Los cargos apuntan contra grandes marcas como Terpel, Chevron, Primax y Biomax, además de otros distribuidores minoristas del departamento. Las multas podrían ascender a $116.000 millones.
La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) formuló pliego de cargos contra Terpel, Chevron, Biomax, Primax, la Asociación de Distribuidores Minoristas de Combustible y Derivados del Petróleo de Nariño (Adiconar) y 46 distribuidores minoristas de combustible líquido, por obstaculizar el ingreso de nuevos agentes mayoristas a dicho mercado en el departamento de Nariño.
Esta estrategia, que habría sido acordada en reuniones realizadas por Adiconar y en donde habrían participado distribuidores mayoristas y minoristas investigados, habría logrado que el esquema de abastecimiento definido para incentivar la construcción de plantas de abastecimiento en Nariño fuera suspendido.
Lo anterior no representó una eventual reducción de precios de los combustibles líquidos, así como tampoco significó una disminución del riesgo de desabastecimiento de combustibles líquidos, siendo ambos escenarios perjudiciales para los consumidores del departamento.
De comprobarse las conductas mencionadas, la SIC podrá imponer multas a las empresas involucradas de hasta 100.000 salarios mínimos legales vigentes, equivalentes a $116.000 millones. Con respecto a las personas naturales que hubieran colaborado, facilitado, autorizado, ejecutado o tolerado las conductas anticompetitivas, las multas podrían ascender a 2.000 SMLMV, equivalentes a $2.320 millones.
La regulación aplicable para la distribución de combustibles líquidos en zonas de frontera indica que, si un distribuidor mayorista construye una planta de abastecimiento en el departamento de Nariño, tendrá el primer orden de prelación para desarrollar actividades de distribución en ese departamento. Como consecuencia, los demás distribuidores mayoristas solo pueden atender la demanda de combustibles que no hubiera atendido el distribuidor que tuviera prioridad.