El presidente de la Andi Bruce Mac Master sostuvo que Colombia está "en mora" de hacer reformas laborales y pensionales.
La Asociación Nacional de Empresarios (Andi) está haciendo un llamado a que Colombia adelante pronto reformas laborales y pensionales, así lo constató su presidente Bruce Mac Master.
Mac Master refirió que antes de la pandemia en Colombia el desempleo se acercaba al 11% y la informalidad superaba el 50%, lo que refleja que existen “problemas estructurales” en la reglamentación laboral y que llegó la hora de dar el debate.
“El empleo por horas es una modalidad cada vez más usada en el mundo y cada vez más acorde con las nuevas necesidades laborales por múltiples razones”, dijo el presidente de la Andi en una entrevista con El Tiempo, para defender la creación de un sistema de pago por horas. “Por ejemplo, una buena parte del empleo se da recogiendo cosechas, atendiendo temporadas comerciales como la de Navidad, o se da en espacios como el del turismo, uno de los potenciales de nuestro país”.
En ese sentido, Mac Master sugiere que se debe lograr que ese empleo por horas o por días que se implemente sea formal, permitiendo al trabajador o al empleador pagar prestaciones, acumular para una pensión o contar con un sistema de cesantías. “La flexibilización laboral, lejos de ser una precarización, es la creación de oportunidades para muchos ciudadanos que hoy en día están trabajando en la informalidad y que tienen igual de derecho que el resto de colombianos”.
De la misma manera, expresó que el sistema pensional en Colombia es una “bomba de tiempo” y que con la estructura actual no se lograrán atender las obligaciones que se tienen a futuro.
Mac Master señaló que está de acuerdo con el aumento de la edad de pensión y de las semanas de cotización, “con un régimen de transición que se vaya aplicando para quienes entran a la fuerza laboral”.
Sobre esa propuesta indicó que es una alternativa polémica desde el punto social pero que permitiría cuadrar las cuentas para lograr esa pensión de la cual hablaba. “Probablemente el camino sea imaginarnos un régimen de transición muy largo, para que, por ejemplo, las nuevas personas que están entrando a cotizar hoy en día sepan cuáles son las reglas de juego y entiendan que eventualmente, por varias razones, entre otras los incrementos en las expectativas de vida y de trabajo de las personas, hace sentido pensar en unas nuevas fórmulas de cálculo”.