En el mes del orgullo LGBT+, las empresas recurren al pinkwashig para mejorar su valor de marca y lealtad, sin embargo, los usuarios de redes exigen acciones concretas y medibles.

En el mes del orgullo LGBT+ diversas marcas, instituciones y empresas se declaran a favor de los derechos humanos, laborales así como la inclusión y respeto hacia dicha comunidad, construyendo el concepto de pinkwashig.

Este no es más que las diversas estrategias de marketing y propaganda en el marco de los movimientos LGBT+ encabezados por empresas, organizaciones o personas, con el objetivo de mejorar su lealtad, incrementar el valor de su marca, encontrar nuevos consumidores y adherirse a valores aprobados para la sociedad.

Ante esto, 57% de la conversación de los usuarios en torno al pinkwashig en redes sociales y medios es percibida como negativa, 13% neutral y 30% positiva, de acuerdo con un análisis de Digimind (software de social listening).

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“La gente va a decir otros términos diferentes para referirse a pinkwashig y quiere ver congruencia en esas acciones y las palabras clave más utilizadas son: mes del orgullo, comunidad LGBT+, derechos humanos, personas trans y empresas“, explicó Victor Cruz, gerente de éxito del cliente para América Latina de Digimind en entrevista para Forbes.

Asimismo, puntualizó que “el sentimiento hacia el concepto empresa y LGBT+ tiende a ser negativo” sobre todo en público millennial (personas nacidas entre 1981-1996) y centennial (los nacidos a partir de 2000).

En México, la comunidad LGBT+ ha cobrado gran relevancia en los últimos años, por lo que la Federación Mexicana de Empresarios LGBT+ ha puntualizado que ésta aporta 80,000 millones de dólares (mdd) al PIB nacional.

En cuanto a los portales o plataformas más utilizadas para hablar del pinkwashig se encuentra Twitter con el 30% de la conversación, portales de noticias (24%), Facebook (21%), web (12%), Instagram (11%) y blogs (3%).

“Ante un consumidor cada vez más informado y crítico, escuchar y
comprender su voz a través de los diversos medios sociales puede ayudar a las marcas a ser empáticas con el movimiento LGBT+ y reflejar una verdadera disposición a ayudar e impulsar un cambio“, agregó Cruz.

Sobre esta misma línea, Catalina Hernández, Gerente de Digimind en América Latina, reiteró que las personas exigen a las empresas un compromiso real y continúo en el apoyo de la Comunidad LGBT+.

“Lo que vemos en el estudio es que se traduce en reclamos concretos, como cuotas y es que el consumidor en este momento como con otras temáticas es un detective de contradicciones. Es un consum’actor; un ciudadano y a la vez un actor y pide coherencia porque si una marca no tiene ese ADN, historia, manera de pensar puede apropiarse de un tema que necesita un cambio confundo en empresas, instituciones, marcas”, finalizó la experta.

Publicado en Forbes México.