Las embajadas de Alemania e Israel se pronunciaron de manera conjunta para rechazar los actos que "ofenden no solo a los judíos, sino a todas las víctimas del régimen nazi".
Luego del escándalo que se generó por la ‘Semana de internacionalización’, celebrada en la Escuela de Policía Simón Bolívar de Tuluá, donde varios oficiales usaron atuendos alusivos a Adolf Hitler y el partido Nazi, el presidente Iván Duque aseguró en su cuenta de Twitter que “cualquier apología al nazismo es inaceptable”.
La situación generó otro revés internacional para el gobierno de Colombia, pues las embajadas de Alemania e Israel manifestaron su rechazo ante dicha situación a través de un comunicado conjunto en el que aseguraron que eventos como este “ofenden de manera directa no solo a los judios, sino también a todas las víctimas del régimen nazi y sus criminales”.
Unido a ello, el embajador de Alemania en Colombia, Peter Ptassek, extendió el sentimiento de rechazo sobre los acontecimientos del evento en dicha escuela, pero también agradeció a la Policía Nacional por haber tomado medidas al respecto.
Como consecuencia de estos hechos, el director de la escuela fue destituido por la Policía Nacional, que no reveló la identidad del funcionario. A su vez, la institución anunció medidas adicionales que se harán efectivas con la llegada a Tuluá de la directora nacional de Escuelas, la Brigadier general Yackeline Navarro.
Este episodio se suma a un historial reciente de conflictos internacionales que ha tenido Colombia en las últimas semanas, siendo la proclamación de Irán como enemigo de Colombia por parte del ministro de Defensa, Diego Molano, el más sonado de todos.
Las declaraciones provocaron una crisis diplomática importante debido a la longevidad de las relaciones entre Colombia e Irán, que han sido socios desde 1975, manteniendo buenos términos desde entonces.