Un artículo publicado en la revista PNAS, piden al Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático que dedique un informe para impulsar la investigación e informar al público.

El calentamiento global podría llegar a ser “catastrófico” para la humanidad si el aumento de la temperatura es peor de lo que muchos predicen o si provoca una cascada de acontecimientos aún no considerados, o ambas cosas. “El mundo debe empezar a prepararse para la posibilidad de un ‘final climático’”.

Así lo afirma un equipo internacional de investigadores dirigido por la Universidad de Cambridge, que propone una agenda para afrontar los peores escenarios. Estos incluyen resultados que van desde la pérdida del 10% de la población mundial hasta la eventual extinción humana.

En concreto, en un artículo publicado en la revista PNAS, piden al Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) que dedique un futuro informe al cambio climático catastrófico para impulsar la investigación e informar al público.

“Hay muchas razones para creer que el cambio climático puede llegar a ser catastrófico, incluso con niveles modestos de calentamiento”, señala el autor principal Luke Kemp.

El aumento de las temperaturas supone una gran amenaza para el suministro de alimentos a nivel mundial y podría crear las condiciones para nuevos brotes de enfermedades a medida que los hábitats de las personas y de la vida silvestre cambian y se reducen.

Para la científica Kristie Ebi, de la Universidad de Washington, “necesitamos un esfuerzo interdisciplinar para entender cómo el cambio climático podría desencadenar la morbilidad y mortalidad masiva de los humanos”.

Además, el colapso del clima probablemente exacerbaría otras amenazas: desde el aumento de la desigualdad y la desinformación hasta el colapso democrático e incluso nuevas formas de arsenal destructivo de inteligencia artificial.

Lluís Brotons, investigador del CSIC en el Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales (CREAF), España, señala que el estudio “pone el dedo en la llaga del realismo y del sentido de precaución”.

“Nos plantea la necesidad de evaluar las implicaciones de este tipo de escenarios de una manera mucho más seria de lo que hemos hecho hasta ahora, por ejemplo, mediante una evaluación específica del IPCC”, añade a Science Media Centre España el científico, quien no participa en el estudio. 

EFE