De acuerdo con el Banco de la República, mientras que ese déficit para los primeros nueve meses del año se estima en US$12.594 millones, un aumento de US$ 6.498 frente a 2020.

Aunque Colombia ha tenido buenas noticias en materia de exportaciones por una mayor diversificación de lo que vende afuera más allá del petróleo, la diferencia entre lo que le entra por ventas en el exterior y las importaciones todavía sigue creciendo.

Eso dice el reporte del Banco de la República de la balanza de pagos, que revisa periódicamente cómo le fue al país en la cuenta corriente y financiera, que le miden el pulso a lo que Colombia le entra por sus ventas en el exterior, versus lo que compra.

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Para el caso del déficit de la cuenta corriente, que es la diferencia entre los ingresos por exportaciones y lo que gasta en importaciones, el dato casi se ha duplicado. Según el Emisor, entre enero y septiembre, ese dato está estimado en US$ 12,594 millones, que fue superior en US$ 6,103 al de un año atrás.

Y si se mira como proporción del PIB, el Banco estima que a septiembre el déficit fue de 5,5%, mayor en 2,2 puntos porcentuales (pps) al estimado un año antes.

Como explica el Emisor, ese comportamiento tiene que ver con “los balances deficitarios de los rubros de comercio exterior de bienes (US$ 9.957 millones), de renta de los factores (US$ 5.896 millones), y del comercio exterior de servicios (US$ 4.581 m). Estos resultados fueron compensados parcialmente por los ingresos netos de transferencias corrientes (US$ 7,840 millones)“.

La inversión extranjera

En el informe de balanza de pagos, el banco central informó que el ingreso de inversión extranjera directa aumentó un 32,8% entre enero y septiembre a US$7.160 millones, con respecto al mismo periodo del año previo.

Si se mira por sectores, la inversión extranjera directa recibida en servicios financieros y empresariales alcanzó un 25% del total, en transporte y comunicaciones un 20%, en industria manufacturera un 16%, en minería y petróleo un 12%, en comercio y hoteles un 8%, en electricidad un 7% y en otros sectores el restante 12%.

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