No se trata de una moda. Quedárse con un trabajo podrá depender de qué tanto sepa conectarse hábilmente con personas y sistemas, aprender constantemente, adaptarse a lo nuevo y diferente, y saber cambiar.
Si los 13.800 millones de años de historia del universo pudieran representarse en un año, donde el big bang entonces ocurriera en el primer segundo del 1° de enero, y hoy fuera el 31 de diciembre del mismo año, la historia de la humanidad habría transcurrido tan sólo en los últimos 14 segundos del año.
La Revolución Industrial, y la irrupción de los computadores e Internet, que imprimieron velocidad de vértigo al cambio, serían fenómenos de ocurrencia en una fracción del último segundo de ese año de la historia universal.
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Los profesionales de hoy saben que el tiempo que toma pestañear es suficiente para perderse de innovaciones importantes. Cuando los que hoy tenemos 60 años o más teníamos 35 o 40 años, hace apenas una generación, en nuestro país no era importante hablar inglés (excepto si se quería trabajar en una multinacional), y tener un MBA fácilmente se ponía en contra de las probabilidades de encontrar un empleo, pues la persona podría estar sobre calificada.
Eso lo comprobó una investigación que hicimos en Vásquez Kennedy 1998. En cambio, otra realizada muy recientemente, con profesionales y gerentes que buscaron y encontraron trabajo en este 2021, nos mostró que cuando tienen un estudio de posgrado -especialización o maestría- y/o hablan inglés, el tiempo que toma encontrar ese nuevo empleo, en cualquier tipo de empresa, es la mitad, frente a quienes no hablan inglés o tienen estudios solamente de pregrado.
Ese es un cambio muy grande ocurrido en lo que poco que dura una generación. Pero a esa misma generación y las que le siguen les han emergido nuevos retos, a una velocidad mucho mayor aún, que son los que provienen de la transformación digital de los negocios.
Esa transformación permea el perfil de todos los que trabajan. Las empresas, para mantenerse competitivas, deben ser competentes, y sólo con profesionales competentes digitalmente se podrá hablar de organizaciones competentes. Sólo siendo profesionales competentes digitalmente podremos abordar el futuro con garantías.
Entonces, si usted quiere encontrar un nuevo trabajo, le harán probablemente muchas preguntas en las entrevistas, que hace apenas cinco años nadie le habría hecho. ¿Cuáles son las plataformas digitales que más usa? ¿Con cuáles redes sociales es más diestro? ¿Qué ejemplos tiene de aplicaciones y programas nuevos que recientemente haya incorporado en su día a día de trabajo? ¿Qué recursos digitales usa más habitualmente para su autoformación? ¿Cómo clasifica y verifica la veracidad de la información que le llega?
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Quizás usted sienta que no tiene buenas respuestas para preguntas como esas, pero que su brillante historial en el área financiera, de cadena de abastecimiento, o de gestión comercial, son mucho más poderosas que esas competencias digitales, y seguramente tenga razón. Pero también puede ser verdad que las destrezas para desenvolverse en un entorno digital pesen cada vez más en la balanza, y que su falta lo hagan menos atractivo en el mercado, en nuevas empresas, o aún en su trabajo actual.
Pregúntese ahora cómo serían sus respuestas ante preguntas como estas, suponiendo que está siendo entrevistado para trabajar en la empresa con la que sueña: ¿Cómo es su experiencia en compartir y crear con otros mediante canales digitales? ¿Qué piensa del trabajo con otros mediante documentos colaborativos? ¿Qué ejemplos tiene de relaciones de calidad, creadas con otras personas, en entornos digitales?
O, estas: Para usted, ¿qué lo más importante en las tendencias del entorno digital de los negocios? ¿Cómo influye la lógica digital en la estrategia de su organización, en la de los demás jugadores en su mercado, y en la de sus clientes? ¿Cómo incorpora usted los beneficios de las lógicas digitales a su organización?
O, estas otras: ¿Usted cómo promueve estructuras organizacionales que faciliten la circulación de la información y el uso de herramientas digitales? ¿Cómo logra la eficacia de la comunicación con otros a través de canales digitales? ¿Cuál es el secreto para crear identidad y espíritu de equipo entre su gente?
Su entrevistador está indagando, en los tres últimos párrafos, por su desarrollo en tres competencias “tradicionales” de cualquier gerente: comunicación efectiva, visión estratégica y liderazgo. Pero preguntas “raras” como estas buscan es establecer el grado en que usted ha aprendido a desenvolverse y a aprender a trabajar en entornos de negocio altamente cambiantes, y usar esas habilidades, naturales en usted, en entornos en intensa transformación digital.
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En el mundo de hoy resultó imperativo saber conectarse hábilmente con personas y sistemas, aprender constantemente, saber adaptarse a lo nuevo y diferente, y saber cambiar. Algunos profesionales tienen una personalidad más dispuesta al cambio y al aprendizaje, y otros más a la productividad creando y operando rutinas eficientes. Unos y otros son necesarios, pero ninguno debería renunciar a desarrollar sus competencias digitales, para prosperar y mantenerse vigente en el nuevo mundo del trabajo, cada vez más digital.
Contacto
LinkedIn:Camilo Vásquez*
*El autor es consultor en desarrollo de carrera, con más de 25 años de experiencia. Es gerente de Vásquez Kennedy, empresa que ha apoyado el desarrollo profesional de más de 10.000 gerentes y profesionales; coach de desarrollo de carrera, especialista en Comunicación Organizacional y Psicólogo.