Central Cervecera lleva 5 años fabricando cerveza Andina, con la que busca ganar espacio en ese mercado y hacerle contrapeso al “monopolio” que tiene su competencia directa. Este 2024 apuesta por nuevos lanzamientos como 'Andina refajo', que ha hecho eco en su segmento.
Liderar la empresa que compite directamente contra la mayor cervecera de Colombia es una tarea que no tiene descanso. Incluye creatividad, atención a las tendencias y convicción por la meta: ganar terreno en un mercado muy competido. Felipe Mejía, gerente de Central Cervecera, aceptó ese reto hace un año y hoy su propósito es lograr que la compañía cierre 2024 superando el billón de pesos en ventas y alcance una participación de mercado del 12%.
“Hoy tenemos el 6,3%, pero hay regiones donde participamos más del 10%, como en Barranquilla y Cartagena. También hay otras en donde somos todavía muy pequeños. En empaques no retornables participamos más del 13%, pero en retornables, que es lo más grande del mercado, nos falta mucho por crecer”, explica Mejía en conversación con Forbes.
Central Cervecera inició operaciones hace 10 años, tras la alianza entre la chilena CCU (Compañía Cervecerías Unidas) y la colombiana Postobón. Aunque inicialmente la compañía solo vendía cervezas extranjeras como Heineken, Sol, Tecate y Miller; actualmente también tiene una oferta local encabezada por cerveza Andina, que entró al mercado hace cinco años; Andina Refajo, lanzada en agosto de este año; Tres Cordilleras, en cervezas artesanales, y Natumalta en el segmento de bebidas no alcohólicas.
La compañía nació con el propósito de dinamizar el sector en el país o en otras palabras, de hacerle competencia directa a Bavaria, una de las 20 empresas más grandes de Colombia, con 36 marcas de bebidas alcohólicas y no alcohólicas, y que el año pasado facturó 8 billones de pesos. “La alianza es poderosa, porque Postobón aporta su capacidad de distribución, con más de 450.000 puntos de venta a nivel nacional. Y CCU, que es experto cervecero con presencia en Chile, Argentina y Paraguay, aporta la experiencia en el negocio”, indica Mejía.
Los resultados han sido positivos para la empresa y para el mercado. En los últimos cinco años, que coinciden con la entrada de Andina, el sector se ha dinamizado. Pasó de crecer a tasas del 2,5%, a alcanzar el 4,3%, según explica el directivo. “En el mercado pasamos de 25 millones de hectolitros disponibles a 30,2 millones”, dice.
Esto se traduce en que Central Cervecera ha aportado casi el 40% de ese crecimiento. Además, según datos de Nielsen, en 2023, la categoría de cerveza ganó 70 puntos básicos de participación en el mercado total del alcohol en el país. Hoy existen 30% más marcas nuevas comparado con 2019 y consumidores clave como los tenderos o dueños de negocios, pasaron de tener un 19% de ingresos que venían de la cerveza, a un 25%.
Al respecto, el directivo dice que el país está volviendo a vivir un escenario de competencia y la prueba más clara de eso es que de nuevo el consumidor está abierto a probar nuevas ofertas. “Con esa oportunidad hemos introducido propuestas innovadoras que son un beneficio directo para el consumidor”, puntualiza. El gerente se refiere a novedades como Tecate en envase retornable de 330 ml, que la compañía sacó al mercado por 1.500 pesos. “Aunque hoy la apuesta por la competencia la lidera Central Cervecera, lo que queremos es que se siga ampliando con más jugadores porque estamos convencidos de que entre más ofertas haya las personas van a poder acceder cada vez a nuevos productos, precios, presentaciones y experiencias, y eso es lo que en conjunto va a hacer crecer la categoría”.
Con Andina, la compañía también hizo inversiones importantes para ser el patrocinador oficial del Club Deportivo Millonarios, de Bogotá. Recientemente apoyaron la llegada de Falcao García al equipo y los planes continúan de cara a los espacios de celebración con los hinchas. Fuera del fútbol profesional también han apoyado a 3.200 equipos ‘de barrio’ en más de 120 torneos a nivel nacional.
Construir desde cero
Desde su llegada en 2014 Central Cervecera inició un plan que Mejía detalla como minucioso para poder hacerle frente a una de las empresas más queridas y antiguas del país. Ese plan incluyó la construcción de una fábrica en Sesquilé, Cundinamarca, desde donde hoy se despacha el 100% de la producción de cervezas y maltas de la compañía.
La fábrica abrió las puertas oficialmente en 2019, con una inversión de 400 millones de dólares. Está diseñada para operar 100% con energías limpias que vienen de un parque solar instalado en el techo de la construcción y de una planta que transforma los gases que se recolectan del proceso productivo. Actualmente cuenta con 400 empleados.
“Para la construcción de nuestro equipo de trabajo, por ejemplo, teníamos claro que debíamos traer a personas que fueran capacitadas por nosotros debido a que por temas de competencia era lo más conveniente. Por eso empezamos a formar a floricultores de la región en este sector”, indica. Esa formación incluyó capacitación en centros educativos de Bogotá y trabajo de campo en Chile con algunos de ellos.
Con ese contexto, incluso su propia llegada a la compañía no fue casual. Mejía cuenta con más de 15 años de experiencia en el sector que incluye pasos por Bavaria, como director de Ventas; la Cervecería Nacional de Panamá, como vicepresidente de Ventas, y Grupo Modelo, en México, como director de Operaciones Comerciales.
En 2023, la compañía alcanzó ventas superiores a los 800.000 millones de pesos, con un ebitda cercano al punto de equilibrio. Sin embargo, la utilidad neta sigue siendo negativa, según explica Mejía, por la depreciación de la planta de producción. Para este 2024 la expectativa es llegar a una utilidad neta positiva y cerrar arriba del billón de pesos en ingresos.
“Desde su diseño, los gases que se generan en la planta de tratamiento de aguas residuales se usan para generar energía para que no tengamos que usar combustibles como diésel. Además contamos con un parque solar que produce el 30% de la energía de la planta, y estas dos iniciativas nos han ayudado a que hoy el 100% de la cerveza se fabrique con energías limpias”, explica.
Todo su portafolio, a excepción de Heineken Cero, se produce en Colombia. Recientemente su producción local de esta cerveza en su versión tradicional fue destacada como la más ‘fresca’ entre los países que la producen a nivel global. A diferencia del resto, esta se fabrica en tanques de fermentación horizontales, lo que le da su característico sabor.
Mejía es optimista porque ve “mucho mercado de dónde crecer”. Hoy el consumo per cápita de cerveza en Colombia se ubica alrededor de 57 litros, ubicándolo en el tercer país con mayor consumo de la región detrás de México y Brasil con 77 y 76 litros respectivamente. “Eso quiere decir que hay mucho terreno por ganar, así que a pesar de lo que pueda pasar a nivel macroeconómico, las oportunidades son tan grandes que vemos el futuro con buenos ojos”.
Lea también: Hay escasez de 12 medicamentos en Colombia, según alertó el Invima