Horizonte producirá 2.400 Gwh de energía limpia por año. Estará ubicado en la Región de Antofagasta y será el mayor parque eólico de América Latina.

Chile dio un nuevo paso en su proceso de transformación hacia una matriz energética limpia. Este martes se confirmó la construcción de Horizonte, el que será el parque eólico más grande de Latinoamérica, con una capacidad instalada de 780 Mw.

El proyecto estará ubicado en pleno Desierto de Atacama, a 130 kilómetros de la ciudad de Taltal, en la región de Antofagasta. El parque será desarrollado por la empresa Colbún, que anunció una inversión de US$ 850 millones para su construcción.

“El proyecto Horizonte es un hito relevante para Colbún, pero pensamos que también lo es para la comuna de Taltal, la Región de Antofagasta y el país. Será un aporte significativo a la descarbonización de la matriz eléctrica de Chile”, señaló el presidente de la compañía, Hernán Rodríguez.

Horizonte contempla la instalación de 140 aerogeneradores, los cuales permitirán una generación media anual de 2.400 Gwh, lo que equivale al consumo energético de 700.000 hogares. La implementación del proyecto evitará la emisión de 1,2 millones de toneladas de CO2 al año.

“Este anuncio confirma la visión del Gobierno sobre la importancia de las energías renovables en la lucha contra el cambio climático y, al mismo tiempo, en mejorar la calidad de vida de los chilenos“, dijo el ministro de Energía y Minería, Juan Carlos Jobet.

La construcción del parque comenzará en diciembre de este año, en un predio de 8.000 hectáreas que forma parte de los terrenos fiscales reservados por el Estado en el norte de Chile para el desarrollo de proyectos de energías renovables. La elección del lugar tiene relación con la potencia de los vientos alisios que se producen naturalmente en la zona, los cuales le otorgan a Chile una importante ventaja comparativa en materia eólica.

El avance de Chile hacia las energías limpias

Horizonte permitirá aumentar en un 70% la capacidad de generación eólica actualmente existente en Antofagasta, transformando a la región en uno de los focos más importantes del país y de América Latina en cuanto a la producción de energías limpias.

“Antofagasta ha sido definida, en nuestra Planificación Energética de Largo Plazo, como uno de los polos de desarrollo de estas energías y este proyecto está en línea con el avance decidido para hacer de esta meta una realidad”, comentó al respecto el ministro Jobet.

Si bien este es uno de los hitos más relevantes que Chile ha dado en su proceso para transformar su matriz energética, no es el único.

Hace solo dos semanas, en el otro extremo geográfico del país, se inauguró Haru Oni, la planta de hidrógeno verde más grande de Latinoamérica. La construcción, desarrollada por la empresa alemana Siemens, está emplazada en la región de Magallanes y permitirá producir 350 toneladas de metanol y 130.000 litros de eFuel —electrocombustible neutro en emisiones de carbono— para autos Porsche.

“Estamos llevando a cabo uno de los proyectos más interesantes de la industria energética para el futuro e impulsando la descarbonización en el sector de la movilidad. Esto significa que estamos haciendo una contribución importante y rápidamente efectiva a la reducción de las emisiones de CO2 en los ámbitos de tránsito y transporte”, dijo en la ocasión Armin Schnettler, vicepresidente ejecutivo de Nuevas Energías de Siemens Energy.

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Mientras que el pasado 8 de junio entró en operaciones Cerro Dominador, la primera planta termosolar de América Latina, capaz de producir 110 megavatios de energía limpia.

Al igual que Horizonte, Cerro Dominador se ubica en la Región de Antofagasta, específicamente a 50 kilómetros de la ciudad de Calama. La planta puede generar electricidad proveniente del sol las 24 horas del día mediante la tecnología denominada concentración solar de potencia (CSP), utilizando la intensa radiación solar del Desierto de Atacama.

Todas estas iniciativas están dentro del contexto del ambicioso plan que se ha propuesto el Estado de Chile por descarbonizar totalmente la matriz energética para el año 2040 y alcanzar la carbono neutralidad en 2050.

Según las últimas cifras oficiales, las energías renovables en Chile pasaron del 32,8% del total de la matriz en 2013 al 45,5% en 2018. Se estima que con los nuevos proyectos, más otros en fase de desarrollo y diseño, el país logrará para 2030 el 70% de su generación con base en energías renovables.