El calor extremo ha sido el causante en las últimas jornadas de casi una decena de muertos entre España, Francia e Italia.
La intensa ola de calor que ha mantenido estos días sofocada a Europa ha bajado su intensidad este jueves en algunos lugares de Francia aunque siguen las altas temperaturas en el continente y países como Hungría han activado la alerta naranja.
El calor extremo ha sido el causante en las últimas jornadas de casi una decena de muertos entre España, Francia e Italia.
En Francia, las temperaturas han descendido hoy notablemente en la mitad noroeste del país, lo que abarca al área de París, si bien aún permanecen en alerta naranja -la segunda más grave- este jueves y viernes el sureste, según informó Météo France.
Se trata de 17 de los 101 departamentos del país, con temperaturas máximas que deben alcanzar entre 32 y 38 grados en ciudades como Montpellier, Perpiñán y Marsella.
El mercurio ha descendido significativamente, incluso por debajo de los 20 grados, en la mitad noroeste del país, que incluye la región de París -la más poblada de Francia-, después de haber tocado los 40 el martes pasado.
La reciente ola de calor ha dejado al menos dos muertos en ese país, 300 personas atendidas por las urgencias y 6.000 hogares sin luz debido a las altas temperaturas. El último mes de junio ha sido además el segundo más caluroso en Francia desde 2003.
Alerta en Hungría
En cambio, En Hungría, el servicio de meteorología nacional, HungaroMet, ha activado para este jueves y viernes la alerta naranja por el calor, que podría llegar hasta los 39 grados en muchas regiones del país.
Durante estas jornadas se podrían batir los récords diarios en ese país, principalmente en la capital, Budapest, así como en el sur.
Para aliviar la situación, las compañías de transporte público urbano reparten agua a los pasajeros en las paradas con más tráfico.
En Italia, las autoridades emitieron una alerta roja en 18 ciudades para advertir de que las temperaturas suponen un peligro incluso para los jóvenes o personas sanas, mientras que en Alemania se esperan valores próximos a los 40 grados y la sequía ha obligado a imponer en muchos lugares del país restricciones de agua.
En España doce comunidades siguen hoy con aviso por fuertes tormentas y lluvias o por sofocante calor, sobre todo en Andalucía, ambas Castillas, Extremadura y la Comunidad de Madrid, donde hay alerta naranja por máximas entre 39 y 42 grados, según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
El portavoz de la Aemet, Rubén Del Campo, ha adelantado que hoy podría ser el último día en el que se cumplen los criterios de “duración, extensión e intensidad para considerar de forma estricta una ola de calor”.
Cara a los próximos días, el norte peninsular experimentará un alivio térmico, con un ambiente más fresco en el Cantábrico y temperaturas más suaves en el resto de la mitad norte, según esto.
Sin embargo, en el resto del país, Del Campo ha apuntado que “aunque no se repitan los picos extremos de jornadas anteriores”, los termómetros seguirán superando los 36 a 38 grados, e incluso, puntualmente, los 40 grados en zonas del sur e interior.
Bomberos europeos para evitar incendios
Además, las condiciones meteorológicas de estos días aumentan el riesgo de incendios forestales, que ya han afectado a varios países esta pasada semana, incluida España.
Por ello, cerca de 650 bomberos de 14 países europeos han sido desplegados a zonas de alto riesgo en España, Francia, Grecia y Portugal a fin de apoyar a los cuerpos de bomberos nacionales durante los meses de julio y agosto.
Algunos de estos equipos, coordinados por el Mecanismo de Protección Civil de la UE, ya han comenzado a trabajar sobre el terreno en Halkidiki (Grecia), donde un incendio forestal se desató el pasado miércoles, y en otro incendio cerca de Perpiñán (Francia).
El incendio declarado el miércoles en la isla griega de Creta ha obligado a evacuar a más de 5.000 personas mientras cientos de bomberos siguen luchando contra las llamas que se reavivan constantemente atizados por los fuertes vientos.
En Turquía, los fuertes vientos, de hasta 85 kilómetros por hora, también están avivando el fuego declarado el miércoles por la noche en el distrito costero de Çeşme, en Esmirna, que ya se ha cobrado una víctima.
Con información de EFE