El managing director de Techstars Boulder Accelerator, el colombiano Andrés Barreto, cree en el emprendimiento digital "como bandera de movilidad social" y contó a Forbes por qué Techstars se ha vuelto una oportunidad interesante para startups que quieran agigantar sus pasos.
Andrés Barreto aprendió a programar desde adolescente, lo que le abrió oportunidades en Estados Unidos, a donde llegó procedente de su país de origen, Colombia, cuando tenía 12 años. A los 23 ya había levantado decenas de millones de dólares, como cofundador de Coderise.
Para 2013, conseguir capital de riesgo era mucho más díficil que ahora, sin embargo las brechas en Estados Unidos y Colombia eran mucho más profundas.
“En ese momento ninguna aceleradora me había preguntado de dónde era ni donde había estudidado”, sostuvo Barreto en entrevista con Forbes. “En 2013 volví a Latinoamérica y empecé a invertir en otros. Pero noté una diferencia. En Colombia intentaba hablar con empresarios y con grandes inversionistas. Las preguntas que me hacían eran relacionadas con el nivel socioeconómico, dónde había estudiada y de dónde venía”.
Barreto ahora pasa sus días evaluando empresas, reuniéndose con muchos emprendedores, con inversionistas y con mentores, como managing director de Techstars Boulder Accelerator, la aceleradora con sede en Denver (Estados Unidos), que recibe compañías de cualquier lugar e industria y les invierte US$120.000 durante un programa de aceleración de tres meses. Su valor se enfoca en conectar a emprendedores con mentores e inversionistas en Estados Unidos.
“Veo el emprendimiento digital como una bandera de movilidad social”, cuenta Barreto, quien cuando aplicó a Techstars con su compañía años atrás, ya había recibido US$1 millón de inversión. “Mientras estuvimos en el programa, cumplimos las metas que teníamos para 18 meses. Antes de que llegara el Demo Day, los inversionistas se ofrecieron a darnos US$5 millones más y nos triplicaron la valuación. Por eso acá no importa en qué etapa están las empresas”.
Desde su experiencia, observa que los inversionistas de Estados Unidos y de Europa “son más rápidos” y “ofrecen mejores términos” a los fundadores, lo que termina atrayendo también inversionistas locales de sus países.
Ese acercamiento, dicen desde Techstars, permite alas empresas “avanzar años de trabajo”.
Barreto reconoce que existe una brecha de capital en las etapas más tempranas en América Latina, porque las lógica dice que ahí el financiamiento podría llegar de amigos y familiares. Por ello quienes no tienen ni familiares y amigos que puedan respaldar el arranque de una compañía, están encontrando en aceleradoras como YCombinator, Techstars y 500 Startups una opción de respaldo.
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