Juan Felipe Ángel, fundador y CEO de Wolkvox, narra cómo ha escalado a punta de sus ahorros y de la facturación de la empresa.

La gran mayoría de los emprendedores se enfrentan a la disyuntiva de recibir o no inversión, ya sea durante el lanzamiento de su empresa o cuando está en pleno crecimiento y es necesario consolidarse. Una de las grandes creencias en el emprendimiento es que una empresa emergente, en adelante start-up, necesita inversión desde el inicio. Sin embargo, historias de éxito confirman todo lo contrario, la inversión no siempre es necesaria y es momento de romper con ese paradigma.

El anterior, es el caso de Wolkvox un emprendimiento colombiano de soluciones integrales de Contact Center en la Nube que nació con capital autónomo y aprovechó su curva de crecimiento para consolidarse. La plataforma se sale del esquema de la nueva ola de startups-tech que buscan inversión, lo cual más allá de desanimarlos los hace un caso de éxito pues su solvencia económica les permite flexibilizar sus decisiones, crecer y consolidarse en el mercado de una manera independiente.

Actualmente, Wolkvox ofrece soluciones para el mejoramiento de operaciones, servicio al cliente y cobranza a más de 300 clientes en los sectores BPO (Por sus siglas en inglés, externalización de procesos de negocio), de salud, retail, gubernamental, educativo y financiero, en Colombia, otros países de Latinoamérica, España y Estados Unidos. Pero llegar hasta ahí no fue un golpe de suerte, sino un camino forjado con visión, innovación y una cultura de trabajo arduo, cuya principal motivación es la felicidad y calidad de vida de sus colaboradores. Sí, porque “tener un crecimiento natural y feliz, sin generar traumatismos en la vida personal de los colaboradores”, ha sido una de las claves del éxito, asegura Juan Felipe Ángel, fundador y CEO de la empresa.

Juan Felipe es ingeniero electrónico de profesión. Su visión y su espíritu emprendedor lo llevaron a iniciar en 2006 con pruebas de voz IP por internet, un experimento que cuatro años después lo convenció de renunciar a su empleo en un importante Contact Center para desarrollar él mismo una solución en la Nube y dar inicio a su propia empresa de tecnología. La empresa constituida en 2014, para 2016 ya recibía el nombre de Wolkvox.

“La empresa empezó como algo informal. Inicialmente nos llamábamos IPDialbox, porque la primera funcionalidad de la plataforma era el software de marcación predictivo, entonces le pusimos ese nombre: era la caja de marcación en IP. Empezamos a vender software en marcación predictiva, más o menos en el 2010. Yo mismo demoré año y medio en desarrollar ese producto, y en 2012 empecé a venderlo: publiqué en internet avisos, puse publicidad en adwords e increíblemente se empezó a vender”, cuenta el CEO.

A pesar de haber intentado financiarse en 2016, con fondos de inversión y empresas más grandes, Wolkvox se probó a sí mismo, que el tiempo que tardaría en obtener esa inversión sería directamente proporcional al que tardaría en consolidarse dentro del mercado. Gracias a ello, hoy pueden gozar de autonomía e independencia, sin inversionistas externos que intervengan en sus decisiones.

La visión de Juan Felipe y sus socios, nunca ha sido la de consolidar la empresa con inversionistas, que posteriormente querrán entregar Wolkvox para su venta en Silicon Valley. Por el contrario, el CEO explica “Cuando lo vemos, las empresas que han recibido inversión tienen cierta presión y están muy enfocados en que la empresa crezca para poder vender, y eso puede desgastar mucho al emprendedor. Eso no ha pasado porque no tenemos ese afán. Nosotros tenemos una meta dura, duplicarse cada año y crecer 6% cada mes, pero somos una empresa que ha tenido un crecimiento natural y feliz, sin la necesidad de que los empleados hayamos tenido un desgaste o sacrificio extraordinario. La misión principal de la empresa es hacer lo mejor posible para nuestros clientes, hacer el mejor producto y dar el mejor servicio al cliente, nuestros tres pilares principales”.

Un factor de éxito clave, ha sido el crecimiento de la industria del Contact Center, panorama que Wolkvox supo capitalizar para posicionarse como pioneros en la implementación de la Nube en un momento en el que no era la oferta más buscada.

Wolkvox se convirtió en un pez ágil en el océano de tiburones tecnológicos, gracias a su habilidad para dar respuesta rápida a las necesidades del cliente: “Los clientes se sienten cómodos porque no están sujetos a permanencia en contratos, ocupan las licencias que necesitan, pagan lo que usan. Y nosotros como startup automatizamos los procesos para aumentar o disminuir la capacidad de los servidores en función del crecimiento o decrecimiento de los clientes, entonces es un modelo muy bacano. Los clientes así lo han recibido, y para los empleados es una forma de trabajar de manera natural y feliz”, explica John Rincón, director de Marketing Global de la plataforma.

Actualmente, Wolkvox factura cifras de más de un millón de dólares mensuales, tiene más de 30.000 usuarios diarios, un crecimiento sostenido y estable del 6% mensual y casi 100 colaboradores felices trabajando en homeoffice desde el inicio de la pandemia. Lo anterior, prueba sin duda alguna que la inversión no siempre es necesaria cuando los esfuerzos de un equipo sobrepasan los objetivos orientados a resultados, gracias a ello wolkvox es un caso de éxito dentro del emprendimiento, un punto de referencia para otras startups y para el sector.