La entidad habría aumentando las multas a todos los actores infractores del sistema de salud con el fin de garantizar el derecho a la salud de los usuarios.

La Superintendencia Nacional de Salud (Supersalud) alcanzó una cifra récord en multas durante lo corrido del gobierno actual, que ascendió a $169.868 millones, con una mayor concentración en las deficiencias en la prestación de servicios, impuestas mayoritariamente a las entidades prestadoras de salud (EPS), según reportes oficiales de la institución.

“Estas cifras demuestran la grave situación en la que se encuentra el sistema de salud en el país y evidencian el compromiso de la Supersalud en su empeño por defender el derecho a la salud de los usuarios del sistema de salud”, dijo el superintendente de Salud, Ulahy Beltrán.

Entre agosto de 2022 y diciembre de 2023, la institución ha impuesto un total de 524 sanciones, de
las cuales 413 fueron multas en primera instancia y 111 amonestaciones, relacionadas con el incumplimiento a la normatividad vigente y las obligaciones por parte las entidades responsables del aseguramiento en salud, la prestación de los servicios y la supervisión territorial.

Según los reportes oficiales, la mayor cantidad de multas recayeron sobre las Entidades Administradoras de Planes de Beneficios de Salud (EAPB); entre las que se encuentran las EPS que operan los regímenes contributivo y subsidiado, tanto las activas como aquellas que están en liquidación, las EPS indígenas y los programas de salud de las cajas de compensación familiar (CCF), las cuales suman 149 multas que alcanzaron unos $80.527 millones.

Le siguen en su orden, por monto alcanzado, las Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud (IPS) con 39 multas que sumaron $27.971 millones; posteriormente 107 sanciones a personas naturales, cuyo valor en multas sumaron $19.870 millones. También se impusieron multas a algunos entes territoriales y a generadores, recaudadores y administradores de recursos financieros del sistema; los primeros, con 42 multas que sumaron $15.775 millones, mientras que los segundos registraron 76 multas que totalizaron $25.723 millones.

Asimismo, Beltrán aseguró que uno de los principales logros de la actual Superintendencia apunta al restablecimiento de la función de control sobre los vigilados que vulneran el derecho a la salud de todos los usuarios, y reafirmó su compromiso de hacer de la institución “una entidad amiga, aliada y efectivamente solidaria con los usuarios, al garantizar soluciones efectivas y hacer presencia funcional en los territorios más vulnerables del país”.

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