3. ¿Cómo garantizar la continuidad educativa?

Los colegios tienen que reinventarse en un periodo corto de tiempo para mantener la propuesta de valor a todos sus estudiantes y familias. Si no mejoran la propuesta de valor en la nueva circunstancia podrán sufrir la disrupción de nuevos modelos educativos.

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Esta crisis está cambiando las percepciones y actitudes frente a las soluciones digitales, de la misma manera que la crisis ocasionado por el SARS cambió la actitud de los consumidores chinos frente a comprar en línea.

Fuente: www.bcg.com

En el caso de esta crisis, muchos padres han perdido sus trabajos y han tenido que buscar soluciones de homeschooling que estén probadas y funcionen por un menor valor de lo que les costaría su colegio convencional. Esta solución la encuentran mas optima que esperar a que su colegio mejore su oferta de educación virtual.

Otros padres de familia han cambiado la perspectiva que tenían del homeschooling viéndolo de forma mas favorable y estarían dispuestos a ver nuevos modelos educativos para brindar educación de calidad mientras disfrutan de combinar trabajo y escuela en casa.

Otros definitivamente no ven la hora de cuando se reabran las escuelas dado que no se ven en el rol de profesores sin embargo están demandado alta calidad académica que se aliene al retorno del pago de la anualidad que están haciendo.

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Una encuesta reciente realizada por EdChoice revela que más de la mitad de los encuestados tienen una visión más favorable de la educación en el hogar como resultado de la pandemia, lo que sugiere una creciente apertura a los diferentes modelos de aprendizaje K-12.

A medida que los padres experimentan un mejor entendimiento del teletrabajo y sus beneficios con respecto a más libertad y flexibilidad, también comienzan a buscar otorgar esta libertad y flexibilidad a sus hijos, buscando opciones educativas más allá de un aula convencional.

Los modelos que están mas en auge según Forbes son: Escuelas-bosque, micro-escuelas, programas de aprendizaje en línea y Homeschooling educación en el hogar:

  • La escuela-bosque: es un modelo de educación al aire libre en el que los estudiantes visitan espacios naturales para aprender habilidades personales, sociales y técnicas. Usualmente son pequeños grupos liderados por un profesor lo cual funcionaria muy bien en medio de la pandemia.
  • Micro-escuelas: Son pequeños colegios que tienen entre 12-15 estudiantes desde primero grado a grado once. Usualmente tienen un modelo hibrido donde reciben su educación en línea en casa y asisten al Colegio para profundizar con profesores y/o mentores.
  • Programas virtuales: Hoy visto de una forma mas positiva sobre todo por padres de familia cuyos hijos están en escuela media y alta. Ofrecen programas de alta calidad que promueven la autonomía e independencia en sus estudiantes. En los colegios virtuales se encuentra oferta para diferentes segmentos de la población, los costos de los colegios virtuales oscilan entre los US$1K a US$30K el año.
  • Homeschooling: Con la pandemia, los padres tienen una opinión mas positiva sobre homeschooling. Para algunos papas, los protocolos de seguridad necesarios para que los colegios puedan abrir sus puertas tendrán que ser tan estrictos que la educación presencial no tendrá grandes diferencias con la educación virtual.

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Adicionalmente a estos modelos, un modelo que podría ganar fuerza en Latinoamérica, dada las restricciones implantadas por los protocolos de seguridad frente a la crisis del Covid-19, seria las escuelas de barrio.

Estas son escuelas de 100-200 estudiantes que quedan ubicadas tan cerca de las casas de los estudiantes que los padres los llevan caminando. Por ejemplo, la cadena de colegios canadienses MapleBear ha implementado una estrategia de escuelas de barrio para crecer en Latinoamérica. Esta cadena tiene 350 colegios en el mundo. La mayoría de estas escuelas se encuentra en Brasil gracias a su expansión a través del modelo de franquicia.

Fuente: https://www.ownamaplebearschool.ca/
 

Las instituciones educativas tendrán que prepararse para proveer una educación de calidad adaptándose a diferentes realidades. Dependiendo del país, de la situación de sistema de salud, de la tasa de contagio, de la cultura y actitudes de la sociedad, etc., los protocolos adoptados por las instituciones educativas serán diferentes.

Por ejemplo, habrá un protocolo donde los estudiantes van solo algunos días al colegio de manera presencial, otro donde los estudiantes que presenten ciertos síntomas estarán en cuarentena por 2 semanas, u otro donde haya cuarentenas intermitentes para toda la población estudiantil por una nueva alerta en la capacidad utilizada de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCIs).

Dado estos diferentes escenarios posibles, las instituciones educativas están buscando protocolos suficientemente robustos y flexibles para enfrentar estos retos. La preparación de las instituciones educativas desde el punto de visto académico radica en dos modelos principalmente:

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  1. Esquema híbrido: En el escenario donde los estudiantes volverán al aula de clase, pero aquellos que tengan síntomas de gripa serán regresados a casa por al menos dos semanas mientras se descarta que tenga el virus.  Algunos padres de familia optarán por simplemente no enviar sus hijos a los colegios por miedo al contagio. Este será un nuevo reto para el colegio y el profesor dado que se atenderán en simultánea una audiencia de manera presencial y la otra de manera virtual.
  • Esquema virtual: En el escenario donde los estudiantes regresarán a las aulas de clase sin embargo se verán enfrentados a cuarentenas intermitentes por potenciales brotes focalizados del virus. Estas cuarentenas intermitentes podrán durar varias semanas, lo que implicará que los modelos de educación a distancia estarán presentes por los menos hasta que se encuentre una vacuna, que frecuentemente nos han dicho que podría tardar en el mejor de los casos hasta 18 meses.

Dependiendo de las acciones que tome el colegio para restructurar sus recursos para prepararse para todos los potenciales escenarios, la nueva realidad tendrá un impacto importante en el modelo operativo, económico y educativo de toda institución educativa.

Las instituciones mejor preparadas podrán navegar estos meses de incertidumbre de mejor manera. La clave será ser extremadamente eficientes en todos los procesos sin aumentar la estructura de costos. Las nuevas tecnologías, plataformas educativas y programas asincrónicos serán las principales herramientas para que los colegios estructuren un plan ganador.

4. ¿Cómo garantizar que los colegios no sean foco de contagio?

La nueva educación presencial será radicalmente diferente a la que vivimos antes de esta pandemia.  La reapertura del sistema escolar implicara nuevos desafíos tanto en la gestión operativa como en la académica.

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a. Gestión operativa:

  • Las escuelas reabrirán siguiendo un estricto protocolo de higiene y seguridad, guiado por las autoridades sanitarias tanto a nivel local como nacional, que podría incluir distanciamiento físico, controles de temperatura y desinfección frecuente de las aulas.
  • Las aulas tendrán que reorganizarse para acomodar pupitres distanciados a dos metros. Los materiales tendrán que ser desinfectados de manera recurrente con tiempos que dependerán del esquema de operación del colegio.
  • Las rutas escolares también se ampliarán para poder garantizar que los estudiantes tengan el distanciamiento correcto, con lo cual se aumentarán las frecuencias de buses escolares. Los buses escolares seguirán un riguroso protocolo de higiene que revisará las condiciones de salud del estudiante antes de que aborde el transporte. Probablemente, y por los costos asociados a multiplicar las rutas escolares, algunos colegios optarán por suspenderlas y pedirle al padre de familia que sea el quien lleve el estudiante al colegio.
  • Otra opción para no aumentar los costos de las rutas escolares será que los estudiantes vayan solo algunos días al colegio, intercalando los grados para que la logística sea posible.
  • Se tendrá acceso a lavamanos en los corredores y áreas comunes de los colegios, que tengan agua corriente y jabón.
  • Se desinfectará constantemente las aulas de clases y áreas de uso común, especialmente aquellas que tienen mayor uso como manijas de puertas, pasamanos, baños, entre otros.
  • Los eventos que aglutinen a mas de 10 personas se evitarán. Coros, eventos deportivos, asambleas de estudiantes y de padres de familia serán consideradas como eventos no esenciales que deberán restringirse.

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  • Los colegios tendrán que hacer inversiones adicionales para que los profesores tengan el equipamiento correcto para dictar clases, mascaras, desinfectantes, termómetros y en general todo lo necesario para dar cumplimiento a las directrices de las autoridades sanitarias.
  • Se tendrán que hacer acomodaciones físicas al colegio, poner diferentes puertas de ingresos y de salida a los estudiantes para evitar aglomeraciones.
  • No ingresará personal no esencial para cumplir con la instrucción académica, desde padres de familia hasta proveedores.
  • Se pensará en favorecer los deportes que no tienen contacto físico, como tenis y gimnasia entre otros.
  • Los colegios y las autoridades sanitarias deben trabajar coordinadamente para tener un sistema de control y seguimiento a potenciales estudiantes que presentes síntomas o que hayan faltado y cuyos familiares puedan estar potencialmente infectados.
  • Las áreas administrativas harán trabajo remoto dado que no se consideran criticas para la gestión académica del colegio.
Fuente: www.aei.org

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b. Gestión académica:

Los colegios reconfigurarán su gestión académica para poder cumplir con los requerimientos de distanciamiento físico.

  • Los colegios reducirán el tamaño de las clases para lograr mantener a los estudiantes y maestros a dos metros de distancia. Dependiendo de la configuración del salón este podrá tener en promedio 8 estudiantes cuando en promedio eran 30, es decir se reducirá en casi una cuarta parte el salón de clases.
  • Se ampliarán el horario de clases teniendo días mas largos, esto es teniendo jornadas de mañana y de tarde. Así mismo, se tendrán horarios escalonados para el ingreso de los estudiantes al colegio. Esto es, no todos los estudiantes ingresarán al mismo tiempo para evitar aglomeraciones. Cada grado o grupo tendrán sus horarios de ingreso y de salida del colegio, por diferentes puertas de acceso al colegio.
  • Los colegios analizarán la planilla de profesores con base en la edad y condiciones de salud (preexistencias y comorbilidades) para ubicarlos en diferentes niveles de riesgo. Por ejemplo, profesores y coordinadores académicos, mayores de 55 años, con condiciones medicas preexistentes, no dictarán clases ya que tendrían mayor riesgo de complicaciones médicas en caso de contraer el virus.

    Esto es realmente preocupante si entendemos que el 50 % de los profesores en Colombia tienen más de 50 años. Aquí los colegios reasignarán roles y funciones para profesores que presenten un mayor nivel de riesgo de dictar clases presenciales y seguramente serán asignados para que apoyen la educación a distancia. Por tanto, es posible que los colegios tengan que contratar más maestros para evitar reducir el tiempo de instrucción y para poder operar mas aulas de clases distribuidas en un día mas largo de colegio.
  • Probablemente los profesores no podrán reunirse en salas de profesores para evitar aglomeraciones y tendrán que reconfigurar sus oficinas para cumplir con el mínimo distanciamiento físico.

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  • Los colegios necesitarán constantemente revisar el estado de salud de sus estudiantes para entender como distribuir las aulas de los estudiantes por grupos de riesgos con base en la edad y en el estado de salud.
  • Los estudiantes que presenten síntomas serán regresados a casa por periodos de 14 días para verificar que no sean portadores del virus. Con base en esto se cambiará un paradigma y es que se premiaría el ausentismo del estudiante si presenta algún síntoma, todo esto en aras de proteger a la comunidad estudiantil y que el colegio no se vuelva un foco de infección.
  • En cuanto a temas curriculares seguramente se enfocará en los aspectos esenciales de la educación y dentro de ellos en competencias y habilidades claves, esto por el escaso tiempo de instrucción presencial. La instrucción en este nuevo normal se medirá no por semanas sino por horas recibidas.
  • En cuanto a la evaluación se recomienda poner de lado los rankings y enfocarse en evaluar en donde debería estar el estudiante y donde está, para entender “gaps” y enfocar la educación en llenar esos vacíos detectados.
  • Esta reconfiguración académica también implicará la combinación de educación presencial y virtual. El estudiante recibirá la mayor carga académica a través de medios virtuales en casa e irá al colegio a interactuar con pocos estudiantes y a recibir refuerzos en las áreas claves del currículo.

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En cualquier escenario la reconfiguración de la gestión académica será gradual, probablemente al inicio del regreso a las aulas los estudiantes puedan asistir una vez por semana, pero conforme los estudiantes, profesores y padres de familias se vayan ajustando, el tiempo presencial va a ir aumentado. Todo esto enmarcado dentro de la situación particular de la comunidad educativa.

Dado todos estos retos y riesgos, es entendible que los gobiernos quieran abrir los colegios pronto. The Economist y Tomas Pueyo sugieren un orden para abrir instituciones educativas:

  • Primero, comenzar con niños pequeños, abriendo kindergarten, pre-k, guarderías y escuelas primarias. Estos niños están aprendiendo más, son los menos afectados por el coronavirus, sus padres obtienen el mayor alivio al poder trabajar y su edad es primordial para reducir la desigualdad a través del aprendizaje y la nutrición
Fuente: medium.com/@tomaspueyo
  • Segundo, continuar con los niños mayores, especialmente aquellos con exámenes importantes. Ellos son más capaces de seguir las pautas de distanciamiento físico, y su futuro está más en juego.

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  • Por último, serían los universitarios, ellos reúnen a muchas personas de diferentes redes sociales. Estos estudiantes se mezclan en entornos de alta densidad donde se tienen alto contacto físico y hablan entre ellos. Esto es cierto para casi todos los aspectos de sus vidas, desde aulas hasta grupos de estudio, dormitorios o fiestas. Los estudiantes también son mayores que los niños, por lo que son más susceptibles al virus y son más capaces de estudiar a través del aprendizaje en línea.

Sin embargo, es aún muy temprano para predecir cuando se abrirían los colegios, todo dependerá de cómo estemos en cuanto a las olas de contagio, que aplanada esta la curva, y que índice de contagio tenga la comunidad en cuestión.

También dependerá de que tan cómodo se sientan los padres de familia de enviar sus hijos al colegio, en el caso de Uruguay el 40 % de los padres decidieron no enviar a sus hijos al colegio, ante el miedo a un posible contagio, y ante el miedo de entender como funcionarían la implementación de los protocolos de bioseguridad.

Adicionalmente se han visto reportes en las ultimas semanas de cómo el Covid-19 esta afectando a algunos niños. Hasta el momento nos han dicho que son portadores asintomáticos y que de contraerlo su recuperación es relativamente sencilla y en casa. Sin embargo, en las ultimas semanas se han visto mas casos de niños hospitalizados con complicaciones inflamatorias que ha producido el fallecimiento de tres niños.

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“Existe nueva evidencia de que algunos niños pueden enfermarse gravemente, y estamos comenzando a aprender más sobre quién puede estar en mayor riesgo y qué deben vigilar los padres.”

New york times

De incrementarse estos casos o de llegarse a entender que el virus tiene consecuencias adversas a los que nos han dicho, los padres de familia optarán, los que puedan tener ese privilegio, de tener sus hijos en casa. Esto pone al colegio en dos jornadas en simultaneas, los que han vuelto al aula y los que siguen en casa por decisión de los padres de familia.

Para los que somos padres hemos probado que importante es la escuela en nuestra sociedad. Los colegios son un lugar donde se desarrollan relaciones interpersonales entre estudiantes y profesores, donde se forjan amistades para la vida, donde se aprenden habilidades blandas y duras, donde se exploran múltiples temáticas en busca de la pasión y el propósito de vida.

La invitación que le hacemos al sector escolar es no tratar de acomodar el anterior modelo escolar a los protocolos de bioseguridad sino de entender como la educación híbrida es una gran oportunidad histórica que tenemos en manos para entregar educación mas personalizada y de mas alta calidad.

En esta nueva realidad, las tecnologías con modelos de machine learning podrían ayudar a transformar a los colegios. Esto se predecía iba a pasar en años, pero ahora con la crisis del Covid-19 podría pasar en meses.

Contacto
LinkedIn: Vicky Ricaurte*
LinkedIn: Marcelo Burbano**

*La autora es emprendedora serial EdTech (educación + tecnología) y cofundadora de Arukay, un sistema curricular para colegios que enseña a estudiantes entre primero y último grado sobre pensamiento computacional.

**El autor es socio fundador de Prismapar y lidera las oficinas en México, Región Andina (Colombia, Ecuador y Perú). Prismapar es una firma de banca de inversión con vasta experiencia en el sector educativo en Latino América, dedicada mayormente a fusiones y adquisiciones.