La propuesta la hizo el gobernador del Magdalena, Carlos Caicedo, quien aseguró que cuatro pueblos indígenas del territorio garantizarían la preservación del ecosistema natural.
El gobernador del Magdalena, Carlos Caicedo, propuso que la concesión del Parque Nacional Natural Tayrona y el Parque Isla de Salamanca, dos áreas protegidas del país, sean coadministradas entre la Alcaldía de Santa Marta, las comunidades y la Nación.
Caicedo se opuso a la privatización de la reserva natural, y puso sobre la mesa la idea que los pueblos indígenas Kogui, Wiwa, Arhuaco y Kankuamo, asentados en la Sierra Nevada Santa Marta, garanticen la preservación del ecosistema natural.
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A través de una carta, el gobernador aseguró que “ese modelo debe incorporar a las principales autoridades indígenas, mediante un sistema que garantice la equidad, la sostenibilidad y que geste las condiciones propicias para la generación de empleo, la inclusión, la dignidad y el desarrollo del turismo en la región”.
La misiva fue dirigida para la subdirectora de Gestión de la Dirección de la Autoridad Nacional de Consulta Previa del Ministerio del Interior, Andrea Castilla.
“Reitero la posición de defensa de nuestro territorio frente a posibles intervenciones por parte de empresas privadas que puedan poner en peligro la calidad de vida de los pueblos indígenas, la comunidad en general, la integridad de los ecosistemas, la biodiversidad y los recursos naturales que confluyen en la zona del Parque Tayrona, el cual no se debe privatizar“, resaltó Caicedo en el documento.
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Según el gobernador, la riqueza que se contempla en el territorio no se puede poner en riesgo. “En ese sentido, y como una medida de protección de nuestro patrimonio ancestral que nos permitirá blindar esta importante zona, venimos trabajando en la declaratoria del Tayrona como patrimonio inmaterial de la humanidad, frente a los intereses comerciales de quienes anteponen los rendimientos económicos sobre el bienestar de los magdalenenses”, concluyó.