Según una encuesta de la televisión pública alemana ARD, un 51 % de los encuestados cree que Scholz será un buen canciller, frente al 29 % que lo cuestiona y el 20 % que dice no tener una opinión clara al respecto.
El nuevo canciller alemán, Olaf Scholz, subrayó este viernes que su Gobierno “no puede quedarse al margen de la política europea”, tras reunirse en Bruselas con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
“La política alemana no puede quedarse al margen de la política europea, sino que tiene que sentirse responsable para el progreso de Europa”, dijo Scholz en una rueda de prensa al término del encuentro con von der Leyen.
Para el canciller, el compromiso europeo del nuevo Ejecutivo se demuestra “no sólo” porque el Gobierno y los socios que lo conforman -socialdemócratas, verdes y liberales- tienen una “clara agenda proeuropea”, sino también “si observamos a la oposición”.
“Así es como lo vemos en Alemania y por eso siempre nos sentimos responsables en lograr una mejor Unión y ayudar a que sea posible”, aseguró Scholz.
Von der Leyen destacó que ambos se conocen “personalmente desde hace años” al haber formado parte del antiguo Gobierno liderado por Angela Merkel, en el que Scholz fue ministro de Finanzas y ella de Defensa, antes de presidir la Comisión Europea.
“Esto ayuda, evidentemente, en el nuevo papel”, dijo Von der Leyen, quien destacó que “Alemania fue y es siempre muy importante para el desarrollo” de la UE.
“Cuando se observa el acuerdo de coalición se ve que hay un fuerte capítulo europeo y que el tema está a lo largo de todo el acuerdo”, señaló la presidenta de la Comisión.
Tanto Scholz como Von der Leyen destacaron que el reto principal es el de combatir la pandemia, el cambio climático y, en política exterior, el reto que plantea la posible invasión de Ucrania por parte de Rusia.
Un tema este último que Scholz también trató en París con el presidente francés, Emmanuel Macron, antes de viajar a Bruselas, en lo que supuso su primer desplazamiento al exterior como canciller alemán.
“Hay un consenso sobre la inviolabilidad de las fronteras de la UE. Es un principio que todos debemos respetar en Europa”, dijo Scholz en Francia.
Preguntado de nuevo en Bruselas sobre la posibilidad de que Alemania pudiera suspender el gasoducto ruso Nord Stream II en caso de una invasión en Ucrania, Scholz evitó responder.
El nuevo canciller alemán continuará su visita en Bruselas con una reunión con el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y finalmente con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.
Los alemanes confían en que será un buen canciller
Más de la mitad de los alemanes considera que el nuevo canciller federal hará un buen trabajo y confían en su capacidad para liderar la nueva coalición con verdes y liberales.
Según una encuesta de la televisión pública alemana ARD, un 51 % de los encuestados cree que Scholz será un buen canciller, frente al 29 % que lo cuestiona y el 20 % que dice no tener una opinión clara al respecto.
El porcentaje de quienes consideran que Scholz hará un buen trabajo queda así algo por encima del 49 % que en 2005, cuando Angela Merkel llegó al poder, se mostraban convencidos de que sería una buena canciller.
Scholz fue investido este miércoles como canciller por el Bundestag (Parlamento federal), donde su coalición entre socialdemócratas, verdes y liberales tiene la mayoría.
El relevo en el poder puso fin a los 16 años de Merkel en el cargo, pero estuvo a la vez marcado por un aire continuista.
Scholz fue vicecanciller y ministro de Finanzas de la última gran coalición de Merkel y representa la vía más centrista dentro de la socialdemocracia alemana.
Su Partido Socialdemócrata (SPD) fue la fuerza más votada en las elecciones generales de septiembre, con un 25,7%, mientras que el bloque conservador de Merkel, ahora liderado por Armin Laschet, se hundió en su peor resultado en unos comicios nacionales, con el 24,1 %.
Los Verdes obtuvieron su máximo histórico en unas generales -un 14,8 %-, mientras que el Partido Liberal (FDP) quedó en un 11,5 %.
La encuesta de dicho ente público otorga ahora al SPD una intención de voto del 26 %, mientras que los conservadores bajaron al 23 %; tanto los Verdes como el FDP han subido respecto a los comicios de septiembre y se sitúan ahora en un 16 % y un 12 %, respectivamente.
EFE