La filial de Ecopetrol ejecutará inversiones por más de $4 billones entre 2024 y 2026, con el fin de garantizar la seguridad y la soberanía energética del país, y la transición hacia combustibles más limpios.
La refinería de Ecopetrol en Barrancabermeja celebra este lunes 102 años, con la puesta en operación de su nueva Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR), que mejora la calidad de los vertimientos autorizados a las aguas del río Magdalena, en un paso encaminado a ser agua neutral en 2045.
La PTAR, construida con una inversión de US$143 millones, cuenta con un sistema de tratamiento de aguas aceitosas e industriales que separa las grasas, los aceites y el material sólido, para asegurar el cumplimiento de los parámetros normativos ambientales para vertimientos a cuerpos de agua superficiales.
Sus unidades hacen posible la reutilización de aguas industriales para diferentes procesos, al tiempo que reducen la captación de agua fresca para contribuir a la sostenibilidad de los recursos hídricos en las regiones donde opera la compañía.
“El río Magdalena lo cuidamos y defendemos porque somos conscientes de su importancia para la vida y el bienestar de las comunidades ribereñas”, dijo Carlos Guillermo García, gerente de la refinería.
Con una capacidad de procesamiento de 246.000 barriles de petróleo diarios, que son transformados en combustibles, aromáticos, asfalto, varsol, parafinas, aceites lubricantes y polietileno, la refinería de Barrancabermeja ejecutará inversiones por más de $4 billones en el período 2024-2026.
Las inversiones apuntan a garantizar la seguridad y la soberanía energética del país, y la transición hacia combustibles más limpios.
Los recursos se emplearán en la ejecución de los siguientes proyectos:
• Granja solar “La Iguana”: tendrá una capacidad de 26 MWp (Megawatios pico) con 43 mil paneles de última generación, para alcanzar una reducción de 18 mil toneladas de CO2. Se estima que entre en operación en mayo de 2025.
• Unidad de Biomasa: con capacidad de generación de energía limpia hasta 25 MW/h (Megawatios hora) que potencialmente tendría un procesamiento de residuos vegetales para reducir 158 mil toneladas de CO2 por año. La energía que producirá esta planta podría satisfacer el consumo domiciliario de electricidad para una ciudad como Manizales.
• Combustible sostenible de aviación: se diseñará una unidad con capacidad de carga de 6 mil barriles por día, para producir combustible a partir de aceites vegetales, con la alternativa de incorporar más adelante biomasa y otras materias primas.
• Hidrógeno: se encuentran en maduración dos proyectos a escala industrial para habilitar la producción de hidrógeno de bajas emisiones con foco en las operaciones propias de la refinería.
• Propileno circular: desde finales de 2023 se incorporaron pequeños volúmenes de aceite pirolítico a partir de plástico reciclado, en una de las unidades cracking de la refinería, y en sinergia con Esenttia ya se produce propileno y polipropileno circular, utilizado en la fabricación de empaques flexibles que envasan diferentes productos alimenticios.