El dato anual aumenta las posibilidades de que el Banco de la República reduzca nuevamente su tasa de intervención en la próxima reunión del 31 de enero.

El Dane reveló que la variación anual del índice de precios al consumidor (IPC) fue de 9,28% el año pasado, con lo cual Colombia regresa a una inflación de un dígito después de haber tocado un techo de 13,12% en 2022. 

El comportamiento anual se explica principalmente por la variación anual de las divisiones Alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles y Transporte.

La cifra del 9,28% es positiva ya que refuerza la posibilidad de que el Banco de la República continúe con la reducción de su tasa de intervención (actualmente en 13%) después del primer paso que dio en ese sentido en diciembre con una disminución de 25 puntos básicos (0,25%).

En diciembre, el IPC registró una variación mensual de 0,45%, menor que la del mismo periodo en 2022 cuando fue del 1,26 %, y por debajo de las expectativas del mercado que para el año completo proyectaba 9,50% (en un rango entre 9,35% y 9,60%%), según la Encuesta de Opinión Financiera de Fedesarrollo.

El dato anual es incluso inferior a la proyección del gobierno (9,5%), ante lo cual el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, destacó que el aumento del salario mínimo fue de 2,9 puntos porcentuales en términos reales. 

“Tenemos controlada la inflación tanto en alimentos como en otros bienes y además hemos desindexado buena parte de los bienes de la economía, lo que significa que vamos en la senda correcta y podemos esperar al final de 2024 una inflación inferior al 5% y que continúe la senda de reducción de la tasa de intervención del Banco de la República”, concluyó el funcionario. 

Sergio Olarte, economista principal de Scotiabank Colpatria, explicó que la inflación bajo más porque los alimentos en la economía hicieron una inflación mensual casi de cero, haciendo que la inflación anual bajará del 6 % en términos anuales. 

“Esto fue importante porque hizo también que la inflación de ingresos bajos fuera la que menos tuviera incremento durante el año pasado y tuviera una inflación a fin de año por debajo del 9 %”, agregó.

Según Olarte, hay dos elementos que hacen que la inflación esté por encima del rango meta del Emisor (2%-4%): el primero son los arriendos, que el año pasado registraron un aumento superior al 13%, y el segundo fueron  los bienes regulados de la economía, la energía eléctrica y la gasolina tuvieron incrementos muy importantes; la gasolina va por encima de 44 % y la energía eléctrica por encima del 20 %.