Anif alerta que estas cifras, aunque podrían parecer positivas, “no reflejan una verdadera recuperación del mercado laboral, sino más bien la continuidad de una tendencia preocupante.”
En su más reciente análisis, la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif) expresó su preocupación por las cifras de desempleo en Colombia.
A pesar de que la tasa de desempleo en septiembre de 2024 cayó ligeramente al 9,1%, una reducción de 0,1 puntos porcentuales en comparación con el mismo mes de 2023, Anif señaló que esta disminución oculta una tendencia preocupante en el mercado laboral colombiano.
De acuerdo con Anif, la caída en la tasa de desempleo es atribuida principalmente a una reducción en la tasa de participación laboral, que cayó 0,7 puntos porcentuales, lo que sugiere que menos personas están buscando trabajo activamente. Este descenso en la participación ha compensado parcialmente la baja en la tasa de ocupación, que se redujo 0,6 puntos porcentuales.
Además, la entidad resalta que sectores clave para la economía, como transporte, comunicaciones y actividades financieras, experimentaron una pérdida significativa de empleos, contrarrestando las leves ganancias en áreas como la agricultura y el sector de alojamiento y servicios de comida.
Anif advierte que estas cifras, aunque podrían parecer positivas, “no reflejan una verdadera recuperación del mercado laboral, sino más bien la continuidad de una tendencia preocupante.”
La organización añade que “el mercado laboral no ha sido capaz de crear suficientes empleos para cubrir toda la oferta de trabajo en el país, una situación que refleja la débil dinámica económica actual”.
La situación es especialmente alarmante en el caso de las mujeres, quienes han abandonado la fuerza laboral en mayor proporción que los hombres, intensificando la desigualdad de género en el acceso al empleo. Este fenómeno coincide con una economía debilitada que, según Anif, no ha logrado crear suficientes oportunidades laborales para cubrir la oferta de trabajo del país.
Anif reiteró su llamado a implementar reformas que prioricen la inserción laboral de la población en situación de informalidad, un desafío creciente ante las cifras recientes y el actual debate sobre la reforma laboral en Colombia.