¿Su empresa es de las que cree que el home office es una recompensa? Aunque todos se mudaran al trabajo remoto existen modelos y formas diferentes de hacerlo.
El Covid-19 nos ha mostrado que el trabajo remoto llegó para quedarse, todos trasnochamos más y madrugamos el doble producto de la sencilla razón que podemos evitar perder el tiempo en transporte público, tráfico, o simplemente desplazándonos desde nuestros lugares productivos a nuestro hogar.
No obstante, si pensabas que todos los equipos remotos fueron creados iguales, es momento de pensarlo de nuevo. ¿Su empresa es remote-first o remote-friendly?
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Hay una diferencia significativa y no todas las empresas con equipos remotos o descentralizados son iguales. La pandemia obligó a la mayoría de las empresas a pedir a todos sus empleados que trabajaran desde casa. No obstante, ahora, a medida que se alivian las restricciones en varios países, una pequeña parte de la fuerza laboral está regresando a sus oficinas.
Es interesante notar que una encuesta de Gartner a 317 directores financieros y líderes financieros reveló que el 60 % tiene la intención de trasladar al menos el 10 % de su fuerza laboral previamente en el sitio a posiciones permanentemente remotas después de Covid-19. Esto quiere decir algo muy importante: Remote llegó para quedarse. Y es necesario asegurarnos de implementarlo bien, pues su tendencia va a seguir a la alta.
Para empezar me gustaría empezar por desmitificar una concepción errónea que he venido oyendo desde hace un tiempo atrás: Muchos afirman que el ser remoto dificulta la colaboración. En mi experiencia, todo lo opuesto. De hecho, las oficinas dificultan el trabajo individual. La colaboración tiende a ocurrir en ráfagas cortas, seguidas de períodos más largos de escritura, diseño, codificación y pensamiento individual. Cosa que muchas veces no es posible en un ambiente social con altos grados de distracción.
Es más importante darles a los empleados un momento de tranquilidad que apiñarlos en una oficina abierta. De hecho herramientas como slack permiten que estos momentos de colaboración no solo ocurran sino que queden registrados 100 % del tiempo con una capacidad de búsqueda inmediata en caso de necesitar algún tipo de reafirmación sin tener que molestar a otros.
La siguiente pregunta lógica es: ¿es usted una empresa que quiere ser remote-first o remote-friendly?, esto pues los resultados van a tener consecuencias gigantes en términos de productividad entre una elección y la otra.
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Piense en sus objetivos para la empresa y en lo cómodo que se siente al distribuir la responsabilidad entre los miembros de su equipo: Si su prioridad es formar un buen equipo manteniendo los costos bajos, una empresa que se ocupa primero en el control remote-first puede ser la mejor opción. Sin oficinas, y pocos o nulos costos fijos.
Sin embargo, está interesado en formar un equipo con una excelente relación y al mismo tiempo aprovechar algunos de los beneficios del trabajo remoto, una empresa remote-friendly es una mejor opción.
El real problema ocurre cuando las empresas ven el trabajo remoto como una “recompensa”, lo cual es el caso del famoso día de home office. Lo importante es establecer una rutina con estándares cuantificables que permitan tener un recuento del progreso logrado, independiente de si el trabajo se lleva a cabo en la casa, en la oficina o en la playa.
Finalmente todos los equipos deberían considerar seriamente el acceso a talento internacional dado que estamos en una época en la que encontrar los mejores perfiles y contratarlos a nivel mundial es posible gracias a herramientas como ontop.ai, software que permite a cualquier empresa del mundo realizar contrataciones globales de manera legal en cualquier parte del mundo tan solo con un clic.
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LinkedIn: Santiago Aparicio
*El autor es cofundador de Fitpal,y TOP.
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