La acción de la compañía colombiana llegó a caer hasta 45% en el mercado de las acciones tecnológicas en Estados Unidos.

Tecnoglass, la compañía colombiana inscrita en Nasdaq, cayó en el mercado de acciones estadounidense desde los US$33,7 hasta un mínimo de US$18,28 según reportaron los sistemas informativos del mercado de valores en Estados Unidos. Al final de la jornada mostró una leve recuperación hacia los US$22.

La reacción entre los inversionistas se da por un informe de la firma Hindenburg Research titulado “Tecnoglass: conexiones con un cartel de la cocaína, acuerdos familiares no revelados e irregularidades en la rendición de cuentas, todo en un Spac de Nasdaq”.

El informe revelado este jueves contiene una advertencia para los inversionistas: “Después de una amplia investigación, hemos tomado una posición corta en acciones de Tecnoglass. Este reporte representa nuestra opinión y exhortamos a cada lector a hacer su propia debida diligencia”, señala Hindenburg en el documento.

En el reporte se destaca el incremento en el precio que ha tenido la acción de Tecnoglas este año. El 9 de diciembre de 2020, la acción de la compañía se encontraba en U$5,52 y hasta ayer, el precio había aumentado hasta los US$33,7. Eso representa un incremento de 574%.

Para Hindenburg, esto se explica por el boom en construcción de vivienda en Florida que ha aumentado la demanda por insumos como vidrio, que son el core de negocio de Tecnoglass.

No obstante, Hindenburg lanza una advertencia sobre los antecedentes de los fundadores de Tecnoglass y la forma de administración de la compañía.

“Nuestra investigación de varios meses ha incluido la revisión de los registros judiciales en Estados Unidos y Colombia, archivos de emisiones, registros corporativos y de propiedad, cifras de exportaciones y reportes de medios durante décadas. Hemos identificado serias señales de alerta relacionadas con la administración, numerosas transacciones no reveladas entre partes que ponen en duda los resultados financieros revelados por la empresa”.

Dentro de los hallazgos que contiene el informe está que hace 25 años, en 1996, las autoridades judiciales de Estados Unidos levantaron cargos contra “José y Christian Daes, los actuales CEO & COO de Tecnoglass, alegando que los dos sirvieron como administradores y operadores del cartel de Cali, ayudando a contrabandear armas y más de 200 toneladas de cocaína y lavaron dinero. Se emitieron órdenes de arresto en contra de José Daes quien fue declarado prófugo”.

Esta versión coincide con lo que ha venido señalando el portal colombiano Primera Página desde hace varios años.

El informe de Hindenburg también asegura que en 1999 José Daes fue encarcelado en Colombia por acusaciones de enriquecimiento ilícito, luego de que “los fiscales encontraran cheques pagados a una subsidiaria de Tecnoglass por compañías fachada controladas por el jefe del cartel de Cali”.

“Los cargos contra los dos fueron luego desestimados o eliminados en un expediente judicial en su mayoría sellado, lo que llevó a los medios de comunicación locales a especular que el sellado pudo haber sido para proteger a quienes cooperaron en el enjuiciamiento de otros acusados”, señala el informe. Posterior a estos hechos, en 2004, José Daes fue víctima de un atentado del que salió vivo, pero con impactos de bala en la cabeza y el cuello.

Hindenburg señala que desde el principio de Tecnoglass personas relacionados con el cartel de Cali, que sobrevivieron a la represión de las autoridades colombianas, fueron accionistas de la compañía y se mantuvieron hasta 2020.

“Alrededor de 2012 y 2013, el CEO y el COO de Tecnoglass cayeron bajo el escrutinio del regulador colombiano por cuenta de acusaciones según las cuales ellos establecieron 359 empresas de papel como parte de un esquema para manipular las elecciones en la Cámara de Comercio de Barranquilla. Luego, las autoridades dictaminaron que la estructura corporativa de Tecnoglass era opaca y sancionaron a los hermanos Daes”.

Otro de los aspectos que aborda el informe es el de la salida a bolsa de Tecnoglass a través de un Spac. Según Hindenburg, esto ocurrió en diciembre de 2013, y para concretar el proceso la compañía debió tener el escrutinio de tres auditores durante un año. “Los auditores señalaron debilidades relacionadas con la identificación y conciliación de transacciones con partes relacionadas”, explica la compañía que emitió el informe.

“El mayor cliente de Tecnoglass de 2013 a 2016, una empresa llamada GM&P, representó el 26% de las ventas solo en 2016. El director financiero del cliente ‘independiente’ es un primo del director ejecutivo y director de operaciones de Tecnoglass, según los registros públicos. No encontramos que se hubiera hecho pública esta relación familiar”, señala el informe.

Otra advertencia se refiere a la compañía Window Design And Installation LLC, a la que Tecnoglass le hizo ventas de exportaciones entre 2016 y 2018. El informe revela que “la supuesta entidad de vidrio y construcción no tiene signos evidentes de operación, está administrada por los sobrinos del CEO y el COO y tiene como sede una residencia propiedad de la hermana del CEO y el COO de Tecnoglass”.

Otra de las revelaciones del informe es que entre 2015 y este año los registros de exportaciones muestran que Tecnoglass exportó producto a otra compañía llamada “Glass Studio Group LLC”, que también tiene vínculos no revelados con los sobrinos del CEO y el COO.

El informe contiene muchas revelaciones adicionales y si desea consultarlo en su totalidad puede hacer click aquí.

Hasta el momento de publicación de esta nota, Tecnoglass no había hecho un pronunciamiento corporativo sobre este informe de Hindenburg.

Entre tanto, su COO Christian Daes trinó: “de los mismos creadores de la reventa boletas, tranquilos. Es una mentira tras otra. Esto termina bien. FE”.