Claro rechazó la decisión, alegando que "no beneficia el país". Vea aquí las implicaciones de la medida para el mayor operador móvil de Colombia.
El Gobierno de Colombia acaba de tomar una de las decisiones más contundentes en el sector de las telecomunicaciones en los últimos años. La Comisión de Regulación de Comunicación declaró a Claro como operador dominante en el mercado de los servicios móviles, tanto para los servicios de voz, como los de datos o internet móvil.
Claro, que es filial de América Móvil, propiedad del magnate Carlos Slim, tiene el mayor número de clientes e ingresos en el mercado colombiano. La OCDE había alertado en 2019 que este operador tenía el 54% de concentración del mercado.
Fuentes consultadas por Forbes, explicaron que de acuerdo con la Ley la dominancia es una declaración preventiva de una situación de mercado, más no una sanción como tal.
Es decir, en adelante, tanto la CRC, regulador del sector, como la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC), autoridad de competencia, podrán proponer medidas cuando consideren que se deba prevenir el abuso de la posición de dominancia.
La compañía manifestó que desconoce el contenido de la resolución, pero de manera inmediata expresó que “esta declaración desalienta la inversión y no beneficia al país ni a los usuarios del servicio”.
“Solo con medidas que promuevan la inversión y la competencia de todos los operadores se podrá llevar cobertura a las zonas más carenciadas del país para contribuir al cierre de la brecha digital”, agregó el operador.
Según la compañía, esta decisión se basa en el análisis de información de hace más de cinco años, la cual “no refleja” la realidad actual del mercado. “La CRC toma esta decisión en primera instancia, sin que exista evidencia alguna de una falla en el mercado, como lo ratificó la Superintendencia de Industria y Comercio, máxima autoridad de competencia del país”.
Esta es una decisión de primera instancia que podrá apelar Claro, que a su vez dijo que hará uso de todos los recursos legales a su alcance para defender sus inversiones y los derechos de los usuarios.
Los argumentos de Claro
La firma de telecomunicaciones asegura que “el mercado opera bien” al ver la llegada de un nuevo operador al mercado que cuenta con 12 prestadores de servicios.
En su defensa, Claro sostiene que los usuarios pueden elegir y cambiar libremente su operador para voz y datos móviles, porque existe portabilidad numérica en un solo día, “los teléfonos se venden con bandas abiertas y doble SIM” y la ley prohíbe las cláusulas de permanencia. “Esta gran dinámica competitiva explica la reducción en más de un 50% en los últimos 3 años de los precios al público para los servicios de voz y datos móviles, como la propia CRC reconoce en los estudios que ha difundido públicamente”.
Así mismo, la empresa refiere que ha hecho más del 60% de las inversiones del sector en los últimos 20 años y que esta decisión no solo “castiga y desincentiva sus inversiones en el país”, sino que “beneficia” a las empresas competidoras que buscan regulación que les permita no invertir en Colombia, dilatar la subasta de 5G y “peor aún, en algunos casos, vender sus activos y operaciones en el país”.
Reacciones:
Desde Tigo no se quisieron referir específicamente al caso, pero emitieron un pronunciamiento expresando que respetan y acogen la decisión del ente regulador. “Quedamos atentos al monitoreo que se hará al proceso, según lo determinó la CRC”.
Movistar calificó como “un gran paso”, la medida, pero sostuvo que esta decisión no solo debe conducir al regulador a tomar medidas para corregir esta falla del mercado “evidenciada hace más de una
década, sino que debe orientar las decisiones de las demás autoridades sectoriales, por ejemplo, el Mintic de cara a las próximas decisiones sobre asignación de espectro”.
Desde Wom ven la declaración “como un avance positivo que podría llegar a equilibrar las condiciones del mercado (…) Es absurdo que un operador aproveche sus ingresos y cuota de mercado para incurrir en prácticas que limitan el desarrollo de la libre competencia”.
Sin embargo, hace unos meses se conoció una carta que los los presidentes de los operadores Tigo, Virgin Mobile, ETB, Partners Telecom Colombia (WOM), Telefónica (Movistar) y la Asociación de Operadores de Tecnologías de Información y Comunicaciones de Colombia (Asotic), enviaron a la OCDE para apresurar al Gobierno de Colombia en la toma de esta decisión.
En la misiva, manifestaron que el Gobierno estaba en mora con la toma de “medidas concretas que frenen el avance de un monopolio de las telecomunicaciones en el país”, advirtiendo que la concentración de la telefonía móvil “reduce la competitividad, con una menor digitalización, que impacta negativamente la innovación”.
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