Se trata de dos ingenieros mecánicos que desarrollan en Colombia máscaras tácticas para Estados Unidos. Su emprendimiento es 100% reciclable y ya cuenta con la protección de la Superintendencia de Industria y Comercio.
El impulso a que las grandes marcas de moda se atrevieran a sacar sus propias líneas de tapabocas dinamizó nuevas oportunidades de negocio en otras industrias. En este contexto, dos colombianos, ingenieros mecánicos, le apostaron a desarrollar una máscara táctica que ya llegan a las fuerzas especiales de Estados Unidos.
Se trata de Simón Molinares y Javier Moya, quienes en medio de esta crisis decidieron desarrollar en el país la Máscara Táctica Antimicrobiana (Antimicrobial Tactical Mask). Esta fue en compañía de su socio Terry Wilmeth, ganador de cinco Guinnes Records en categorías Todoterreno en Velocidad y Resistencia.
El material principal de la máscara es un tipo de poliuretano que sirve para la Industria Aeroespacial. Es 100% reciclable, y tiene certificación FDA (Food and Drug Administration), lo que se traduce en que su desarrollo se hace con materiales comunes del día a día.
Y es que el objetivo es reducir los contagios y la propagación del virus en los agentes o miembros de estos grupos en Estados Unidos. Según confirmaron, ya están elaborando 850 máscaras diarias, por lo que su producto tiene altas expectativas para seguir creciendo en ese nicho mercado.
Por ahora, confirmaron que están buscando dos patentes en Colombia: la primera, es por el filtro y la segunda, por el diseño exclusivo de la máscara. Actualmente, ya cuentan con la protección de la Superintendencia de Industria y Comercio.