Las empresas comprenden la necesidad de la gestión adecuada de datos para la toma de decisiones más asertivas.

Los avances tecnológicos han revolucionado al mundo organizacional, gracias a soluciones que optimizan procesos al interior de las empresas, desde la gestión de datos, la automatización y la inteligencia artificial. ¿Pero podrían estas herramientas asumir la toma de decisiones estratégicas?

El estudio The Decision Dilemma, hecho por Oracle y Seth Stephens-Davidowitz, encontró que por lo menos el 41% de los líderes empresariales preferiría que un robot se encargara de tomar las decisiones en su organización. Al ahondar en las razones por las que las personas cederían esa función a la tecnología, se identificó que la abundancia de datos es uno de los factores que dificulta esta tarea.

Los resultados de la encuesta, que contó con la participación de 14.000 empleados y líderes empresariales de 17 países, indican que cerca del 78% de los consultados afirmó que el volumen de datos hace que la toma de decisiones sea más compleja y el 73% ha optado por no hacerlo debido a la abrumadora cantidad de información.

El mayor obstáculo que encuentran las personas al enfrentarse a una variedad de datos es reconocer si son o no confiables, así lo manifestó el 32% de los encuestados; de ahí que solo consulten fuentes que confían (44%) o se orienten solo por su intuición (24%).

Las habilidades blandas, como la toma de decisiones, se imponen como el factor diferencial de los profesionales, ante el desarrollo de tecnologías tales como la inteligencia artificial generativa. Pero, parece ser, los líderes y colaboradores están dispuestos a ceder terreno para ser más estratégicos en el negocio y tener mejores resultados.

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Al interior de las organizaciones se ha comprendido la importancia de la gestión adecuada de los datos para agilizar las tareas: el 99% de los líderes considera que un sistema de inteligencia de decisiones puede ser favorable para la organización y ese mismo porcentaje quiere respaldar sus estrategias con datos: en la toma de decisiones (49%), reducción de los riesgos (48%), agilidad en las decisiones (42%) y mayores ingresos (45%).

Sin embargo, también precisan que los enfoques tradicionales de gestión de datos se queda corta ante desafíos como la recopilación de datos, los tiempos de decisión, la pertinencia de la información y los errores; sobre todo porque en ocasiones se limitan al área de TI. Los líderes buscan que los datos permitan mejorar la toma de decisiones en áreas como Recursos Humanos (97%), finanzas (96%), cadena de suministro (97%) y experiencia del cliente (97%).

Un comportamiento común que muestra la encuesta es que usualmente se toman primero las decisiones y luego se justifican con los datos, o se guían por la persona de mayor rango o sencillamente se toman de forma irracional (así lo percibe el 14%).

Ante estos desafíos, cuatro de cada diez líderes consultados preferirían que un robot tomara decisiones en su organización. El 91% de los encuestados asegura que las organizaciones que se apalancan en el uso de tecnologías en la toma de decisiones son más fiables y tienen más éxito (91%).

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