La propuesta contempla que las personas que actualmente conforman la planta de personal de las notarías sean reubicadas en otras labores y otras entidades.
En Colombia existen 911 notarías y 77 de ellas están ubicadas en Bogotá. En el primer semestre del 2021, 112 notarías en el país se transformaron en “notarías virtuales” pero esta transformación es parcial y deficiente, pues el concepto de “notarías virtuales” actualmente en Colombia implica de todas maneras la existencia de un funcionario (notario) que aprueba el trámite (uno por uno). Por lo tanto, aunque se ha adoptado tecnología, la demora sigue siendo la misma, y los ciudadanos continúan viéndose obligados a acudir a la notaría de manera presencial.
Viendo esto, el representante a la Cámara por Mauricio Toro, está proponiendo la construcción de un proyecto de ley, para reemplazarlas por tecnología, como el blockchain, para permitir que todos los trámites que hoy en día se realizan en una notaría, se puedan hacer de manera virtual.
“Nuestra propuesta se centra en unificar de manera gradual todas las notarías del país en una sola entidad que tenga un solo repositorio de información digital y que utilice tecnología blockchain para todos los trámites notariales y de fe pública, de manera que los ciudadanos puedan hacer trámites notariales sin salir de casa e invirtiendo poco tiempo y a un costo mínimo. Esta tecnología se puede utilizar en la autenticación de documentos, expedición de copias, registros civiles, escrituras públicas, entre otras funciones, para lo cual ya existe tecnología eficiente y que se utiliza en otros países”, afirmó Toro.
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El congresista explicó que la esencia de la propuesta es que desaparezca la figura del notario como hoy existe en Colombia (una persona que firma documentos, y da “fe pública” mediante su almacenamiento y custodia en papel) pues hoy en día la tecnología tipo blockchain es mucho más confiable, efectiva y eficiente para ejercer estas funciones de fe pública, custodia y verificación de identidad.
Para evitar la creación de nuevas entidades y evitar su costo fiscal, la propuesta contempla reformar la naturaleza de la Superintendencia de Notariado y Registro, que dejaría de funcionar como supervisor, para pasar a ser una Agencia Nacional de la Función Notarial Digital.
Así mismo, que cada municipio tenga al menos una sede física de la Agencia para que puedan acudir las personas que no tienen acceso a internet o que no desean hacer el trámite de manera virtual, o que viven en zonas apartadas donde no hay conectividad.
En cuanto al talento humano que emplean las notarías actualmente, una parte será asumida por la nueva Agencia, para el cumplimiento de sus funciones, para apoyo y administración en los puntos territoriales de la nueva Entidad. Otra fracción se dedicará a la pedagogía y difusión de las nuevas tecnologías en los municipios en los que haya baja digitalización y otra fracción podrá ser reubicada en los Juzgados de pequeñas causas y competencias múltiples para recibir declaraciones extraprocesales, e incluso en entidades como la Procuraduría donde se han abierto 1.200 nuevos cargos, la Contraloría y la Defensoría del Pueblo.
De acuerdo a la propuesta, al nueva función notarial digital deberá ir de la mano con el proceso de adopción de Cédula Digital que está realizando actualmente la Registraduría Nacional del Estado Civil para darle uso realmente a esta nueva cédula, lo cual permitirá el reconocimiento biométrico de los ciudadanos sin costos adicionales.
La propuesta también incluye habilitar un Sand Box regulatorio previo a la reglamentación e implementación definitiva. Un periodo de un año, en el cual se realice un “arenero” regulatorio donde el sector público y privado puedan realizar trámites, aportar tecnología, propuestas y obtener información de calidad para que la reglamentación que debe hacer el Gobierno sea pertinente, adecuada y actualizada, tomando en consideración la realidad colombiana, las necesidades jurídicas y el comportamiento de la ciudadanía
Una vez expedida la reglamentación, se debería tener un periodo de adopción e implementación gradual de aproximadamente 3 años, facilitando su adopción y garantizando la estabilidad laboral de los funcionarios de las notarías.
Por último, el representante Mauricio Toro, quien ha liderado temas de innovación y tecnología en el Congreso, espera poder radicar el proyecto de ley, el próximo 20 de julio, de quedar reelegido.