La batalla entre la hija y los nietos de Agnelli por la herencia comenzó en 2004, cuando la hija del "patrón" de Fiat aceptó las acciones de la sociedad de cartera de la familia a cambio de cerca 1.300 millones de euros, pero luego impugnó el acuerdo.

Los abogados de John Elkann, nieto y heredero del imperio de Gianni Agnelli, el histórico “patrón” de Fiat, aseguraron hoy que su madre, Margherita, “lleva más de 20 años persiguiendo judicialmente” a sus hijos, tras la nueva denuncia presentada en el último episodio de la larga batalla que mantienen por su herencia.

“Hay una madre que lleva más de 20 años persiguiendo judicialmente -haciendo además amplia publicidad en la prensa- a sus padres y a tres de sus hijos, quienes no tienen otra responsabilidad que la de haber sido los únicos que aseguraron a su abuela (Marella) cuidados, asistencia y dedicación hasta su último día”, indicaron en una nota.

La batalla entre la hija y los nietos de Agnelli por la herencia comenzó en 2004, cuando la hija del “patrón” de Fiat aceptó las acciones de la sociedad de cartera de la familia a cambio de cerca 1.300 millones de euros, pero luego impugnó el acuerdo.

La nueva denuncia presentada por Margherita, “cuyo contenido exacto no se conoce”, según explican los abogados, llevó a que la Guardia de Finanzas registrase hace unos días las oficina de Elkann, director general de Exor, el ‘holding’ de la familia Agnelli.

Agregan que Margherita Agnelli no “tiene la condición de perjudicada en el delito” en este caso, ya que se trata de “una infracción fiscal” que “carece de todo fundamento por numerosas razones”, que no especifican porque “la defensa se llevará a cabo en los foros adecuados”.

Los defensores de Elkann y sus hermanos Lapo y Ginevra expresan “el dolor personal” de sus defendidos por ser “objeto de acusaciones que tienen todas un origen similar” y precisan que “hasta el momento, todas las iniciativas de Margherita Agnelli no han sido reconocidas en ningún tribunal, ni penal ni civilmente”.

“Margherita Agnelli, considerando crítico e incierto el destino de las actividades empresariales de su hijo y de su familia de origen, decidió en 2004 monetizar su parte, para luego, paradójicamente, tratar de beneficiarse de un nuevo incremento patrimonial”, aseguran los abogados.

Pero ese aumento del patrimonio “se derivaba del éxito del plan de relanzamiento de Fiat, al que ella no contribuyó en modo alguno, pero del que, como madre, debería alegrarse y sentirse orgullosa, ya que su hijo fue el principal artífice”, añaden.

“Así pues, el método y los objetivos de Margherita Agnelli son siempre los mismos: lo impugna todo, llegando incluso a incumplir los acuerdos firmados para no reconocer la voluntad de sus padres, que fueron, de hecho, los primeros en ser acusados de una conducta ilícita desde el punto de vista penal, civil y moral”, añadieron.

En 2004 y tras varios litigios, la batalla por la herencia de Agnelli alcanzó lo que parecía un acuerdo, pues la hija del “patrón” de Fiat aceptó las acciones de la sociedad de cartera de la familia a cambio de una suma millonaria, de cerca 1.300 millones de euros.

Tras renunciar a ellas, las acciones pasaron de su madre Marella, la viuda de Agnelli, que falleció en 2019, al primogénito de Margherita, John Elkann, nacido de su matrimonio con Alain Elkann.

Sin embargo, en 2021 Margherita Agnelli decidió impugnar el acuerdo para la cesión de las cuotas y después continuaron varias denuncias contra sus hijos, todas ellas por el momento sin éxito. 

EFE