Domínguez, quien es el presidente de la Confederación Colombiana de Cámaras de Comercio (Confecámaras) desde 2010, llega al cargo tras el paso de Sandra Forero, actual presidenta de Camacol.

En uno de los años más atípicos para la economía, y de cara a los grandes retos que se vienen en 2021 en materia empresarial y social, el Consejo Gremial Nacional, que enlista a los grandes gremios del país, dio a conocer que eligió a Julián Domínguez como nuevo presidente y a Rosmery Quintero, como vicepresidente.

Domínguez, quien es el presidente de la Confederación Colombiana de Cámaras de Comercio (Confecámaras) desde 2010, llega al cargo tras el paso de Sandra Forero, actual presidenta de Camacol. Desde la entidad, asumirá el reto de continuar impulsando la agenda de reactivación industrial, así como de acompañar las medidas empresariales para concretar el desarrollo de nuevas inversiones.

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El nuevo presidente tiene una amplia experiencia en cargos directivos, así como en la academia. La mayor parte de su vida profesional la llevó a cabo en el Valle del Cauca, donde lideró la Bolsa de Occidente y la Cámara de Comercio de Cali. Además, ha sido profesor de Títulos Valores, de Legislación Comercial, de Derecho Privado y profesor residente en las Universidades de San Buenaventura, Icesi y Externado de Colombia, respectivamente.

Quintero, por su parte, y quien hoy es presidenta de la Asociación Colombiana de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Acopi) será la vicepresidente del gremio nacional. La ejecutiva ha estado muy activa en medio de esta pandemia, siendo una facilitadora para impulsar las ayudas económicas a las pequeñas empresas.

Si bien no se anunciaron detalles de la votación, se conoció que solo se presentó una candidatura pese a que también se rumoró que se iba a presentar el presidente de la Asociación Colombiana de Minería (ACM), Juan Camilo Nariño.

Con el nuevo nombramiento de Domínguez y Quintero se desprenden varios retos y desafíos en los que seguramente el Consejo Gremial Nacional tendrá que trabajar. Quizás uno de los más grandes será contribuir a la hoja de ruta que tiene el Gobierno Nacional, llamada Compromiso por Colombia, así como elevar la tasa de inversión y la formalización laboral y empresarial.

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En este objetivo, y luego de que hace unas semanas Forero le presentara un documento al Gobierno Nacional, en el que se establecen los principales ejes de trabajo, Domínguez tendrá que continuar impulsando la reactivación de los sectores productivos y esa agenda, que de entrada plantea por lo menos 1 millón de nuevos empleos a 2022 con varias acciones en concreto.

Estas se dividen en 31 propuestas para dinamizar el crecimiento del aparato productivo. De hecho, en esta propuesta se crearon 42 iniciativas que dinamizarían el consumo público y privado y la inversión, y se identificó 378 proyectos para generar empleo.

Uno de los ejes clave en los que sin duda tendrá una fuerte participación Domínguez será la discusión de algunas reformas claves que necesita el país. Es de resaltar que el Consejo Gremial ha dicho que será fundamental resolver estos problemas estructurales, que ha terminado reduciendo el crecimiento potencial de la economía colombiana durante décadas.

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En este sentido, se deberá trabajar en lo que el Consejo califica como los siete ejes importantes para la reactivación, que incluyen la implementación de una ruta de formalización laboral y empresarial, la modernización del régimen laboral, los límites y condiciones a la estabilidad laboral reforzada, el fortalecimiento productivo y la formación de talento, entre otros.

Otro de los desafíos será la importancia de generar mecanismos que impulsen la inversión: tanto privada como pública, así como extranjera. En este contexto, el nuevo presidente tendrá que impulsar, por ejemplo, la relocalización de las cadenas globales de valor, impulsar proyectos de eficiencia energética y que se dé la creación de un mercado funcional de bonos de carbono para incentivar el crecimiento verde.

Es de resaltar que los empresarios tienen identificados 378 proyectos para la próxima década, de los cuales 187 están asociados al choque de inversión adicional: 45 corresponden a proyectos APP y 142 a proyectos netamente privados. Ahí será clave el diálogo que se establezca entre los empresarios y el Gobierno para sacar adelante todas las iniciativas.

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