Qumran II, un desarrollo de ocho apartamentos con club house privado, una arquitectura atractiva y un inmejorable entorno natural en Los Altos de Suba en Bogotá, convierte en realidad el sueño de una vida campestre sin salir de la ciudad.
Imagine despertar en un ambiente rodeado de árboles, salir a un balcón y encontrar los cuatro puntos cardinales de Bogotá en el exclusivo sector de Los Altos de Suba. Luego desayunar con tranquilidad y tener a pocos minutos todo lo que necesite de la ciudad. Ahora imagine que al volver a su hogar puede ir a nadar, a dar un par de golpes en su putting green privado, ir a las zonas húmedas, al turco o jugar squash, subir a su apartamento y terminar el día con un buen café o una copa de vino.
Ese es el nivel de vida que Qumran II busca para los habitantes de los ocho apartamentos que ya son una realidad.
Hace casi 30 años dos socios iniciaron una de las apuestas inmobiliarias de alto costo más importantes de Bogotá, Qumran. La iniciativa, compuesta por 20 casas y ocho apartamentos, tuvo un éxito inmediato y empezó su construcción sobre un predio privilegiado en el exclusivo sector de Los Altos de Suba, al norte de la ciudad, en medio de un ambiente natural sin perder la cercanía con el resto de Bogotá.

Jorge Urueña, arquitecto de ambas etapas de Qumran, explica que los apartamentos están listos para que las familias construyan su historia allí. “Al ser tan pocos apartamentos los acabados no son estándar, sino a la medida de las necesidades y gustos de los compradores. Un nivel de personalización difícil de encontrar en proyectos inmobiliarios masivos”, explica el arquitecto.
Los ocho apartamentos están distribuidos en dos bloques de cuatro pisos, cada uno con tres apartamentos tipo (de 307 m2) y un pent-house (de 320 m2). Los propietarios podrán disfrutar de todos los amenities como piscina, putting green, cancha de squash, áreas húmedas, baños turcos, gimnasio, oficina o salón de reuniones, sistema de vigilancia, portería, y contará con controles automatizados de acceso y seguridad”.
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La idea de los creadores de Qumran es que los compradores encuentren un lugar lleno de paz y que no tenga igual en Bogotá. Claramente, la exclusividad viene en más de un frente, con un estilo arquitectónico que ha pensado cada detalle con el máximo confort y elegancia. Es más, que los edificios solo tengan cuatro pisos no es fortuito, era la respuesta a la medida para construir un lugar privado y sofisticado, con áreas comunes que nada les envidian a los mejores clubes campestres del país.
El nombre “Qumran” fue elegido por ser reconocido históricamente como la zona donde se encontraron los manuscritos del Mar Muerto, y como un lugar donde emana leche y miel; es decir lleno de paz y espiritualidad.
¿Cómo mantener la privacidad en una ciudad como Bogotá?
Desde lo normativo el arquitecto Urueña explica que “contamos con la fortuna que el sector ha conservado su norma inicial de baja densidad, donde solo se pueden levantar máximo 20 viviendas por hectárea, eso lo respetamos en el momento que se planeó el desarrollo inmobiliario y se mantiene, aún por encima de la presión de convertir la zona en una con mayor densidad poblacional, pero aquí se conservan grandes áreas verdes respetuosas con el medio ambiente”.
Otro punto clave es que Qumran se encuentra sobre un terreno elevado que hace que sus vecinos más próximos no obstruyan la vista, la privacidad y exclusividad elegida por los habitantes. Además, el uso de ladrillo, característico de la arquitectura colombiana, les ha permitido a los edificios mantenerse con vigencia arquitectónica clásica y siempre elegante, en armonía con la topografía y la arborización, que suele destacarse en el paisaje para quienes pasan por ese sector de Bogotá.

¿Para quién Qumran II es el lugar ideal?
Lo es para quien busca una vida sosegada dentro de la ciudad, un lugar natural, de alguna forma aislado, pero a la vez cerca de colegios, hospitales, centros empresariales, comercio, restaurantes, y parques.
“La tendencia es buscar vivienda de alto nivel a las afueras de Bogotá, pero en Qumran II estoy cerca de todo en un lugar hermoso y natural -explica el arquitecto- no estamos vendiendo sobre planos, no es un proyecto, ya la construcción es una realidad. Los acabados de cada unidad serán escogidos por cada familia privilegiada que disfrutará de Qumran II.
Desde la dirección de Qumran II recalcan que con las nuevas tendencias en teletrabajo y estudio que trajo la pandemia, la reactivación económica y la creciente demanda de desarrollos inmobiliarios como inversión familiar y personal, esta es una oportunidad difícil de dejar pasar si la idea es vivir en comunidad con calidad de vida y la exclusividad de uno de los mejores sectores de Bogotá.
Puede conocer más de Qumran II aquí: https://qumran2.com.co/