Solo el Barcelona y el Real Madrid mantienen su apoyo a la competición creada al margen de la UEFA, luego de que un fallo del Tribunal Europeo de Justicia de Luxemburgo, le diera un segundo aire.
En un nuevo giro a lo que está a punto de convertirse en una telenovela en el mundo del fútbol, ocho de los 12 clubes fundadores de la Superliga, una nueva competición al margen de la UEFA y la FIFA, ideada por el empresario y presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, le están dando la espalda al proyecto luego de que un fallo del Tribunal Europeo de Justicia de Luxemburgo, le diera vida.
“Hoy es un gran día para la historia del deporte y el fútbol. El fútbol europeo ya no será un monopolio y los clubes serán los dueños de su destino”, dijo Pérez en una declaración institucional, emitida por Real Madrid TV.
Pero, al contrario de lo que muchos esperaban, solo el Barcelona y el Madrid respaldan abiertamente la iniciativa. Chelsea y Manchester City fueron los primeros que se bajaron del proyecto. Después se sumaron los demás clubes ingleses (Liverpool, Manchester United, Arsenal, que conforman los Big Six o seis grandes), el Atlético de Madrid y dos italianos, Inter y Milan. La Juventus mantiene un silencio que dice mucho y poco.
Jürgen Klopp, técnico del Liverpool, aseguró que le gusta que se entienda que la UEFA y otras federaciones “no pueden hacer lo que quieran”, pero insistió en su apoyo al club y su rechazo a la Superliga Europea, que en la propuesta actual tendría 64 clubes masculinos y 32 femeninos.
El conjunto de Anfield comunicó este viernes que está comprometido con las competiciones UEFA y que rechaza la idea de la Superliga, pese a que formó parte de los fundadores en abril de 2021.
“Me gusta que entendamos un poco que la UEFA y otras federaciones no pueden hacer simplemente lo que quieran y que tenemos que hablar. Más competiciones y más partidos y nadie dice nada. Me gusta que haya un poco de movimiento, pero mi opinión respecto a la Superliga es la misma”, dijo el alemán.
Entre tanto, Mikel Arteta, técnico del Arsenal, acompañó la opinión del club, que se desligó de la Superliga Europea, y confirmó que seguirán jugando la Champions League, pese al fallo del Tribunal de Justicia Europeo a favor de la nueva competición.
“Somos muy claros con esto. Estamos en la misma posición. Nos encanta jugar la Champions League y seguiremos haciéndolo”, dijo Arteta en rueda de prensa, que también fue preguntado por la opinión de los jugadores respecto a la Superliga.
“Eso es una pregunta para ellos. Los aficionados y la pasión que traen al juego es la principal razón por la que este deporte les pertenece a ellos y a los jugadores. Son los absolutos protagonistas y es lo que hace este juego tan disfrutable. Tenemos que cuidar de ellos y su opinión es muy importante”, añadió el técnico español.
Lo propio ha ocurrido en España. Javier Tebas, presidente de LaLiga, dijo que la sentencia de la Justicia europea “no supone una autorización de la Superliga” y alegó que “el fútbol europeo no solo lo pueden construir los más ricos” como, desde su punto de vista, “es lo que quiere el Real Madrid”.
LaLiga documenta su postura en un informe pericial de 2022 de KPMG, que estima que solo en España supondría una pérdida de ingresos global en el torneo de hasta un -55% y un pérdida de valor de los clubes no-Superliga de hasta -64%.
La Superliga causaría la destrucción del balance competitivo de LaLiga: Real Madrid y Barcelona generarían cada uno +400M€ ingresos Superliga y mantendrían su capacidad comercial. El resto clubes perderían un 55% de sus ingresos.
El fútbol profesional genera en España más de 194.000 empleos, 8.390M€ en impuestos y supone el 1,44% del PIB.
Forbes Staff y EFE