Con la puesta en marcha de pilotos, comenzó en firme la carrera por la red más codiciada en el mundo. Se pudo establecer que la licitación está programada para el cuarto trimestre de 2021.

Es posible que, antes que termine el mandato del Gobierno Nacional, en 2022, Colombia vea poner en funcionamiento oficialmente su primera red 5G.

Aunque los pronósticos de GSMA Intelligence indican que realmente sucedería en 2024, en el último año han sucedido varios acontecimientos que aceleran la carrera en la que todas las compañías de telecomunicaciones quieren llegar primero.

La aprobación de la ley de modernización del sector TIC permitió un repunte de la inversión en el sector -que no había hecho mas que decrecer desde 2013- con la asignación de bloques en las bandas de 700 MHz y 2500 MHZ, cuyo despliegue ya empezó.

El paso más firme de todos se dio a mediados de este año, cuando el Ministerio de las TIC otorgó cinco permisos para el uso del espectro radioeléctrico para pruebas técnicas de 5G a Claro, Telefónica, ETB, Xiro Investment Group e Itics. Con estos pilotos, podrán validar e identificar las oportunidades de negocio y emprendimiento con el despliegue de esta tecnología.

“Estamos a dos años; nos entregaron espectro para pruebas no comerciales por seis meses, que son extendibles a seis meses más, con esas pruebas entregamos datos al Ministerio, luego vendría el proceso de licitación de espectro y un despliegue técnico, una ruta factible para que tengamos las primeras conexiones de 5G en 2022”, comenta José Luis Gómez, director de innovación de Claro Colombia.

Telefónica y Huawei mostraron el primer piloto, una cámara térmica que mide la temperatura de las personas que entran a la sede de la Secretaría de Salud de Bogota, a lo que la Agencia Nacional del Espectro determinó que los niveles de campos electromagnéticos en la zona son “extremadamente bajos”. Claro está trabajando en tres casos de uso; dispositivos móviles, conexiones inalámbricas sin necesidad de cables y una red privada para proyectos industriales.

Forbes pudo establecer que la licitación de espectro para 5G en Colombia está programada para el cuarto trimestre de 2021.

Los ensayos técnicos, por seis meses prorrogables, se están desarrollando en 36 puntos de Bogotá, Medellín, Cali, Barrancabermeja y Tolú, que además de cámaras térmicas, están probando la creación de redes privadas, aplicaciones de internet de las cosas (IoT, por sus siglas en inglés), monitoreo médico remoto y transmisión de televisión TDT. En IoT, se incluyen sensores de medio ambiente, movilidad, energía y seguridad pública, según explicó el Gobierno.

Siga toda la información de tecnología en nuestra sección especializada

Catalina Irurita, vicepresidente de mercadeo y comunicaciones de Ericsson para el norte de Latinoamérica, explica que inicialmente, el despliegue se instala en zonas de alta concentración o que tengan el requerimiento, como las áreas industriales. “Audi tiene una fábrica conectada a 5G que incluye a robots en el área de manufactura. Seguramente en adelante van a necesitar que sus demás fábricas también tengan esa conexión. Ahí va un aspecto de competitividad para los países”.

Tanto Irurita como Gómez, coinciden que, en el futuro inmediato, los fanáticos de los videojuegos estarán entre los mayores beneficiados. “Imagina un juego con un jugador en Japón con 5G en Japón y otro en Colombia, el de Colombia pierde”, comenta Irurita. En educación, todo está por crearse. “Un niño que estudia desde casa podrá ponerse unas gafas con realidad virtual y visitar Roma en una clase de historia”, agrega.

En los negocios, las industrias tendrán miles de oportunidades para encontrar eficiencias y optimizar sus procesos. Es la puerta de entrada a la tecnología de las cosas conectadas, por eso tanta expectativa en las posibilidades en telemedicina (como las cirugías a distancia) hasta la movilidad, con carros autónomos, en el más futurista de los casos.

5G reduce significativamente la latencia, que es el tiempo que tarda en transmitirse una conexión, con velocidades hasta 1.000 veces más rápidas que 5G.

“Es necesario indicar que los principales beneficiados de esta tecnología serán las industrias y los hospitales; debido a la precisión de esta tecnología”, refiere Blanca Zhou, secretaria general en Huawei Colombia. “Esto permitirá llevar a cabo diferentes operaciones que deban garantizar un éxito y eficacia superior al 99%; considerando el margen de disponibilidad de este tipo de redes es del 99.999%”. En el informe de conectividad a nivel global (GCI) de Huawei, Colombia cierra la fila de los países adoptantes de tecnología, ubicándose en el puesto 55 de 79 países en total, por encima de Chile, Uruguay, Brasil y Argentina.

A su vez, Zhou, indica que se espera que 5G permita hasta 1 millón de dispositivos funcionando a plena capacidad en 1 kilómetro cuadrado. Esto significa que, en conciertos y partidos de fútbol, no se volverá a ir la señal en los celulares.

Huawei, que es el mayor vendedor de equipos de telecomunicaciones en el mundo, enfrenta una fuerte escalada por parte de Estados Unidos, país que ha expresado por mucho tiempo una preocupación de que las redes móviles que dependen de Huawei le puedan abrir la puerta al espionaje y el sabotaje por parte de China, al tiempo que insta a sus aliados a bloquear los equipos de la compañía.

En estos momentos el ojo del huracán está en Europa, donde Reino Unido prohibió recientemente la compra de componentes para 5G y ordenó el retiro de todos los equipos existentes de la compañía de la red para 2027. Alemania tendrá que tomar una decisión al respecto pronto y China evalúa tomar represalias contra los fabricantes europeos Nokia y Ericsson si la Unión Europea intensifica el veto a Huawei.

Esa escalada arribará pronto a América Latina. Cuando Telefónica presentó en Colombia su piloto de 5G con equipos de Huawei junto a la ministra de las TIC Karen Abudinén, la Embajada de Estados Unidos en Bogotá envió mensajes al Gobierno colombiano diciendo que el proceso de construcción de redes 5G no deberían ceder el control de su infraestructura a gigantes tecnológicos chinos como Huawei y ZTE porque esto “podría permitirle al Partido Comunista Chino acceso a información privada”.

Zhou dice al respecto que Huawei es una empresa privada, propiedad de sus empleados en su totalidad que ha encontrado en la investigación y el desarrollo “su fuente fundamental para construir y colaborar” en sociedades que desean prosperar. “Nuestro lenguaje no se concentra en un escenario de índole político de ninguna clase, sino en el progreso, la conectividad y la innovación”.

La GSMA que representa a los operadores móviles, dice que para 2025, la mitad de todos los usuarios móviles de Estados Unidos y en las partes mas prósperas de Asia, tendrán 5G, en comparación con un tercio de los europeos y una séptima parte de los latinoamericanos.

Esa misma organización, dice en su reporte The Mobile Economy, que para 2034, se espera que 5G contribuya con US$2.2 billones a la economía global a medida que los países e industrias se beneficien cada vez más de las mejoras en productividad y eficiencia propiciadas por la nueva tecnología.

En el caso de Colombia, Raúl Katz y Sebastián Cabello, de Telecom Advisory Services, estiman que la inversión en el despliegue de infraestructura de tecnología avanzadas podría causar un crecimiento acumulado de la economía entre 4,3% y 5,4% en un horizonte de tiempo de entre 10 y 12 años a partir del momento de su implementación.

Esto requiere esfuerzos de todas las partes. La Comisión de Regulación de Comunicaciones hizo una revisión del marco regulatorio y de los proyectos en curso, en la que no encontró barreras regulatorias para el despliegue y expansión de las redes móviles avanzadas en el país.

En su Mobility Report, en el que estima que en 2025 habrá 90 millones de suscripciones de 5G en Latinoamérica, Ericsson perfila a Colombia, junto a México, Brasil, Argentina y Chile, como los pioneros que anticipan a esta tecnología en la región. Este año, Brasil y Uruguay han lanzado los primeros servicios comerciales. 

En el mercado existen antenas a las que solo les tienen que hacer un cambio de programa informático para hacer la transición de 4G a 5G, por lo que la inversión podría ser accesible en el mediano plazo.

Se requerirán SIM específicas y dispositivos capaces de recibir la conexión (Apple todavía no ha lanzado aún su primer celular que funcione con 5G), aunque hay equipos que por medio de un modem podrían recibir la señal. Lo que sigue después de ahí es, poder descargar algo que antes se demoraba una hora, en un milisegundo.