Un golpe de suerte llevó al inversionista Antonio Gracias a conocer a Musk y apostar por Tesla desde el principio. Eso, y su enfoque en la resolución de problemas a nivel de fabricación, ha sido clave para su enorme éxito.
Durante un momento agotador para Elon Musk hace seis años, su amigo Antonio Gracias -miembro de la junta directiva de Tesla e inversionista inicial de la compañía- demostró su valía como compañero solidario y solucionador de problemas invaluable.
Era el verano de 2018, y Gracias y Musk trabajaban casi sin parar para aumentar la producción del Model 3, el auto eléctrico estrella de la compañía, resolviendo problemas en la cadena de suministro y la fabricación. Durante unas horas cada noche, dormían en salas de conferencias adyacentes a la fábrica.
Gracias, que ahora tiene 53 años, lo describió como una operación “todos a bordo, 24/7”, calificándola como lo más difícil que jamás había hecho. Los dos hombres rara vez salían de las instalaciones, incluso celebraron el cumpleaños número 47 de Musk con un pastel de la tienda de comestibles de al lado, porque no podían alejarse el tiempo suficiente para una fiesta adecuada.
Gracias, un inversionista rápido y locuaz, nacido y criado en el Medio Oeste de Estados Unidos, se convirtió en uno de los primeros inversionistas institucionales de Tesla en 2005 a través de su firma Valor Equity Partners y comenzó a invertir en SpaceX unos tres años después, según el sitio web de Valor. A lo largo de las casi dos décadas transcurridas desde entonces, la estrategia de inversión práctica de Gracias y sus apuestas en las empresas de Musk han dado frutos.
Ahora es multimillonario, según estimaciones de Forbes, gracias principalmente a sus acciones de Tesla y otras inversiones realizadas por Valor Equity Partners, firma que fundó en 2001 y que gestiona US$14.200 millones en activos regulatorios.
En el camino, se ha convertido en un amigo cercano de Musk, esquiando y saliendo de vacaciones familiares juntos. (“Si no saliéramos de vacaciones con los niños, no los veríamos. Trabajábamos tanto”, dijo Gracias una vez). Y Musk ha invertido en Valor Equity Partners de Gracias, aportando US$2 millones tanto en su primer como en su segundo fondo, lo que sin duda le da más credibilidad a la firma. Gracias declinó comentar sobre su patrimonio neto o ser entrevistado para este artículo. Pero ha reconocido en procedimientos judiciales que amasó “riqueza dinástica o generacional” al invertir en varias de las empresas de Musk, incluidas Tesla, SpaceX y SolarCity.
Los amigos, co-inversionistas y ejecutivos de empresas de su cartera describen a Gracias como intenso, exigente y siempre trabajando. “Antonio es sin duda el inversionista más exitoso e impactante que nadie conoce”, proclama Keller Rinaudo Cliffton, director ejecutivo del fabricante de drones de reparto Zipline.
Lo que lo distingue, dicen, es su voluntad de ayudar a resolver los problemas menos glamorosos de una empresa. Valor cuenta con un “equipo de escala” de 20 personas cuyo trabajo es trabajar a tiempo completo para ayudar a las empresas de la cartera a hacer precisamente eso. La experiencia de Gracias en manufactura y su pasión por la ciencia cognitiva, inspirada por su padre neurocirujano, han influido en la estrategia detrás de la cartera de Valor de empresas en etapa inicial y en etapa de crecimiento, que van desde la entrega de productos agrícolas (Misfit Markets) hasta datos de inteligencia artificial (Dataminr) y software de defensa (Anduril). Utilizó una estrategia similar para las empresas de su cartera que alguna vez poseyó y que administraban cientos de franquicias de Little Caesars y Dunkin’ Donuts.
En una conferencia de inversionistas en Florida en febrero, Gracias describió la relación de Musk y su firma con él de la siguiente manera: “No todos podemos ser ingenieros brillantes, pero podemos sacar la basura. Somos buenos en eso”.
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Gracias nació en Detroit, Michigan, de padres inmigrantes: su padre es de la India y su madre de España. Su padre era neurocirujano y su madre es una farmacéutica capacitada que dirigió una tienda de lencería. Cuando Gracias estaba en la escuela secundaria, su madre le dio el dinero para hacer su primera inversión: US$300 en acciones de Apple, que todavía conserva hoy. Según informes, exportó condones a Rusia mientras estudiaba economía internacional y finanzas en la Escuela de Servicio Exterior de la Universidad de Georgetown a principios de la década de 1990, donde luego obtuvo una maestría, graduándose en 1993. Luego pasó dos años en Goldman Sachs y fue a estudiar derecho en la Universidad de Chicago.
Mientras estaba en la escuela de derecho, Gracias lanzó un negocio de inversión, llamándolo MG Capital, en referencia a las iniciales de su madre. Utilizando US$400,000 de familiares, amigos y ganancias de sus días en Goldman, así como un préstamo bancario, MG Capital comenzó más como una firma de compra de empresas, comprando pequeñas empresas manufactureras con dificultades, con el objetivo de reflotarlas y venderlas con ganancias. Su primera apuesta fue en una planta de electrochapado con sede en California, donde aprendió sobre operaciones al dirigirla él mismo, viajando de ida y vuelta entre Chicago y Los Ángeles para pasar tiempo en el piso de la fábrica.
“Eso suena como la historia de cómo alguien perdió mucho dinero”, recuerda Cliffton de Zipline pensando cuando Gracias le contó esa historia. “Quiero decir, ¿cuántos estudiantes de derecho comprarían una fábrica que probablemente esté en camino de cerrar? Es realmente sorprendente”.
Gracias estuvo de acuerdo: “Solo alguien que tenga 24 o 25 años, súper ingenuo, podría hacer algo tan estúpido”, dijo en 2022 en el podcast Invest Like The Best, agregando que llevaron a la compañía de US$10 millones a US$125 millones en ingresos antes de venderla.
Después de terminar la escuela de derecho, la casualidad intervino y cambió el rumbo de las inversiones de Gracias. Uno de sus compañeros de clase de la escuela de derecho, David Sacks (que luego cofundó Craft Ventures), estaba trabajando en la startup de software y pagos Confinity en 1999, y MG Capital de Gracias invirtió. Confinity luego se fusionó con la firma de pagos de Musk, X.com, y eventualmente se renombró PayPal. PayPal salió a bolsa a principios de 2002 y fue adquirido por eBay más tarde ese mismo año por $1.5 mil millones. Como resultado, la inversión de MG Capital terminó devolviendo tres o cuatro veces lo que Gracias había invertido. Y llevó a algo mucho más lucrativo para él: una relación con Musk.
Unos años más tarde, en 2005, Musk contactó a Gracias para preguntar si su firma —para entonces MG Capital se había convertido en la firma de inversión basada en fondos Valor Equity Partners— participaría en la ronda de financiación Serie B de Tesla. Gracias dijo que sí, y participó en la financiación de US$13 millones a una valuación de solo US$35 millones. Durante los siguientes tres años, Valor invirtió alrededor de US$15 millones en la empresa de vehículos eléctricos —en un momento en que Tesla aún no tenía un producto funcional y no había un mercado claro para los autos eléctricos—. El equipo de Valor terminó invirtiendo tiempo significativo tratando de reducir los costos de la cadena de suministro relacionados con el primer modelo de Tesla, el Roadster, y ayudando a crear su plan de ventas original. Gracias luego se unió al consejo de Tesla en 2007.
Alrededor de ese tiempo, Valor comenzó a invertir en SpaceX, invirtiendo US$25 millones aproximadamente seis años después de que la firma de cohetes fuera fundada. La firma de Gracias ha invertido dinero en SpaceX a través de cada fondo de Valor desde entonces, un total de al menos US$500 millones que ahora vale casi US$5.000 millones. (Se dice que SpaceX actualmente vale US$180.000 millones). Valor también invirtió en otras empresas dirigidas por Musk, incluidos US$24 millones en SolarCity (que Tesla adquirió en 2016) y entre US$15 y US$20 millones en Neuralink y The Boring Company.
Con el tiempo, para entender por qué algunas de sus inversiones tuvieron éxito y otras fracasaron, Gracias se inspiró en su padre neurocirujano. Comenzó a leer investigaciones en ciencias cognitivas, resumiendo eventualmente su estrategia de inversión con la palabra de moda “pro-entropía”. El término se refiere a la idea de que la entropía, o el caos, es la norma, y las tecnologías que “realmente están perturbando industrias y causando entropía” pasarán por ciclos difíciles, según un exejecutivo de Valor.
Para 2021, la participación personal de Gracias en Tesla creció hasta valer aproximadamente US$1.000 millones, gracias al aumento vertiginoso del precio de las acciones de la empresa de vehículos eléctricos, a la generosa compensación de director de Tesla y a la mayor parte de las distribuciones de Valor. Por ejemplo, el 50% de las ganancias distribuidas a los socios generales del fondo de riesgo de Valor, según documentos judiciales. Valor salió de Tesla después de su oferta pública inicial en 2011.
Desde entonces, Gracias ha vendido más de US$250 millones en acciones de Tesla, parte de las cuales fueron a su exesposa en su divorcio de 2021; la mayoría de sus acciones restantes se mantienen en fideicomisos para sus hijos, que Forbes cuenta para su patrimonio neto. A partir de octubre de 2021, cuando Gracias renunció al consejo de Tesla, el 99% de sus acciones también se habían comprometido como garantía para préstamos. (Forbes descuenta las acciones de Tesla comprometidas en un 25%, el porcentaje máximo que Tesla permite que los directores utilicen como garantía para sus acciones).
El confidente de toda la vida de Musk dejó el consejo en parte debido a la presión sobre Tesla por parte de los reguladores para mejorar su gobernanza corporativa en medio de críticas de que Gracias estaba demasiado cerca de Musk para ser el director independiente principal de Tesla, ya que la relación de Gracias con Musk iba mucho más allá de los negocios, incluidas esas vacaciones de esquí. (Tres otros directores de Tesla también renunciaron).
Sus estrechos vínculos con Musk también lo han llevado al centro de atención relacionado con la compra de Twitter por parte de Musk, ahora llamado X: Valor supuestamente ayudó a supervisar sus despidos masivos después de que Musk tomara posesión, esencialmente realizando tareas que normalmente caerían en un director financiero, informó The Information. Gracias fue uno de los miembros del consejo de Tesla que aprobó el masivo paquete de compensación de Musk en Tesla, que un juez de Delaware anuló en enero. Muchos de los detalles sobre su relación y la carrera de Gracias provienen del testimonio de Gracias en el juicio. Y el Wall Street Journal reportó en febrero que Gracias fue uno de varios directores de Tesla que han consumido drogas ilegales con Musk. (Valor no respondió a una solicitud de comentario sobre la acusación de consumo de drogas).
En un mensaje de texto de 2022 a Musk, mencionado en documentos judiciales, Gracias había escrito “Estoy 100 por ciento contigo, Elon, hasta las últimas consecuencias”, en una conversación sobre la libertad de expresión, haciendo referencia a una línea de El Padrino, una de las películas favoritas de Gracias, e indicando que lucharía junto a Musk contra otros.
Gracias a veces retrata a Musk como un superhéroe, uno cuyo “rabo” ha agarrado. Musk es “como el Michael Jordan de la inversión. Y soy de Chicago”, dijo Gracias en el tribunal en 2022, donde llamó repetidamente a Musk “extraordinario” y un genio del producto. (Gracias estaba testificando en el caso judicial de Delaware que alegaba que Musk estaba sobrecompensado, ya que estaba en el comité de compensación de Tesla cuando se aprobó el paquete de remuneración).
EL CRECIMIENTO DE VALOR EQUITY PARTNERS DURANTE LA ÚLTIMA DÉCADA
Los montos representan los activos bajo gestión regulatoria de Valor al final de cada año indicado, en miles de millones de dólares.
La relación con Musk probablemente ayudó a Gracias a entregar rendimientos por encima del promedio del 20% anual en sus dos primeros fondos, y a recaudar fondos cada vez más grandes. Sus cuarto y quinto fondos posteriores contienen en gran medida empresas no relacionadas con Musk, como la empresa de colchones Eight Sleep, el software de videojuegos Genvid y la empresa de seguros AgentSync (Gracias forma parte de los consejos de administración de las dos primeras empresas, según PitchBook).
RENDIMIENTO DE LOS FONDOS DE VALOR EQUITY PARTNERS
Valor está a punto de cerrar un sexto fondo y la demanda ha sido robusta; su objetivo de US$2.000 millones fue sobresuscrito, según un colega de Gracias, quien pidió no ser nombrado. En adelante, uno de los focos de Valor es la defensa y la seguridad, en parte impulsada por la preocupación de Gracias por la posición de Estados Unidos en el mundo.
Valor lideró una recaudación de fondos gigante de US$1.500 millones en diciembre de 2022 para Anduril, que fabrica armas impulsadas por inteligencia artificial y otro hardware y software centrado en la defensa, y tiene su propio cofundador polarizador, Palmer Luckey.
Trae Stephens, otro cofundador de Anduril y socio de Founders Fund, que también invierte en muchas de las mismas empresas que Valor, dijo que la participación diaria de Valor en el lado del hardware del negocio de Anduril lo diferenciaba no solo de Founders Fund, sino también del resto del mercado de riesgo.
“Literalmente, después de que hicieron su primera inversión, enviaron un equipo para trabajar día a día con nosotros para ayudarnos a poner en orden nuestro hardware y manufactura”, dijo Stephens a Forbes, citando la ayuda de Valor con la gestión de inventario y entrega cuando los pedidos llegan de manera esporádica.
Stephens, quien también se graduó de la Escuela de Servicio Exterior de Georgetown, también enfatizó que el trasfondo de Gracias en relaciones internacionales en lugar de finanzas ha influido en su tendencia a pensar en el poder geopolítico y sus matices al decidir en qué empresas invertir.
Pero Gracias también es práctico y sabe cómo puede ayudar Valor, como lo hizo al principio con Tesla. “Los tipos de problemas con los que lidiamos son problemas recurrentes para nosotros, pero son la primera vez para un fundador principiante”, dijo Gracias en el podcast Invest Like The Best. “Reduciremos el riesgo. Reduciremos el dolor. Aumentaremos la velocidad, y si algo sale mal, podemos ayudarte a solucionarlo. Por eso nos quieres”.