Hoy, estas empresas enfrentan retos particulares: una región más vulnerable, más frágil y con menos capacidad de respuesta. Estas son las tendencias que marcan el paso en la llamada “nueva normalidad”.
La pandemia de coronavirus cambió al mundo. Las compañías multilatinas no son ajenas a los retos y oportunidades que impone la nueva normalidad en los diferentes mercados donde participan.
Forbes México y la firma Llorente y Cuenca (LLYC) se han unido para ofrecer una mirada analítica y periodística y su expertise en el mundo de los negocios y en América Latina y el Caribe. Esa mirada va no sólo a las firmas sino, sobre todo, a las personas que crean las empresas que están cambiando esta zona de América y el Caribe. Mediante análisis de big data y data mining, estudio de tendencias e investigación, ambas marcas se han unido para responder la siguiente pregunta: ¿Cuáles son las multilatinas que mejor se han adaptado a la nueva normalidad?
Enfocado en el dinamismo de los negocios en Latinoamérica y el Caribe, el acuerdo incluirá, a partir de este primer informe y de cara a futuro, a las empresas y líderes de negocios más importantes de la región: su desempeño y capacidad de adaptación, sus apuestas y movimientos para valorar de qué manera están impactando y cambiando sus industrias, y marcando la diferencia en el mercado.
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Aportará información veraz para lectores voraces. Forbes México y LLYC están convictos que el periodismo del futuro (y del presente) se basa en el análisis de datos, pero va más allá: no prescinde de una metodología rigurosa y de análisis humano apoyado en la Inteligencia Artificial, siempre teniendo en cuenta el contexto cultural, social, político y económico de nuestra región.
Los insumos de calidad para comprender la coyuntura y tomar decisiones estarán basados en data mining, escucha social, metodologías y análisis cualitativo, de la mano con el periodismo de investigación de calidad. El propósito es ofrecer una mirada a profundidad al ecosistema empresarial con raíces en el dinámico y cambiante contexto latino y caribeño. Ello, para contribuir con la comunidad de negocios a la hora de comprender el mundo y tomar mejores decisiones.
A continuación, presentamos las principales tendencias empresariales que las multilatinas han adoptado para surfear en el mar agitado de la nueva normalidad y las mejores prácticas en cada rubro.
Liderando más allá del negocio
Este concepto expresa una versión de los ejecutivos principales de las empresas, que funcionan como embajadores clave ante asuntos políticos. sociales o culturales que no están relacionados con el negocio de sus compañías.
Ante un entorno dominado por la hipertransparencia y la necesidad de darle rostro al storytelling y storydoing, se formó la necesidad de que la cabeza más visible de la compañía para el desarrollo del negocio también lo fuese para la marca.
Buenas prácticas:
Joao Paulo Ferreira, CEO Natura y Co, Latinoamérica Simón Borrero, CEO de Rappi Gianfranco Ferrari, CEO del Banco de Crédito de Perú

Automatizando la generación de valor
La digitalización significa flexibilidad y el aumento artificial de los marcos físicos o analógicos de nuestras posibilidades. Frente a esta nueva realidad, una vez, más queda demostrado que la digitalización es un aliado indispensable para cualquier negocio o empresa que tenga como objetivo optimizar los procesos, mejorar su competitividad y ofrecer un nuevo valor añadido a sus clientes.
La digitalización del negocio provee beneficios en varias vías. Y es que, con el uso de métodos digitales y la integración de tecnologías en todas las áreas del negocio se hacen más eficientes las operaciones rutinarias, beneficiando tanto a los clientes como a las propias empresas que incrementan su productividad, resultados e interacción con uno de sus activos más importantes: sus colaboradores.
Buenas prácticas: Grupo Bimbo, Grupo CCR, CMPC Chile
Estableciendo modelos de predicción
En la actualidad, cuando lo impredecible es nuestro pan de cada día, los avances tecnológicos y la generación exponencial de datos públicos presentan una oportunidad para las compañías. Estos datos permiten desarrollar estrategias de valor basadas no sólo en el conocimiento empírico, sino también en el análisis de información que nos permite ver cómo fue, cómo se desarrolla y cómo evoluciona un fenómeno social. Más allá del debate sobre la privacidad de los datos, lo que nos dice el uso del big data es que cualquier información pública es valiosa.
La estructuración y análisis de grandes cantidades de datos nos permite aplicar técnicas que nos ayudarán a optimizar la información para obtener el valor real de los datos, tanto en el pasado como en tiempo real.
Buenas prácticas: Nubank, Petrobrás, Alicorp
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Marcas con propósito
La nueva realidad del mundo empresarial ha acelerado la internalización de un concepto que ha adquirido gran importancia actualmente: las mejores prácticas medioambientales, sociales y de gobernanza. Esta visión, resumida en la sigla ESG (Environmental, Social and Governance), ayuda a evaluar cuál es el impacto de las empresas y las inversiones en la sociedad y en el mundo. Es un factor decisivo en la toma de decisiones de inversiones en empresas o en países más desarrollados.
La valorización de las prácticas de ESG ha ido ganando espacio a partir de exigencias procedentes de inversores institucionales, instituciones financieras, planes de pensiones, fondos de inversión y endowments (fondos de donaciones). A la vez, se está convirtiendo en una preocupación general y creciente para otros agentes empresariales.
Buenas prácticas: Cemex, Credicorp Capital, Coca Cola Embonor

El magnetismo con el talento
El talento es un punto de discusión que evoluciona continuamente. En paralelo con las demandas sociales, la captación, retención y desarrollo de talento se vuelven tan complejos como la sociedad misma.
En la “profetización” del futuro del trabajo, el imaginario colectivo se ha centrado en el temor al surgimiento de la mano de obra robótica y automatizada, pero los desafíos del futuro son más complejos, variados y hasta se podría decir que positivos.
Buenas prácticas: Grupo Sonda, Yanbal, América Móvil
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Los que doblaron la apuesta
Las medidas orientadas a minimizar las posibilidades de contagio tomadas en todos los países del mundo, incluidos los de Latam, han modificado el comportamiento de la fuerza trabajadora y de las costumbres de vida de la población. Como consecuencia, los patrones de consumo y la cotidianidad se han reformulado para todos, en mayor o menor medida.
Sin embargo, estos mismos cambios han abierto oportunidades a aquellas empresas con productos que florecieron en estas condiciones o que han logrado adaptarse a los nuevos patrones de consumo de la población, incluso, algunos, doblando la apuesta para el negocio.
Buenas prácticas: Rappi, Pedidos Ya, Grupo Phoenix

Expandiendo redes
Los grupos de interés se refieren a los grupos de personas que se ven afectados por las operaciones y el rendimiento de una empresa, conocidos en inglés como los stakeholders.
Dentro de la redefinición de las estrategias de negocio como consecuencia del impacto del Covid-19 en los patrones de consumo de la población, parte fundamental la constituye una revisión de las relaciones con y entre los grupos de interés de una empresa o producto. Es así como las empresas que han mantenido su posición de mercado y hasta han sacado ventaja en el mercado frente a sus competidores, han sido aquellas que han logrado adaptarse a las necesidades de los consumidores (las cuales han cambiado significativamente), muchas veces mediante la conversación con sus grupos de interés.
Buenas prácticas: Arca Continental, Alicorp, Ambev