La Asociación Colombiana de Minería, que representa los principales gremios mineros del país, dijo que la tributaria del gobierno de Gustavo Petro impactaría la inversión en la industria.

Millonarias inversiones en el sector minero estarían en riesgo si se aprueba la reforma tributaria, tal y como la presentó el Gobierno Nacional al Legislativo. Esa fue una de las alertas de la Asociación Colombiana de Minería (ACM), que en el marco de su congreso en Cartagena, advirtió que dicha iniciativa pondría en vilo el desarrollo de varios proyectos estratégicos del país.

El presidente de la ACM, Juan Camilo Nariño, aseguró que la tributaria no solo tendría implicaciones por el impuesto de 10% a las exportaciones de petróleo y carbón, sino además porque se busca que las regalías no sean deducibles en el impuesto de renta que pagan las empresas del sector.

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Nariño dijo que el sector puede ser un aliado del crecimiento económico, gracias a que hoy goza de un ambiente de altos precios. No obstante, detalló que el nuevo Government Take, que es lo que pagan los privados para el desarrollo de los proyectos, podría elevarse hasta 90% en el caso del coque, desde 64% y en el caso del oro hasta 92% desde el 64% actual.

Luego de un análisis detallado sobre la tributaria, la ACM detalló que si se desincentiva el desarrollo de la industria minera, se tendría impactos en empleo, contribuciones ambientales y fiscales, en el recaudo e incluso en la inflación.

Este año el sector minero busca entregar alrededor de $14,7 billones al Gobierno, un poco más del 50% de la reforma tributaria que se está tramitando. Nariño explicó que ese total se debe al pago de impuestos a la Nación, regalías y, en parte, al momento de buenos precios que se vive en la industria.

“La tributaria tiene impactos en la dimensión social importante, porque el sector minero tiene un profundo arraigo fiscal importante, y esa es la conversación que estamos teniendo con el gobierno”, detalló Nariño.

Uno de los argumentos del gremio es que en gran parte de los países de la región las regalías son deducibles, lo que permite que haya mayor atracción de inversión.

En el marco del congreso, Forbes conoció que ya hay varias compañías que están evaluando la situación, sus impactos y qué implicaría para sus operaciones. De hecho, algunas estarían analizando la posibilidad de desinvertir en el país.

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