En diálogo con Forbes, César Tulio Ossa, director de Educación Continua de la Universidad Javeriana de Bogotá, defiende el futuro de esa modalidad presente en la mayoría de universidades colombianas.
Encontrar cursos virtuales en internet, incluso con el sello de las más prestigiosas universidades del mundo y hasta gratuitos, está marcando un quiebre en la educación continuada en Colombia, donde representa un significativo desarrollo de competencias para la clase productiva y una fuente de ingresos para las universidades.
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Para César Tulio Ossa, director de Educación Continua de la Universidad Javeriana de Bogotá, el diferencial, más allá del conocimiento que se imparte, se brinda una asesoría y un acompañamiento al estudiante, procurando una experiencia formativa integral. “Si el participante lo requiere, le implementamos rutas de aprendizaje, que le van a servir de manera práctica en el desarrollo de su vida profesional”, dijo Ossa a Forbes.
Por la pandemia, la educación tuvo que volverse no presencial de un día para el otro. Sin embargo, desde la visión de Ossa la presencialidad en la educación nunca se va a acabar, pero sí va a tener cambios. “Pienso que va a ser distinta en el sentido de que, será más una especie de asesoría, durante el espacio de la clase”.
Para el caso de la educación virtual, creo que ya no debemos hablar de futuro, por cuanto es una realidad. La virtualización ya venía desarrollándose con gran fuerza antes de la pandemia y ahora, en estos tiempos, mucho más. Nosotros, desde la dirección de Educación Continua de la Universidad Javeriana, hemos estado trabajando en este proyecto desde hace seis años y por tanto considero que lo tenemos muy maduro”, señala.
Desde su concepto, es más exigente la educación virtual que la presencial, tanto para el profesor, como para el participante; para el docente, “porque debe tener todo absolutamente planeado: la ruta de enseñanza, los guiones, los tiempos, etc., sin que haya mucho espacio para momentos de improvisación; y por su parte, el participante, porque debe ser constante y con un grado muy alto de responsabilidad, más que en el aula de clase. Mientras que, en la clase presencial, puede ser un poco más flexible en los tiempos y en las improvisaciones”.
En la Universidad Javeriana consideran que el cambio más importante que estamos haciendo, durante este 2020 y proyectado al 2021, es que toda la presencialidad de los cursos, puedan volcarla a lo virtual.
“Si hasta hace poco, nuestra oferta académica estaba compuesta por un 40% virtual y un 60% presencial, aspiramos pronto llegar a un 90% virtual. Para esto, la Universidad, a través de Educación Continua está haciendo un gran esfuerzo y una inversión muy importante, en materia tecnológica, de capacitación a profesores, en el desarrollo de objetos virtuales de aprendizaje y gamificación”, detalla Ossa.
“Sí estamos teniendo cambios importantes para fortalecer la educación Virtual, con los que prevalece la calidad académica y especialmente, el participante, para que realmente se lleve lo mejor de nosotros a través de nuestros cursos”, agrega.