El 2020 fue un año crucial para la reafirmación de la industria del software, pues la crisis global generada por la pandemia, se convirtió en una oportunidad de poner sobre la mesa lo fundamental y necesario que es para la modificación de modelos de negocios y la transición a la digitalización, lo que ha permitido que el software colombiano se afiance más como un producto de calidad para el desarrollo del país.
Por: Jorge Enrique Cote*
Cuando analizamos la evolución histórica del mercado de software colombiano, podemos observar que tiene un crecimiento del 17.6% anual, lo que representa un avance acelerado, sumando a la industria la indiscutible generación de empleo, pero también la necesidad de pensar en estrategias de formación de profesionales en el campo tecnológico que reduzca drásticamente el déficit de 60 mil personas, todo con el propósito de seguir progresando en el peldaño de la creación y exportación de tecnología de calidad.
El 2020 fue un año crucial para la reafirmación de la industria del software, pues la crisis global generada por la pandemia, se convirtió en una oportunidad de poner sobre la mesa lo fundamental y necesario que es para la modificación de modelos de negocios y la transición a la digitalización, lo que ha permitido que el software colombiano se afiance más como un producto de calidad para el desarrollo del país.
El Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), reveló que para 2020 el valor agregado del sector ascendió a 35,1 billones de pesos, presentando una disminución de 1,1% con respecto a 2019, porcentaje que no nos alarma ni atemoriza, por el contrario nos ha llevado a evaluar la visión del mercado de software entendiendo que debemos trabajar en cuatro aspectos fundamentales: tener mayor participación en las compras estatales por parte de las compañías colombianas que desarrollan software; fortalecer nuestra capacidad exportadora; trabajar en la calidad de nuestros productos y continuar invirtiendo en el recurso humano que nos permita llegar a esta meta que nos hemos definido.
Como propuesta de valor para continuar con la visión de liderazgo, las empresas privadas a través de alianzas estamos fortaleciendo los programas de formación de los estudiantes, enseñando sobre el manejo de nuestro software, enfocados en HCM, ERP, BPM y Salud, con el objetivo de tener profesionales con herramientas tecnológicas que les permitan, una vez terminen sus estudios, poner en práctica los conocimientos en dichas soluciones.
Asimismo, como empresarios vemos en iniciativas como el Gran Pacto de la Innovación, promovido por MinCiencias, una oportunidad para unir fuerzas y fortalecer la integración con el ecosistema científico y tecnológico del país, lo cual incentiva a las organizaciones firmantes del sector privado al intercambio de conocimiento entre el talento humano, además de propiciar espacios de creación de nuevas soluciones que aporten al crecimiento de la industria de TI.
Finalmente, este comportamiento económico nos ha permitido entender que el teletrabajo está a favor de las compañías pero también de los colaboradores, y una de las políticas que debemos acoger desde las empresas, es la oportunidad de contratar personal desde todos los puntos cardinales del país que tengan el talento que se necesita, pues permitirá descentralizar todo de las ciudades principales, generará mejor calidad de vida con salarios bien remunerados, aumentará la capacidad adquisitiva y mejorará el progreso de otros municipios de Colombia.
*El autor es presidente y CEO de Digital Ware.
Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes.
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