Club Colombia sorprendió a cinco de los cocineros más influyentes del país con platos hecho por chefs muy especiales en un emotivo homenaje al sabor de casa y al legado familiar, conmoviendo corazones este Día de la Madre.
Hay un sabor que todos llevamos en el corazón. Uno que no se olvida, que se activa con una cucharada, con el aroma de una receta familiar o con el primer bocado de un plato hecho con amor. Es el inescrutable sabor de casa. Y este Día de la Madre, Club Colombia decidió rendirle homenaje.
La marca, reconocida por elevar la cultura cervecera del país, reunió a algunos de los cocineros más influyentes de Colombia, los Kitchen Brothers (Pablo y Sergio Mejía), Yvette y Denisse Hakim de Hakim’s Pastry, y Marcela Arango de Taquería Pantera, con una propuesta inesperada. Fueron citados para probar los platos de un supuesto nuevo restaurante. Lo que no sabían era que, detrás de cada receta servida, estaban las verdaderas maestras de su cocina, sus madres.
El resultado es un emotivo cortometraje que no solo muestra sabores y recetas, sino historias reales de excelencia que comenzaron con una mamá que cocinó con amor. Porque detrás de cada chef, pastelera o líder gastronómico, hay una mujer que sembró el gusto, el detalle y el cariño que transforman un plato en un recuerdo imborrable.
La pieza audiovisual, distribuida en redes sociales, pone en primer plano lo verdaderamente importante: los orígenes. Y es ahí donde Club Colombia ha sabido conectar porque, desde hace más de 75 años, ha sido esa cerveza que acompaña los sabores que llegan al corazón. La que se sirve en la mesa donde las historias familiares se repiten y se reinventan, entre risas, consejos y brindis sinceros.

Los primeros comentarios cuando recibieron los platos incluían, ‘se ve triste’, ‘no quiero herir susceptibilidades’ o ‘acá se les fueron unos granos de arroz’. La mamá de las hermanas Hakim dice que eligió ese plato porque les gusta desde que eran niñas. “Siento que estoy recogiendo lo que cultivé”, dijo. La mamá de los Kitchen Brothers cuenta que su receta es la que siempre pedían cuando cumplían años, “a partir de la comida se transmiten los valores, se transmite la unión familiar”. La mamá de Marcela Arango explica que el pollo de su receta lo aprendió hace poco, y que a su hija le fascina.
Pocos bocados después sus comentarios cambiaron, “esto sabe a casa, a mi abuela, esta receta es nuestra, esto tiene un sello familiar, calor de hogar”, mostrando que lo que recuerda el paladar puede más todo.
La reacción de los chefs es mejor verlo que describirlo, por eso la invitación es a disfrutar el video con sus seres queridos, entendiendo que la cocina siempre une a la familia.
Con una producción cuidada y una narrativa honesta, la campaña logra ir más allá del homenaje. Es un reconocimiento al legado silencioso de tantas madres que, sin buscar protagonismo, enseñaron que la excelencia no es una meta lejana, sino una forma de hacer las cosas con amor desde lo cotidiano.
En tiempos donde las marcas compiten por atención, Club Colombia se detiene a recordar lo esencial. A contar historias que se sienten. A celebrar los vínculos que construyen país desde la cocina.
Y lo hace con la autenticidad de quien entiende que una gran cerveza no solo acompaña platos, sino momentos. Aquellos que saben mejor cuando tienen sabor a casa.