La Superintendencia de Industria y Comercio formuló este miércoles pliego de cargos en contra de Bavaria para determinar si la empresa pactó cláusulas de exclusividad para afectar a su competidor Central Cervecera.

El superintendente de Industria y Comercio, Andrés Barreto, anunció este miércoles que la entidad formuló pliego de cargos en contra de Bavaria para determinar si la empresa implementó una estrategia a obstruir el acceso o expansión de nuevos competidores en el mercado de cerveza.

Dicha estrategia, explicó Barreto, habría consistido en el aumento significativo y desproporcionado en el uso de cláusulas de exclusividad con establecimientos de comercio dedicados a la venta del producto para consumo directo. “Con esta estrategia Bavaria habría obstruido el crecimiento de sus competidores en el mercado de cervezas”, explicó la Superindustria.

Barreto explicó que el presunto abuso consistía en limitar a los competidores a través de cláusulas que afectaban la competencia, pues los tenderos no podían vender otros productos o sustitutos. “Eso limita y pone barreras a los consumidores”.

De acuerdo con la Superindustria, “el comportamiento investigado habría privado de los beneficios que ofrece un mercado en competencia con la entrada y/o expansión de nuevos competidores, más opciones, mayor diversidad de productos y mejores precios para los consumidores”.

Lea también: Bavaria flexibilizará acuerdos comerciales para dar cabida a pequeños cerveceros artesanales

La entidad confirmó que los investigados son Bavaria, que ostenta el 92% de posición de mercado en Colombia, y como persona natural José Luis González Quiroz, vicepresidente comercial de la empresa entre 2017 y 2020.

El caso data, según explicaron, desde 2018 cuando se recibió la queja por parte de la Central Cervecera de Colombia, momento por el cual la delegatura entró en una etapa preliminar para poder constatar el caso. En el marco de la actuación administrativa, la Superintendencia evidenció que Bavaria incrementó de manera exponencial el uso y aplicación de cláusulas de exclusividad como reacción a la entrada en operación de la planta de producción de Central Cervecera.

Así mismo, la Superintendencia encontró pruebas que sugieren que la intención de Bavaria habría sido obstruir el crecimiento de ese competidor, así como que las exclusividades que Bavaria implementó habrían logrado ese resultado en algunos canales de comercialización.

Por ahora confirmaron que podrían imponer multas hasta de 1000.000 salarios mínimos, por cada infracción al régimen de libre competencia, y a quienes hayan colaborado, facilitado, autorizado, ejecutado y/o tolerado las conductas anticompetitivas, por hasta 2.000 salarios mínimos.

Antecedentes

Forbes ya había registrado hace más de un año cómo las dos principales empresas cerveceras de Colombia se enfrentaron en este momento a un lío jurídico ante la delegatura para los asuntos jurisdiccionales de la Superintendencia de Industria y Comercio.

Central Cervecera de Colombia (CCC), que nació en 2019 tras un el joint venture de la compañía chilena Cervecerías Unidas y la Organización Ardila Lülle, y la cual produce marcas como Andina, Miller Lite, Heineken, Sol y Tecate, entre otras, presentó hace un tiempo una demanda ante ese despacho argumentando que Bavaria ostenta una posición de dominio, que ha generado una ventaja competitiva y cláusulas de exclusividad que afectan la competencia.

Según argumentaron en ese momento ante ese despacho, “Bavaria, a partir de la integración entre AB Inbev y Sabmiller PLC, “ha generado, con clausulas de exclusividad, una obstrucción en la comercialización de cerveza en el canal on premise, especialmente en los establecimientos de mayor reconocimiento y volumen de compra en cada uno de los principales municipios del país”.

Lea también: Superindustria frena alianza entre Bavaria y Coca-Cola

En ese momento advirtieron desde la CCC que “la forma en que se lleva a cabo la obstrucción o restricción en el acceso al mercado se ejecuta mediante la celebración de contratos de patrocinio con los propietarios de dichos establecimientos”. Por eso, explicaron en la demanda, que quienes suscriban los contratos de patrocinio adquieren la obligación de realizar “publicidad exclusiva de las marcas de Bavaria y de vender de manera exclusiva sus cervezas, con lo cual se restringe el acceso de CCC al mercado”.

Los argumentos de la CCC se han soportado en que en los últimos años ha crecido el número de contratos que ha firmado Bavaria con los propietarios. Ante la Superintendencia, destacaron, incluso, que “en el trimestre octubre-diciembre de 2016 era de 136, en el semestre enero-junio de 2017 era de 4447 y a 31 de diciembre de 2017 era de 13535, lo que corresponde a un incremento en un año del 9.952 %”

Bavaria respondió que estas pretensiones carecen de fundamento jurídico y fáctico, pues, según se puede leer en el documento de la Superindustria, se suscribían contratos de patrocinio para fomentar la venta de sus productos, que ya eran bien conocidos por ese despacho.

En medio de esta disputa, Bavaria argumentó ante ese tribunal que “las clausulas de exclusividad pactadas por Bavaria en los contratos de suministro de sus productos no han tenido como objeto restringir el acceso al mercado de CCC o monopolizar la distribución de productos o servicios”.

Lea también: Bavaria invertirá $1.000 millones en empaques para promover consumo responsable

Tras escuchar los argumentos de las dos partes, la Superintendencia de Industria y Comercio emitió en 2021 una sentencia, mediante la cual declara que Bavaria “incurrió en el acto de competencia desleal denominado pactos desleales de exclusividad consagrado en el artículo 19 de la ley 256 de 1996″.

En el documento, la entidad ordena a la empresa “abstenerse de suscribir, a futuro, contratos de suministro que incluyan cláusulas de exclusividad para la venta de cerveza. Lo anterior, sin perjuicio de que Bavaria puede conservar las exclusividades que tenga pactadas a la fecha de notificación de la presente providencia”.