Las acciones de Tesla han caído ahora un 18,8%, o más de 76 dólares por acción, en febrero, disminuyendo casi un 32% desde su máximo histórico de cierre de 479,86 dólares establecido el 17 de diciembre.
Las fuertes pérdidas de las acciones de Tesla a principios de 2025 han recortado decenas de miles de millones de dólares del patrimonio neto del hombre más rico del mundo, el director ejecutivo del fabricante de vehículos eléctricos, Elon Musk, cuyo papel franco en la administración del presidente Donald Trump plantea preguntas sobre lo que puede significar para Tesla.
Datos clave
Las acciones de Tesla cayeron un 6,3% a 328,50 dólares en las operaciones del martes, cerrando a su precio más bajo desde el 15 de noviembre.
La caída del martes estuvo catalizando los avances en conducción autónoma de su rival chino BYD en vehículos eléctricos y una nota escéptica de los analistas de Oppenheimer liderados por Colin Rusch advirtiendo que la “actividad política de Musk corre el riesgo de generar una reacción negativa de los consumidores”.
La nota de Oppenheimer, que hacía referencia a las ventas “preocupantes” de enero en China y Europa, llega un día después de que los analistas de Stifel liderados por Stephen Gengaro advirtieran de manera similar que “la caída negativa en la percepción de los consumidores sobre Elon Musk podría resultar en un ‘viento en contra para las ventas’ para Tesla”, lo que inspiró una pérdida del 3% en las operaciones del lunes para las acciones de Tesla.
Las acciones de Tesla han caído ahora un 18,8%, o más de 76 dólares por acción, en febrero, disminuyendo casi un 32% desde su máximo histórico de cierre de 479,86 dólares establecido el 17 de diciembre.
Nadie se ha visto más afectado en términos brutos por la caída de Tesla que su mayor accionista, Musk, que posee casi el 13% de la compañía y un bono adicional del 9% en acciones pendiente de apelación legal (Forbes descuenta el bono del 9% de Musk en su valoración para reflejar su incertidumbre legal).
Musk tenía un patrimonio neto de 378.800 millones de dólares el martes, según los últimos cálculos de Forbes (una disminución de 42.800 millones de dólares respecto de su patrimonio neto de 421.600 millones de dólares a fines de enero), aunque sigue siendo unos 130.000 millones de dólares más rico que la siguiente persona más rica del planeta, el CEO de Meta, Mark Zuckerberg.
Número grande
12.500 millones de dólares. Esa es la cantidad que se redujo la fortuna de Musk durante la caída de Tesla del martes, cuando el empresario de 53 años registró su patrimonio neto más bajo al final del día desde el 10 de diciembre.
Cita crucial
Los analistas de Oppenheimer escribieron que creen que “la actividad política de Musk tiene seguidores en ciertos círculos, pero que su vida pública corre el riesgo de alienar a consumidores y empleados a medida que la administración Trump pone a prueba los límites de su poder”.
Antecedentes clave
La participación de Musk en Tesla, estimada en más de 150.000 millones de dólares, es la que más contribuye a su patrimonio neto, mientras que sus participaciones en sus empresas privadas multimillonarias SpaceX, X y xAI constituyen la mayor parte del resto de su fortuna. Las acciones de Tesla siguen subiendo alrededor de un 30% desde el día de las elecciones, aunque el repunte inicial ha perdido fuerza debido a que las ganancias del cuarto trimestre de la compañía no alcanzaron las previsiones de consenso de Wall Street y sus ventas de automóviles en Europa y China disminuyeron. Después de donar casi 290 millones de dólares a Trump y otras causas del Partido Republicano antes de las elecciones de 2024, Musk ha desempeñado un papel fundamental en las primeras semanas del segundo mandato de Trump, sobre todo al frente de la agencia DOGE, destinada a reducir significativamente la huella del gobierno federal.

Tangente
Musk presentó el lunes una oferta de 97.400 millones de dólares para comprar la división sin fines de lucro de OpenAI, un competidor de su startup de inteligencia artificial generativa, liderada por su rival Sam Altman. La oferta de Musk es “una distracción de los desafíos de TSLA”, escribió Rusch. Musk y Altman cofundaron OpenAI en 2015 antes de una complicada separación por la misión de la empresa.
Este artículo fue publicado originalmente en Forbes US
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