La plataforma explicó que acumula estos artículos para evitar el impacto ambiental y los costos de operación que implica re exportar mercancía que proviene de vendedores internacionales.
Lino ha escogido a dos organizaciones para una donación de miles de artículos devueltos que tiene acumulados en su bodega. Forbes habló con Angela María Gutiérrez, Gerente Marketplace Internacional Linio para entender cómo se está llevando a cabo ese proceso.
¿Qué hace Linio con los artículos devueltos?
Si hablamos del Marketplace local, los productos que devuelven nuestros clientes, les llegan directamente a nuestros vendedores, pero cuando se trata de las devoluciones de nuestro marketplace internacional, donde los productos llegan desde Asia, Estados Unidos o Europa, el proceso de devolución al vendedor es mucho más complejo.
Por el impacto ambiental que queremos evitar y los costos de operación, muy pocas veces re exportamos mercancía. A partir de esto encontramos la oportunidad de dar una segunda vida a las devoluciones y mitigar la generación de basura, pues son productos en perfecto estado.
Hasta este año, encontramos una solución que nos permitiera generar un impacto social y ambiental positivo en conjunto con La Corporación Minuto de Dios y La Fundación Puntos Verdes en alianza con LITO SAS, a quienes donamos este inventario para que los artículos puedan tener una segunda oportunidad a través del mejor manejo posible.
¿Por qué se quedan con este inventario?
Regresar un producto implica un proceso de embalaje y envío que deja una gran huella de carbono, además de generar costos operativos que impactarían los precios y harían inescalable la operación.
En Linio, estamos comprometidos con la experiencia de nuestros consumidores, y eso incluyo siempre garantizar una devolución fácil y sin fricciones, lo que se traduce a cero costos para un cliente que quiera ejercer su derecho al retracto.
¿Cómo escogieron las organizaciones a las que donarán?
El objetivo era encontrar empresas o fundaciones que contaran con programas sostenibles de disposición y gestión de residuos o de aprovechamiento para dar “segundas oportunidades” a estos artículos, evitando la destrucción inmediata y generación de “basura”.
En cuanto a los productos electrónicos, revisamos varias opciones y elegimos a Lito SAS, una organización dedicada a la gestión integral de excedentes industriales y residuos peligrosos que cuenta con programas de reciclaje, puntos verdes que despiezan productos que no funcionen al 100% y buscan darle una segunda vida a través de donación en diferentes programas.
Para los productos textiles, hicimos un acuerdo con el banco de textiles de la Corporación Minuto de Dios, que no solo donan, sino que transforman y convierten la ropa en otros elementos útiles que puedes ser aprovechados de diversas formas.
A la corporación Minuto de Dios, le entregamos todos los artículos textiles (más de 2.000). Estos se van a distribuir en 13 roperos diferentes en las distintas ciudades del país; Bogotá, Soacha, Cali, Pasto, Medellín, Cúcuta, Barranquilla y Cartagena.
Por su parte, Lito recibió cerca de 1.300 kilos de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos a los que les dará el manejo de reciclaje. Con esta acción, logramos reducir el impacto a los recursos naturales, evitamos que estos desechos lleguen a los residuos sanitarios evitando que aumente el volumen de los rellenos, minimizamos la contaminación a los recursos hídricos, de aire y suelo y finalmente contribuimos al desarrollo sostenible evitando impacto negativo al medio ambiente.
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