El organismo estimó que el riesgo de recesión para la economía estadounidense ha pasado del 25 % proyectado el pasado octubre al 40 % debido a la guerra arancelaria.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha rebajado medio punto su proyección de crecimiento para América Latina y el Caribe para 2025, del 2,5 % que estimaba en enero pasado al 2 %, según su último informe de perspectivas económicas globales (WEO, por sus siglas en inglés) publicado este martes.

La región afronta un entorno global adverso, caracterizado por una alta incertidumbre en política comercial, fragmentación geopolítica y endurecimiento de las condiciones financieras. En consecuencia, el crecimiento del PIB regional bajará al 2 % este año, aunque se recuperará en 2026 con un avance del 2,4 %, la misma tasa que el año pasado.

El FMI prevé una fuerte desaceleración de la inflación desde una media del 16,6 % en 2024 al 7,2 % en 2025 y el 4,8 % en 2026, en parte gracias a los ajustes en Argentina y Venezuela. Esta tendencia refleja una estabilización de precios en las economías más grandes de la región.

La región presenta una alta heterogeneidad. Sudamérica es la subregión con mayor inflación, afectada sobre todo por Argentina y Venezuela, mientras que Centroamérica mantiene un crecimiento más estable, cercano al 4 %, con inflación contenida y déficits externos manejables.

En el caso de Colombia, el organismo multilateral revisó a la baja su proyección crecimiento de 3% a 2,4% , en un entorno en el que las tensiones comerciales mundiales podrían afectar las perspectivas económicas del país por la caída del precio de las materias primas y la volatilidad financiera de los mercados.

El Caribe registrará altas tasas de crecimiento debido a la recuperación del turismo, aunque sus economías siguen siendo vulnerables a shocks externos.

América Latina sigue lidiando con problemas estructurales como la alta desigualdad, su rigidez fiscal, baja productividad y dependencia de materias primas.

Además, la coyuntura actual y el creciente proteccionismo comercial en todo el mundo agravan estos desafíos. 

Por otra parte, el organismo estimó este martes que el riesgo de recesión para la economía estadounidense ha pasado del 25 % proyectado el pasado octubre al 40 % actual debido a la guerra arancelaria lanzada por el mandatario Donald Trump.

“No vemos una recesión en nuestra previsión, pero la probabilidad de una recesión ha aumentado del 25 % en octubre a cerca del 40 %”, dijo el economista jefe de la organización, Pierre-Olivier Gourinchas, en la presentación del Informe.

Este reporte es el primero que incorpora el potencial impacto de los aranceles aplicados por Trump a sus socios comerciales y en su presentación se dejó claro que todos los países se han visto negativamente afectados.

En concreto, el FMI recortó en medio punto la previsión del crecimiento económico global para este año, hasta el 2,8 %, debido al efecto contagio que tiene para todas las economías.

La rebaja para China es de seis décimas, hasta el 4 %, y para México, otra de las más afectadas, se pronostica una entrada en recesión con una contracción del PIB del 0,3 %, frente a la expansión del 1,4 % que se anticipaba hace tres meses.

“Las perspectivas de crecimiento podrían mejorar inmediatamente si los países flexibilizan su actual postura en materia comercial y promueven un nuevo entorno comercial claro y estable. La economía mundial necesita un entorno comercial claro, estable y predecible”, concluyó el economista.

Con información de EFE