Un estudio de la plataforma Properati reveló que en Bogotá los costos de los alquileres subieron muy cerca al valor de la inflación, pero no la superaron. Otras ciudades no tuvieron el mismo comportamiento.
En Bogotá los precios de los arriendos crecieron un 6% durante el último año, dos puntos porcentuales menos que la inflación (8,5%), según reveló un estudio de la plataforma Properati.
Según el estudio, durante el último año, el precio promedio de arriendo en Bogotá subió USD $43,56, es decir un 6%; una cifra cercana al 8,5% de inflación interanual en marzo. Hoy, alquilar un apartamento en Bogotá cuesta, en promedio, USD $772, poco más de 3 millones de pesos.
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El panorama de Bogotá se asemeja al de otras capitales latinoamericanas como Lima, donde los alquileres subieron un 4,8%, en correspondencia con una inflación interanual del 7,5%. En ambos casos, los costos de rentar un apartamento subieron menos que la inflación.
Sin embargo, en Quito y Buenos Aires el panorama es ligeramente distinto. En la capital ecuatoriana los arriendos se incrementaron en un 4,4% durante el último año, aún cuando la inflación interanual fue del 2,6%. Mientras tanto, la inflación interanual argentina llegó al 55% y en su capital los precios de los alquileres subieron un 57%.
¿Qué tanto coinciden la inflación y el arriendo?
La inflación mensual no ha dado tregua durante los primeros meses del 2022 en Colombia y Perú, a pesar de que algunos meses creció por debajo del 1%. Esta tendencia al alza se corresponde idénticamente con el incremento en los precios, que no han parado de subir desde noviembre del 2021.
En Quito se evidencia una variación moderada en los precios de los alquileres durante el 2022, muy similar a la variación que ha tenido el costo de vida. Entre tanto, los arriendos en Buenos Aires han aumentado con menor velocidad que la inflación desde noviembre.
¿Cómo se comportó el mercado durante esta época?
A nivel general, la demanda de alquileres disminuyó en el último año. En Lima y Quito, las búsquedas de apartamentos en renta cayeron con más fuerza entre agosto y septiembre; mientras que Bogotá tuvo la mayor disminución a mitad de año (2021) y en Buenos Aires fue un descenso paulatino. Bogotá y Buenos Aires son las únicas ciudades donde la demanda ha recuperado terreno en el 2022.
Por otra parte, la oferta de arriendos creció significativamente en Lima hasta tocar techo en agosto, de ahí en adelante disminuyó. Mientras tanto, en Bogotá, Quito y Buenos Aires hubo una cantidad de anuncios de alquileres relativamente estable durante los primeros meses hasta la mitad del 2021, momento en el que comenzó a disminuir.