Estas dos habilidades hacen de un profesional alguien capaz de lograr lo que se proponga. ¿Cuál es más importante?
Tanto vender como construir son dos categorías tremendamente amplias. Para empezar, en cada industria, hay una definición del constructor. No obstante, hoy en día las industrias con mayor proyección tienen que ver necesariamente con implementaciones tecnológicas en alguna medida.
Es por esto que el constructor moderno es el programador, es el ingeniero de software, el ingeniero de hardware. En general estos perfiles están construyendo el producto. Lo cual es difícil y es multivariante. Puede incluir diseño, desarrollo, fabricación, logística, compras, incluso puede estar diseñando y operando un servicio. Tiene muchas, muchas definiciones.
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En el otro lado están las ventas. Nuevamente, vender tiene una definición muy amplia. Vender no solo significa necesariamente vender clientes individuales, sino que también puede significar marketing, comunicarse, reclutar, recaudar dinero, inspirar a la gente, hacer relaciones públicas. Es una categoría general amplia.
Dicho esto, para todas aquellas personas que se han preguntado constantemente, ¿Qué debería estudiar en la Universidad?, ¿Cómo optimizar mis probabilidades de alcanzar el éxito financiero?, ¿Cuál es aquel camino en donde las probabilidades de conseguir la mayor cantidad de dinero creando impacto a gran escala se encuentran? La respuesta la van a encontrar en dos habilidades extremadamente puntuales: Aprender a programar y a venderse a ustedes mismos.
Hago énfasis en la venta propia puesto que parto de una premisa básica: “todo será tan grande como nosotros mismos lo seamos” – en este caso empezar suena difícil porque en la mayoría de los casos el ser un genio o increíble en algo es particularmente escaso y definitivamente no es la media.
Sin embargo no todo está perdido, y existe una forma de contar con estas personas increíbles que sí lo son: vendiéndoles una visión, invitándolos a ser parte de algo grande. Es acá donde la venta personal es clave, porque lo más importante que podrán hacer en su vida es rodearse de personas infinitamente mejores que ustedes en lo que hacen y convencerlas de perseguir su visión juntos.
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Ahora bien, es muy común encontrar equipos integrales de emprendedores, en donde existe una cara técnica y otra de “negocios”. Esto es un cliché que está cambiando cada vez más, pues si se fijan cada vez los negocios realmente exitosos cuentan con emprendedores que poseen las dos características, construyen y venden. Esto es en definitiva una ventaja abrumadora.
Lo último es cuando un individuo puede hacer ambas cosas. Ahí es cuando obtenemos verdaderos superpoderes. Es entonces cuando tenemos personas que pueden crear industrias enteras. El ejemplo vivo es Elon Musk. Puede que no esté necesariamente construyendo los cohetes ni los autos eléctricos él mismo, pero entiende lo suficiente como para hacer contribuciones técnicas. Él entiende la tecnología perfectamente, y no corre por ahí haciendo afirmaciones de que no cree que eventualmente no pueda cumplir. Puede ser optimista sobre los plazos, pero cree que esto es razonable para la entrega.
Incluso Steve Jobs desarrolló suficientes habilidades técnicas y estuvo lo suficientemente involucrado en el producto que también operaba en ambos dominios. Larry Ellison comenzó como programador y escribió la primera versión de Oracle, así como Mark Zuckerberg lo hizo con Facebook. Y la lista sigue, en Latinoamérica emprendedores seriales cómo Miguel McAllister, fundador de Domicilios.com, MUY y Merqueo está bajo esa misma línea.
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Definitivamente poseer estas dos habilidades es tal vez la mayor optimización probabilística a la que le podríamos apostar, no obstante hay un orden para hacerlo en mi opinión. En general preferiría enseñarle a un ingeniero a vender que a un vendedor a programar. El construir es algo con lo que un vendedor va a tener muchos problemas más adelante en la vida, (en la mayoría de los casos). Requiere demasiado tiempo enfocado. Pero un constructor puede continuar vendiendo un poco más tarde, especialmente si ya están conectados de forma innata para ser un buen comunicador.
En conclusión, creo que si se comienza con una mentalidad de construcción temprano en la vida aprendiendo a programar, siempre habrá tiempo para aprender a vender, y si se poseen algunas características naturales o se es bueno vendiendo, entonces se podrá duplicar los chances de alcanzar el éxito, cosa que no siempre funciona empezando al revés.
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*El autor es cofundador de Fitpal,la plataforma que permite acceder a una oferta de más de 90.000 servicios deportivos (clases y gimnasios) en un solo lugar y por un costo fijo mensual.
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