Mientras al finalizar octubre el precio de escasez rondaba los $945 kWh, con la medida el nuevo precio será de $359 kWh para las fuentes hídrica y solar.

El Gobierno impuso un tope tarifario a los precios de la electricidad que se negocian en la bolsa de energía, una medida con la que busca diferenciar los tipos de plantas que se utilizan en su producción.

Hasta ahora, la bolsa de la energía funcionaba con un único precio de escasez (precio tope de venta) para todas las plantas generadoras de energía.

Con esta propuesta, los usuarios tendrán dos precios diferenciados: 

i) Un precio tope mucho más bajo que estará asociado a las plantas que generan energía a través de fuentes renovables y, ii) el precio de escasez tradicional que solo aplicará para las tecnologías más costosas (la térmicas que funcionan con gas, acpm y carbón) y cuyos precios están asociados a precios internacionales. 

Con esta diferenciación se permitirá mantener un precio eficiente en la energía que se produce a costos bajos y competitivos, señala la Resolución 101 066 de la Creg.

Mientras al finalizar octubre el precio de escasez rondaba los $945 kWh, con esta medida el nuevo precio de escasez para las plantas de precios bajos será de $359 kWh, es decir, una reducción del 62%.

En la bolsa se compra alrededor del 20% de la energía del país. Al explicar la medida, el ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, dijo que los precios “eran altamente ineficientes ya que estaban determinados por las plantas menos competitivas, haciendo que la energía hídrica y solar se pagara a precios hasta 10 veces más altos de su costo real de producción”. 

“Esta medida tendrá efecto inmediato en las tarifas de energía los colombianos. Hoy el mercado de la energía es más justo con los usuarios”, agregó el funcionario.