La pretensión de las Empresas Públicas de Medellín es por la suma de 9,9 billones de pesos.
Cinco meses después de iniciar oficialmente las mesas de conciliación extrajudicial entre Empresas Públicas de Medellín (EPM) y los consorcios detrás de la construcción de Hidroituango, se conoció que dicha negociación fracasó. EPM tiene unas pretensiones por el orden de 9,9 billones de pesos.
Es por eso que, ahora, EPM avanzará en la demanda contra la brasilera Camargo Correa, Conconcreto, Conisa y otros interventores del proyecto. El caso comenzará su curso en los tribunales, donde también habrá espacios de conciliación en el futuro.
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Hace más de un mes, las dos partes se sentaron ante la Procuraduría para conciliar las diferencias y no avanzar en dicha demanda. Sin embargo no se logró llegar a feliz término.
El alcalde de Medellín, Daniel Quintero, confirmó en los últimos minutos el fracaso de dicho proceso y aseguró: “Empresas Públicas de Medellín nos ha informado que iniciará el proceso de demanda contra los constructores, diseñadores e interventores del proyecto. El objetivo recuperar 9,9 billones de pesos”.
El 11 de agosto de 2020, el gerente general de la empresa, Álvaro Guillermo Rendón, y el alcalde de Medellín decidieron demandar a los contratistas del proyecto hidroeléctrico, considerando los sobrecostos que ha tenido el proyecto en los últimos años, y los costos de los equipos en la casa de máquinas.
Las partes requeridas son el Consorcio Generación Ituango (Integral – Solingral), a cargo de los diseños del túnel auxiliar y el constructor del megaproyecto, el Consorcio CCC Ituango (conformado por Construcoes e Comercio Camargo Correa S.A., Conconcreto y Coninsa Ramón H.).
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Desde ese momento, EPM aseguró que tendría mesas de diálogo para una conciliación. De hecho, inicialmente estuvo prevista para la tercera semana de octubre de 2020, pero la fecha se corrió ante la solicitud de las partes a la Procuraduría.