La tecnología como causa y consecuencia de crecer

Entender la tecnología como concepto implica ir mucho más allá de asociarla a productos con un gran desarrollo o ciencia como un teléfono inteligente o una computadora. Pero sin lugar a duda, este concepto ha sido un factor inherente en los grandes cambios que ha tenido el mundo como lo hemos conocido.

Es muy probable que al escuchar esta palabra lo primero que imaginemos sea una aplicación móvil que a un par de clics nos permite recibir una pizza en la puerta de la casa, o un asistente de voz capaz de abrir las cortinas o prender la chimenea, o incluso, un automóvil capaz de conducirse solo.

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Lo interesante es que, la tecnología como un gran concepto ha estado presente desde tiempos inmemorables. La imprenta, la rueda o diferentes herramientas utilizadas en la caza, han sido solo algunos ejemplos. Por eso es probable que la tecnología no haya cambiado, simplemente se ha ido ampliado y han entrado a jugar otros conceptos como la innovación.  A partir de esto, podemos definir la tecnología como el uso del conocimiento humano en una aplicación práctica, así lo expresó Pedró Suaréz en el podcast Hub Digital y por supuesto afirmar que nuestra cotidianidad gira en torno a ella.

Podríamos afirmar que la nombrada reinvención fue la consecuencia de una coyuntura global inesperada, pero la realidad es que fue precisamente la tecnología la causa y también la consecuencia de una transformación inminente y necesaria en busca de cambio, procesos eficientes y crecimiento a nivel corporativo de muchas industrias en todo el mundo. 

Y es aquí donde surge el termino de transformación digital, que podríamos definir como el uso de tecnología como el gran habilitador para todos los procesos que buscan el crecimiento eficiente de una organización, con el componente de innovación.

Ahora más que nunca la tecnología ha sido un gran punto de inflexión en este momento de reinvención, por eso compartimos cuatro claves a tener en cuenta en este proceso de crecimiento organizacional, especialmente si su compañía es una Pyme.

1. La experiencia de usuario como prioridad

Solo cuando notamos la ausencia de tecnología a partir del mal funcionamiento o escasez de algún tipo de proceso, es cuando nos demos cuenta que tal vez exista alguna manera de mejora a partir de ella. En otras palabras, imaginen todas las veces que en algún momento tuvieron que hacer fila para comprar un café, pagar en el supermercado, o retirar dinero en un banco.

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De pronto hace algunos años, la manera de resolver esta ausencia parcial de tecnología era la apertura de más cajas registradoras, de manera que garantizaran la oportunidad de recibir más personas en el mismo periodo de tiempo, pero ahora, es probable que una aplicación sea una buena alternativa que me permita lograr un proceso más eficiente en términos de costos y tiempo.

Como usuarios de cualquier producto o servicio buscamos la inmediatez y somos cada vez más exigentes en términos de información veraz, procesos ágiles y una experiencia inigualable, por eso usar la tecnología a favor de nuestro cliente, debería ser siempre una prioridad.

2. La transformación digital no es solamente digitalización

Cuando hablamos de transformación digital no es necesario evocar términos demasiado complejos como ERP (Enterprise Resourse Planning) o CRM (Customer Relationship Management). Sin embargo, tampoco debemos caer en la trampa de que el único paso hacia una transformación digital se limita a la creación de aplicaciones, al marketing digital o a la creación de una ostentosa pagina web. La tecnología y todo lo que acoge un proceso de transformación en términos digitales requiere de estrategia, conocimiento de nuestro usuario y una cultura interna corporativa, entre otras cosas.

3. La tecnología hace parte de un equilibrio corporativo

Procesos de automatización como los chatbots o robots que permiten generar conversaciones en línea mediante inteligencia artificial han apalancado los procesos operativos en términos de interacción y relacionamiento humano, a cambio de permitirle a los humanos dedicarle mayor tiempo y esfuerzo a aquello que sabe hacer muy bien como el pensamiento creativo, la comunicación asertiva o la resolución de problemas.

Estas automatizaciones que funcionan bajo una lógica de procesos simulando la interacción humana, resultan muy útiles cuando las interacciones responden a preguntas frecuentes de manera inmediata, se quieren recolectar o analizar datos y se pueden atender una gran cantidad de solicitudes, pero no reemplazan, al menos no por ahora, la interacción humana.

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La tecnología entonces debe actuar como un gran habilitador, mas no como un detractor o barrera para mis usuarios o el equipo al interior de mi compañía. La tecnología es parte de todo un proceso y que actúa como una gran herramienta en términos de eficiencia y eficacia, pero no debería ser la única. 

4. Medir es la clave

Todo aquello que se pueda medir, se podrá mejorar. Cada una de las nuevas estrategias, implementación de herramientas o desarrollo de nuevos procesos, debe tener indicadores de gestión que permitan analizar su efectividad en cierto periodo de tiempo y que garanticen de cierta manera el logro de uno o varios objetivos. 

Es necesario diversificar los procesos, hacer pruebas cuando los recursos lo permitan que me permitan encontrar las estrategias mas ganadoras y por supuesto rentables. Cada vez que se haga uso de tecnología debería tener como objetivo la reducción de costos o tiempos, y la mejora de procesos del equipo de trabajo y de los clientes.

Y por último, es importante resaltar que cada industria y cada compañía es única, por eso es tan importante hacer de la tecnología un conjunto de herramientas fácil y asequible acceso para todos y que no aplican solamente para las grandes compañías.

Por esta razón, Cisco Latinoamérica tiene a disposición Hub Digital, su más reciente show de podcast con el que buscan brindar información y muchas herramientas valiosas a partir de conversaciones con expertos, empresarios y muchas personas alrededor de esta temática, mostrando la tecnología como un gran habilitador en las pequeñas y medianas empresas que buscan crecer, cambiar o mejorar. 

Contacto:
LinkedIn: Magdala Mora Fuentes*
*La autora es directora de relacionamiento en Empréndete, un podcast que cuenta historias que educan en emprendimiento y negocios en español. Empréndete trabaja con empresas, universidades y organizaciones que quieran compartir conocimiento, crear audiencias y agregar valor.

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes Colombia.