En un entorno de acuerdos ralentizado, la firma pionera de adquisiciones medianas GTCR logró la mayor salida de capital privado del año con la venta de Worldpay por US$24.250 millones

Aunque muchos gestores de capital privado esperaban una bonanza de acuerdos bajo la administración de Donald Trump, GTCR ha desafiado la tendencia con una serie de salidas exitosas.

La firma con sede en Chicago administra activos por US$45.000 millones, una cifra menor frente a gigantes de Wall Street como Blackstone, Apollo o KKR. Sin embargo, ninguno logró una operación comparable a la venta de Worldpay, propiedad de GTCR y FIS, a Global Payments por US$24.250 millones, anunciada en abril y que se espera se cierre en el primer semestre de 2026. GTCR había adquirido el 55% de la firma procesadora de pagos, con sede en Cincinnati, por una valoración de US$18.500 millones en julio de 2023, y la revendió en menos de dos años duplicando su inversión, según reportes. Esto ocurrió en un momento en que el período promedio de tenencia en la industria del capital privado superó los seis años en 2023 y 2024, señal de que muchas firmas están teniendo dificultades para encontrar compradores.

La venta de Worldpay siguió a la desinversión de GTCR en el bróker de seguros AssuredPartners, vendido en diciembre pasado a Arthur J. Gallagher & Co. por US$13.450 millones. GTCR creó esa compañía en 2011 junto con su equipo fundador, vendió una participación mayoritaria a Apax Partners en 2015 y la recompró en 2019 por una valoración de US$5.100 millones. Tras el acuerdo de Worldpay, GTCR anunció otras dos ventas en mayo: la firma de equipos de laboratorio Antylia Scientific y la empresa de software para seguros Itel, ambas por más de US$1.000 millones.

“Los flujos de acuerdos han disminuido, en parte por cierta parálisis asociada a cambios de política, pero de ninguna manera diría que nuestra orientación es hacer una pausa”, dijo Collin Roche, codirector ejecutivo de GTCR. “Vamos a vivir con la incertidumbre. No va a haber un día en el que tengamos todas las respuestas”.

La oleada de actividad sugiere que GTCR espera devolver más de US$5.000 millones a sus inversionistas este año, reforzando el buen desempeño de sus fondos bandera. Documentos de fondos de pensiones muestran que su Fondo XII ha generado una tasa interna de retorno neta del 21% desde 2017 hasta fines de 2024, mientras que el retorno anual promedio de su Fondo XIII es del 18% desde 2020. El retorno anualizado a cinco años del índice de capital privado de EE. UU. de Cambridge Associates es del 16%, y el de 10 años, del 15%.

GTCR fue fundada en 1980 por Stanley Golder, Carl Thoma, Bryan Cressey y Bruce Rauner, en los primeros días del capital privado. Thoma y Cressey se separaron en 1998 para crear lo que hoy es Thoma Bravo, que gestiona US$184.000 millones. Golder se retiró como socio en 1993 y falleció en 2000, mientras que Rauner dejó la firma en 2012 y luego fue gobernador republicano de Illinois.

Roche y Dean Mihas son la segunda generación de líderes: Roche se unió en 1996 liderando inversiones en servicios financieros, y Mihas en 2001 al frente del grupo de salud. Según la SEC, ningún socio posee más del 25% de la firma, y Blackstone adquirió una participación minoritaria en 2021 por una valoración no revelada.

Roche ha participado en adquisiciones en el sector fintech durante casi toda su carrera, incluyendo la compra de Transaction Network Services por US$285 millones en 2001. Así, cuando surgió la oportunidad de adquirir Worldpay en 2023, estaba bien preparado. FIS había comprado Worldpay en 2019 por US$43.000 millones, pero la empresa se estancó frente a competidores como Stripe y Adyen.

“Tuvieron caídas en el segmento de pequeños comercios, pero crecían bien en otras áreas”, explicó Roche. “Worldpay tenía potencial de ganar. Solo había perdido algo de su espíritu competitivo”.

Para reactivar la empresa, GTCR trajo de regreso a Charles Drucker, ex CEO de Worldpay, quien se había retirado tras la venta de 2019, y se asoció con él para adquirir la participación mayoritaria. El crecimiento se aceleró rápidamente y GTCR actuó como intermediario cuando comenzaron las conversaciones entre Global Payments y FIS.

El acuerdo final fue un intercambio complejo: Global Payments adquirió Worldpay por US$24.250 millones y vendió su negocio de soluciones para emisores a FIS por US$13.500 millones. Esto permitió a Global Payments enfocarse más en servicios para comercios, mientras que FIS pudo centrarse en instituciones financieras.

Para facilitar el acuerdo, GTCR aceptó recibir el 41% de sus ingresos en acciones de Global Payments, algo inusual en firmas de capital privado. Cuando se cierre el trato, GTCR será propietaria del 15% de la empresa cotizada, con restricciones para vender durante 12 a 18 meses. Al anunciarse la operación el 17 de abril, las acciones de Global Payments cayeron 17%, aunque han recuperado gran parte de esa pérdida.

Ahora GTCR enfoca su atención en nuevas compras. Cerró en 2023 su fondo bandera más reciente por US$11.500 millones, y este año recaudó US$3.600 millones para un fondo de crecimiento estratégico enfocado en adquisiciones más pequeñas, con inversiones entre US$50 millones y US$250 millones. Según una fuente cercana, GTCR tiene más de US$10.000 millones disponibles para invertir. En noviembre pasado, destinó US$1.330 millones a Tricentis, empresa de pruebas de calidad de software con sede en Austin, Texas.

“Momentos como este históricamente han sido buenos para invertir: períodos de incertidumbre donde bajan las expectativas de precio y es más difícil acceder a financiamiento”, concluyó Roche. “En tiempos como estos, estamos más inclinados a ser compradores. Y simplemente este año también se nos han dado muchas buenas salidas”.

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