El dato de inflación en Estados Unidos, que registró la mayor subida en 13 años, generó pérdidas en la mayoría de monedas latinoaméricanas.

En una jornada de alta volatilidad, el peso colombiano se fortaleció frente al dólar y cerró a $3.815, cifra que representó un descenso de $9,08 frente a la Tasa Representativa del Mercado (TRM) vigente para hoy, que fue de $3.824,08. Por su parte, el índice accionario MSCI COLCAP retrocedió 0,38% a 1.293,45 puntos.

Para el analista senior de divisas de Credicorp Capital, Juan Eduardo Nates, la volatilidad del día se debió principalmente a que el dato de inflación de EE.UU. salió por encima de lo esperado para el mes de junio, registrando a su vez la mayor subida en 13 años, en medio de las restricciones de la oferta y de un continuo repunte de los costos de los servicios relacionados con los viajes, a medida que la recuperación económica cobra impulso.

Mientras que las expectativas rondaban 0,5%, la cifra final fue de 0,9%, factor que dejó a la observación anual en 5,4%, frente a la proyección de 5%. Al observar el dato aislando las variables de alimentos y energía, la cifra quedó en 4,5% frente a la expectativa de 4%. Con esto, “volvemos a la incertidumbre con respecto a las tasas de interés y las expectativas de inflación que tiene la Reserva Federal”, agregó Nates.

La reacción del dato fue fuerte en otras monedas. En el caso del euro, bajó a US$1,18, mientras que los tesoros se movieron cuatro puntos basicos hacia arriba. Por su parte, las monedas de América Latina
operaban mixtas, al tiempo que el grueso de las bolsas de valores caían a media jornada. Junto con el peso colombiano, el real brasileño revertía pérdidas iniciales y se apreciaba un 0,28%, a 5,1587 unidades por dólar.

En cuanto al resto de monedas, la jornada cerró con pérdidas, donde el peso méxicano lideró con una caída de 0,71%, al cotizar en 19,98 unidades por dólar. Por su parte, el peso chileno bajaba un 0,55%,
a 748 unidades por dólar y el sol peruano bajaba un 0,23%, a 3,971 unidades por dólar, en momentos en que la demora del anuncio oficial de quien ganó el ajustado balotaje presidencial del 6 de junio complica la transferencia de poder.

Con información de Reuters