En promedio 25 analistas, consultados por la encuesta de expectativas del Citi, esperan un dato anualizado de 1,76%, cifra a la que no se llegaba desde noviembre de 2013. El rango estimado para septiembre está entre 1,97% y 1,65%. Esta noche el Dane dará la cifra oficial.
La inflación ha sido uno de los indicadores que más afectados se han visto con la llegada de la pandemia al país, a inicios de año. Desde entonces, el Índice de Precios del Consumidor (IPC) anualizado ha venido descendiendo, pasando de 3,51% en el cuarto mes de 2020 a 1,88% en agosto.
Para septiembre -cifra que se conocerá más tarde- se espera que esta toque niveles a los que no se llegaban desde finales de 2013 (1,76% anual). En promedio, ese es el dato que están esperando los 25 expertos de bancos, comisionistas de bolsa y otros actores del sistema financiero consultados para la encuesta de expectativas del Citi. El rango anualizado estaría entre 1,97% y 1,65%.
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Ahora bien, la inflación mensual total esperada para el noveno mes de este año es de 0,11% en promedio de acuerdo con el sondeo citado. El rango previsto para el indicador se encuentra entre un mínimo de 0% y un máximo de 0,33%. La cifra mensual se volvería a ubicar en terreno positivo luego de que en agosto llegara a -0,01%. Por su parte, la inflación sin alimentos sería de 0,15%.
Para el cierre de año, en promedio se espera una inflación anual de 1,72%, dato que podría estar entre un máximo de 2,10% y un mínimo de 1,30%. Vale decir que la baja inflación a la que se ha enfrentado el país ha sido uno de los indicadores que el Banco de la República ha tenido en cuenta para bajar las tasas de interés a niveles históricos llegando a 1,75% en agosto.
¿Qué determinaría su variación?
De acuerdo con Camilo Pérez, gerente de Investigaciones Económicas de Banco de Bogotá, la variación mensual esperada por su equipo es de 0,06% mensual. En sus palabras, hay dos principales rubros que determinarían el resultado que el Dane entregará más tarde.
“El primero que permitiría que la inflación sea relativamente baja este mes es alimentos, estamos esperando un leve descenso más o menos -0,3% o -0,4%.Lo segundo tiene que ver con educación, el mes pasado se vio un descenso importante en el tema de universidades, para septiembre creemos que va a haber descenso de precios de matrículas y pensiones en primaria y secundaria, lo cual ayudaría a que la inflación sea moderada”, resaltó Pérez.
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Por su parte, el equipo de Investigaciones Económicas del Grupo Bancolombia, espera una variación mensual de 0,03% lo cual sería un dato inferior a la que en promedio se ha registrado durante el mes en los últimos 10 años (0,14%). Para ellos, lo anterior se sustentaría en un incremento, luego de tres meses, en los precios de los alimentos que en todo caso, sería bajo y también, por el comportamiento de la inflación sin alimentos.
Sobre lo anterior, complementaron diciendo que de acuerdo con la información recogida por el Sipsa en los centros de abasto, dicha canasta habría visto un aumento mensual de 0,03%, “sobre lo que conviene anotar que los registros positivos se consolidaron en las últimas semanas del mes”.
Por ciudades, para los expertos de Bancolombia, el incremento más importante se habría presentado en Pereira, Armenia y Villavicencio, mientras que la contracción de los precios habría persistido en Cartagena, Pasto y Bogotá.
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Sobre la inflación sin alimentos, agregaron que dicho rubro habría seguido condicionado por dos fuerzas encontradas. Por un lado, la reversión de ciertos alivios, como la exención del IVA en los servicios de telefonía lo cual ejercería presión al alza. A ello se le sumarían los costos adicionales para que los establecimientos cumplieran con los protocolos para la reapertura.
No obstante, el contra peso vendría por el ajuste a la baja de las tarifas de educación y de los servicios relacionados (alimentación y transporte), así como por el peso, en el resto de bienes y servicios, del contexto de contracción de la demanda y el elevado desempleo.